Cariño, búscate una zorra

Capitulo 26

Ya han pasado dos meses desde que comenzamos a salir y fueron los dos mejores meses de mi vida. Nuestra relación mejora día a día, la realidad es que somos como dos pegotes haciendo todo juntos...caricias por aquí, besos por allá, y mariposas a todo rato...oh ya me he vuelto cursi. Todavía es raro llamar a Nick como mi novio, pero no me sale decirlo sin una sonrisa.

Tom y Maika se encuentran en un punto de su relación en que todo es tensión, pero todavía no nos cuentan nada ¿Y Anna? Ella sigue estando con Jason...

Me hago la dormida cuando siento que Nick entra en mi habitación. De vez en cuando le gusta venir a despertarme entre semana, mi madre lo ama. Siento como la cama se hunde y su mano acaricia mi mejilla – Buenos días...- dice dándome besos cariñosos en la mejilla – Se que te has despertado al momento de que entré con los waffles – río y me estiro llevándolo conmigo, huele tan bien...- ¿Cómo es que hay días en que te despiertas toda perfecta y otros en los que me da miedo despertar a la bestia? – dice riendo – Porque hay días en los que me despierto antes de que llegues – le respondo sonriendo y por suerte este era uno de ellos – Ahora, quiero mi desayuno – le digo dejándolo en la cama, pero me agarra volviendo a acercarme hacia él – Antes quiero un beso de buenos días – dice poniendo sus labios tipo pez – Paso, gracias – le digo molestándolo. En un movimiento pone todo su peso sobre mí – Pesas como un elefante – le digo quejándome - ¿Me estas llamando gordo? – comienza a hacerme cosquillas - ¡No! Lo juro – digo riéndome - ¿Me darás un beso? – pregunta frenando a la espera de mi respuesta. Lo tomo por la nuca acercándolo hacia mí dándole un beso, me lo quito de encima y corro hacia mi plato en el escritorio – Mi novia dejándome por un par de waffles ¿Quién lo diría? Apura que tenemos clases – me dice Nick desde la cama.

-'Somewhere over the rainbow'- cantábamos al unísono la canción de Israel Kamakawiwoʻole de camino a la universidad - ¿Qué sucede? – pregunta Nick mirando mientras río – Has desafinado en esa – le contesto – Oh, discúlpame...no sabía que estaba cantando con Beyoncé a mi lado – dice sarcásticamente, le hago una burla con la lengua y toma mi mano como de costumbre mientras con la otra sostenía el volante – Dime ¿Has visitado a Daisy últimamente? – le pregunto intrigada – Sí, hemos hablado un poco en las visitas...pero no mucho. Le darán el alta la próxima semana – me dice mirando al camino - ¡Eso es genial! – digo entusiasmada, pero el solo sonríe - ¿Qué sucede? – se encoge de hombros – No quiero hablar de eso ahora – dice y saca la vista del camino para sonreírme. Decido no tocar más el tema por el resto del camino.

-¿Te has ofendido? – pregunta Nick atrayéndome hacia él en el estacionamiento – No, lo entiendo...estas de muy buen humor hoy – le digo sonriendo poniendo mis manos en sus hombros – Poder despertarte en la mañana me pone de muy buen humor – sonrío - ¿Aunque me despierte antes de que llegues? – le digo acariciando su cabello – Eso es un plus, ya que me dejas besarte – río, eso es cierto. No me gusta darle un beso con mi aliento mañanero...por eso es que siempre trato de despertarme antes de que llegue, pero hay veces en que me quedo dormida. Me acerco apoyando mis labios en los suyos, disfrutando lo que provocaba en él – ¿Y si nos salteamos las clases? – dice depositando un par de besos en mi cuello, suspiro – No podemos...- digo riendo. Lo tomo de nuevo atrayéndolo hacia mí, saboreando su beso. Nick me levanta, apoyándome en el auto el beso tornándose apasionado – Nick...- le digo alejándome un poco, cayendo en la cuenta de que estábamos en el estacionamiento. Miro hacia mi alrededor y por suerte solo había unas pocas personas caminando a paso rápido ya que era un poco tarde – Necesito un minuto – dice, lo vuelvo mirar sonriendo - ¿En serio? – le pregunto burlona - ¿Qué? Tú lo provocaste – dice y lo aparto riendo.

-Gran espectáculo se echaron en el estacionamiento – me dice Anna en un susurro. La profesora se encontraba explicando un tema muy complejo. La miro sorprendida - ¿Viste eso? – le pregunto avergonzada – Tranquila, no había nadie – dice riendo - ¿Ya lo hicieron? – pregunta intrigada, le doy un manotazo en su hombro - ¡Ouch! – se queja – No, no lo hicimos todavía...aunque no es de tu incumbencia – digo y ríe. Era un tema que habíamos hablado con Nick y quedamos en no apurar nada, lo cual me vino como anillo al dedo porque no creo estar lista todavía - ¿Te ha dicho algo Maika? – le pregunto cambiando de tema mientras anoto lo escrito en la pizarra – Dice que Tom la esta cansando con los celos y las peleas constantes, pero confío en que se arreglarán – asiento deseando en que tenga razón - ¿Y tú con Jason? – se encoge de hombros – Es una relación sin ataduras, por lo que puedo hacer lo que me plazca – dice sonriendo – Sabes que eso no termina bien...- le digo negando con la cabeza preocupada por Anna.

