Rey Demonio

48. Pagando con Sangre

Salí del baño y mire a las chicas ya vestidas, cada uno se miraba bien en su traje, a Danasha le hacendaba bien el rojo, estoy segura de que Marc no despegara el ojo de ella.

Abby lucia un hermoso vestido negro, el color favorito de Axel, cada uno tienta a sus almas gemelas.

— ¿podemos empezar?— preguntó Abby y asentí.

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Las tres terminamos de arreglarnos, no había día más feliz que este para mi 

Mi cabello iba suelto, Ty quiso que las coronas fueran utilizaras el día de hoy, aun que al principio no quise usarlas él me dijo que no importaba que tan antiguo era, era parte de las celebraciones del reino y era necesario ver que respetábamos eso.

Mire mi reflejo en el espejo de nuevo mientras las chicas salían de mi habitación, el vestido era perfecto, sé que a él le gustaría.

— ya esta pequeña...— dijo mi padre entrando— te ves hermosa...— dijo con una sonrisa.

— gracias papá...— mi padre entro a la habitación y me abrazo.

— creciste y no pude darme cuenta... No pude protegerte mi niña...

— siempre lo haces...

— quiero que seas feliz, quiero que tengas la felicidad que te arrebataron.

— la tendré, la tengo desde que los encontré.

— te amo mi niña— dijo llorando.

— igual papá...— limpio sus lagrimas.

— es momento de bajar, Maximiliano te espera a mitad de las gradas.

— gracias papá...— mi padre salió de la habitación y yo después de él.

Empecé a bajar las gradas viendo a todos los de mi reino y los de Maximiliano. Al ver lo a él tan tranquilo sonreí, pero su mirada cambio al verme, sus ojos y boca se ampliaron, esa reacción de sorpresa era la que esperaba, llegue hasta él y tome la mano que extendió. 

— cierra la boca, entraran moscas...— dije.

— estas hermosa...— dijo sonriendo— pero... Si alguien que no sea yo coloca sus manos en ti quedara sin ellas...

Bajamos juntos las gradas entre aplausos.

Al llegar al final Maximiliano tomo mi cintura acercándome más a él y haciendo que casi caiga.

— no exageres...— dije.

— no lo hago, solo dejo en claro a todos que eres mía, sé que eras la tentación para todos, y ahora lo serás más...

Tyler se acerco a mí para abrazarme pero Maximiliano me alejo.

— ¿enserio?— dije pero él gruño a Ty y se oculto en mi cuello— ¿Qué te pasa?— pregunte.

— déjalo Emi, es normal, recuerda que me sucedió lo mismo con Lucí, estuve por matar a una mujer por ella...— reí— no dudara mucho, solo hasta que pase el efecto que tú provocas en él, será mejor que no te separes de Maximiliano....

— gracias Ty, eso haré.

Ty se alejo de nosotros para ir con Lucí, aleje a Maximiliano de mí y tome su rostro en mis manos

— sé que puedes dejar tu posesividad de lado y hacer un día perfecto hoy...

— lo intentare...— dijo rendido— ahora... ¿quieres bailar?