Hospital Nacional (Supercorp AU)

1.

Hoy es el último día del año y en la casa de los Luthor eso es motivo de celebración.

- ¡Hey! Apúrate, madre dice que los abuelos van a llegar en cualquier minuto - habla un joven de unos 30 años, de cabello rubio perfectamente ordenado - Sabes que no le gusta esperar
- Está bien, ya voy - dice rodando los ojos - ¿Está en el salón?
- Sí
- Bajo en cinco minutos
El joven se estaba yendo cuando decide volver y dice sonriendo
- Por cierto, te ves preciosa
- Gracias Lex - sonríe de vuelta - Me alegro de que hayas venido
- Yo también Lena, yo también.

Lena

Quedan exactamente 5 horas para que se termine el año. Muchos dicen ¡Sí! ¡Genial! Año nuevo, borrón y cuenta nueva, este va a ser mi año y tienen un montón de cábalas para atraer el dinero, el amor, suerte, empleo y demás. Yo sinceramente no quiero nada, a excepción de que este año se termine lo más pronto posible. Siento que en este minuto soy un desastre, por lo menos a nivel emocional, ¡Cómo me gustaría no tener emociones ahora mismo! Son un asco.

Pero tengo que ser realista, tampoco toda mi vida es un caos, por lo menos tengo mi carrera, soy doctora, y estoy haciendo mi residencia para ser cirujana en el mejor hospital del Distrito de Columbia y a mi parecer, del país. Estudié medicina en Harvard y me titulé como médico general con honores, para tener 24 años digamos que estoy un poco adelantada, tengo el CI más alto que la mayoría y es una de las razones por las que entiendo la materia más rápido y junto con la buena memoria creo que hasta ahí se queda lo bueno que hay conmigo.
Termino de arreglar mi vestido y decido ir al salón, a pesar de que los invitados de mis padres no deberían llegar hasta dentro de media hora más, mis abuelos ya están aquí, lo sé ya que se escucha la risa poco sutil del abuelo Richard.

Ya llegando al salón donde están los que han llegado, reparo en unas maletas que están en el hall y las reconozco de inmediato

- Se supone que estaba en New York... - digo en un susurro
- ¿No me vas a saludar? – dice alguien abrazándome por la espalda dándome un beso en el cuello
Me giro y la veo con una sonrisa gigante – ¡Se supone que volvías mañana! – creo que mi voz nunca se había escuchado tan chillona
- Yo también te extrañé, pero no es necesario que chilles – dice imitándome
- ¡No me imites! – digo abrazándola por la cintura enterrando mi cara en su cuello – fue raro no estar contigo en navidad – le digo y creo que mi voz sonó mas melancólica de lo que quería, noto que ella se da cuenta que ya que se tensa
- ¿Pasó algo? – pregunta preocupada
- No, tranquila, no te preocupes, no pasó nada – acaricio sus mejillas rosadas – Tengo tu regalo de navidad arriba
- Después me lo entregas - se aleja un poco – Pero... yo tengo el tuyo aquí – mueve una de las maletas y saca un regalo de 1 metro de largo y ancho
- ¡Pero eso es muy grande! El que yo te tengo es pequeño
- Y eso que importa, ten, ábrelo – dice entregándomelo
Rompo el papel y veo lo que hay
- ¡Ay no! ¡Es muy lindo! – le digo mirándola, estoy segura de que debo tener cara de embobada.

Es un collage con fotos que nos hemos sacado juntas, hay una donde estamos en la playa mirando hacia el mar sin la parte de arriba del bikini con los brazos hacia arriba dándole la espalda a la cámara, hay otra en donde estamos en la cocina sonriendo abrazadas con la cara llena de harina, y otra en donde salgo yo tocando el piano mientras ella está con la guitarra formando una pequeña O con la boca ya que estaba cantando y así sucesivamente

- Hace tiempo que te quería hacer un regalo así, tenemos muchas fotos juntas, así que me demoré un poco en escoger, pero bueno, este es el resultado – me dice sonriendo - ¿Te gustó?
- ¿Bromeas? Por supuesto que me gustó – digo abrazándola– Es el regalo más lindo que he recibido - cierro los ojos
- Seguro lo dices porque soy yo quien te lo regaló, si lo dices por eso te juro que te golpeo - me da un beso en la mejilla
- Obvio que lo digo en serio- le digo
- Más te vale – me responde

Nos quedamos así un momento hasta que siento que alguien carraspea, me giro y lo veo

- Lex, hola, ¿viste quien llegó?
- Si, ya la vi, hola – le dice mirándola de arriba abajo – Aún no estás lista, dejen de abrazarse tanto y apúrense. Lena, la abuela Eleonor está preguntando por ti
- Me cambio rápido, ¿Me acompañas? – me pregunta
- Se sabe el camino perfectamente, no es necesario que vayan juntas – dice molesto
- ¡Lex! No es necesario que seas patán, ¿Qué te ha hecho ella? – le digo aún más molesta y se va - Nunca he entendido por qué te trata así – le digo arrugando el ceño
- Hey, tranquila, no vale la pena – me pasa un brazo por los hombros para tranquilizarme - Yo creo que está celoso de nuestra relación, es un envidioso, déjalo – me da un beso en la sien – Ve con los demás, yo me voy a cambiar de ropa – me da un leve empujón con la cadera – Me demoro 5 minutos
- Está bien – suelto un suspiro y ella toma una de las maletas y camina hacia las escaleras – Si te demoras mas de 5 minutos voy a subir a buscarte – le digo alzando la voz
- Como digas – dice riendo mientras sube las escaleras

No sé que sería de mi sin ella, la amo con todo mi corazón, suspiro otra vez y me dirijo al salón para saludar a la familia.
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