- ¡Ey! – digo encontrándome a Alex sentado solo en las gradas – Criot, estabas desaparecido – le digo bromeando mientras me siento a su lado. Hace días que no hablábamos – Oh tú pasas mucho tiempo con tu novio...- dice bromeando, río – O tú pasas mucho tiempo con Sam...- digo contratacando, pero eso no le causa gracias – Lamentablemente, no ha funcionado – me dice mirándome – Oh, lo siento ¿Cuándo terminaron? – le pregunto, maldiciéndome mentalmente por no haber preguntado antes – Dos semanas – cierro los ojos - ¿Por qué no dijiste nada? – me mira sonriendo – No quería arruinar tu burbuja de felicidad con malas noticias – dice - ¿A qué te refieres? – le digo confundida – A qué desde que estas con Nick vez todo color de rosas – dice riendo – Lo digo en el buen sentido, me pone contento que te haga feliz – dice aclarando – Igual, me habría gustado estar ahí para ti – le digo un poco molesta – Sólo olvídalo...- me dice enderezándose.

-¿Qué olvide qué? – le pregunto – No quiero que te sientas mal por cosas que me suceden a mí ¿okey? – peina su cabello con sus manos – Además, he decidido volver a Canadá – el mundo se frena - ¿Qué dijiste? – me levanto mirándolo en shock – Qué he decidido volver a Canadá...el vuelo sale este sábado – dice levantándose - ¡¿El sábado?! ¿Por qué te irás de nuevo? ¿Por qué mierda no dijiste nada? – pregunto dolida – Porque no estoy bien, Emma – dice frustrado - ¿No lo entiendes? Mi vida es una completa mierda en este momento y necesito alejarme un tiempo de todo – se sienta rendido – Estuve a nada de volver a lo de antes, Emma. No estaba del todo bien y lo de Sam fue la gota que volcó el vaso. Estas dos ultimas semanas fueron un infierno para mí y mi mejor amiga ni se dio cuenta – me mira - ¿Me hechas la culpa a mí? – le pregunto incrédula - No, claro que no...solo digo que estoy solo en esto y necesito alejarme un tiempo – río - ¿Esa es tu solución? – le pregunto - ¿Disculpa? – pregunta levantándose – Irte y dejar a todos los que se preocupan por ti...después de todo lo sucedido no aprendiste nada, Alex – mi voz quiebra – Sigues creyendo que estas solo porque nadie quiere estar contigo...pero la realidad es que estas solo porque quieres. Yo estoy aquí para escucharte, Maika, Anna, Tom...Sam, todos ellos están aquí también – digo – Pero ¿en algún momento decidiste abrirte a alguno de nosotros? No lo creo. Decidiste guardarte tus problemas una vez más creyendo que nadie se preocupa por ti y sacar el primer vuelo de nuevo a Canadá para luego volver y hacer como si nada – trato de calmar mi frustración y me limpio las lagrimas en mis mejillas – Solo te pido que pienses en eso y si decides irte de nuevo...abandonarme de nuevo...ten en cuenta que cuando decidas volver no estaré aquí esperándote. Una vez que ese avión despegue a mí me perdiste ¿entiendes? – lo miro una ultima vez antes de tomar mis cosas y largarme de ahí.

-¿No tienes hambre? – me pregunta Nick viendo como revolvía con el tenedor mi almuerzo, niego con la cabeza y le sonrío para que no se preocupe. No sería yo la que les de la noticia de Alex, eso es algo que él tiene que hacer por su cuenta – Yo sí que tengo – dice Tom robando mi plato - ¡Tom! – grita Maika – Devuélvele la comida a Emma – le reprocha – Dijo que no tiene hambre ¿Cuál es el problema? – se defiende Tom dando un bocado. Maika se levanta enojada yéndose a paso rápido – No puedo creer que se enoje por esto ¿Quién la entiende? – pregunta Tom confundido - ¿No se te ha ocurrido preguntarle que le sucede? – le pregunta Anna – Ahora que lo dices, ha estado así durante días – ruedo los ojos – Pues, anda y pregúntale...- le reprocha Anna. Tom se levanta siguiendo el consejo de Anna yendo tras su novia.

Nick me acaricia el cabello y apoyo mi cabeza sobre su hombro - ¿No han visto a Alex? – pregunta Anna masticando su comida – No – responde Nick - ¿Y tú, Emma? – niego con la cabeza ocultando lo lastimada que me encuentro sentimentalmente – Sawyer, aleja tus manos de mi hermana...- me giro sorprendida sin poder creerlo - ¡¿Kyle?! ¡Has vuelto! – digo levantándome saltando a sus brazos – Era una sorpresa, tres meses sin poder pelearte fue demasiado tiempo y además – dice acercándose – Tenía que controlar a Sawyer – dice susurrando a mi oreja. Lo abrazo de nuevo y comienzo a sollozar, sin poder controlarlo – Oye, se que me extrañaste...pero, tampoco para tanto...- lo interrumpo – Alex vuelve a Canadá – digo llorando - ¡¿Qué?! – dicen Alex, Nick y Anna al unísono.