Capítulo 14

4.4K 275 10
                                    

Ante la tensión que había en la casa decidimos con las chicas relajarnos por la noche saliendo a un bar e invitamos a Samantha quien nos caía de maravilla. Nos costó convencer a Maika de que se sume...desde que está con Tom no se separa de él. Pero bueno...supongo que así es el "amor".

-Hay que disfrutar esta noche sin los idiotas ¿Verdad, Emma? – me pregunta Anna levantando su cerveza para que brindemos – No lo podría haber dicho mejor, Anna – le digo con una sonrisa chocando su vaso. Maika nos mira negando con la cabeza - ¿Cuál es tu problema? – le pregunto sonriente – El problema, mi querida Emma, es que no le quieres dar una oportunidad a Nick. Le has soltado una bomba cuando el por lo menos estuvo intentando acercarse a ti...en cambio tú solo lo alejaste – me sorprendo ante el pensamiento de Maika – Yo...estoy con Maika en esta – opina Anna tomando un sorbo - ¿Y tú, Sam, que opinas? – le pregunto con la esperanza de que ella este de mi lado – Por lo que he escuchado...creo que deberías de darle una oportunidad – ruedo los ojos – Puede que ¿Nick? – asiento – Que Nick, tenga sus problemillas como todo hombre con sus hormonas y bla bla, pero anda a saber cuales son sus verdaderos problemas o su pasado...eso es lo que opino – dice Sam, levantando sus manos – Ya he intentado derribar ese muro, pero cada vez que pregunto sobre Alex me cambia de tema – digo suspirando - ¿Qué se supone que haga? ¿Que lo golpee hasta que me diga la verdad? – río – Lo siento, pero no es mi estilo – digo riendo con las chicas.

-Creo que deberías intentarlo una vez más...que no puedes avanzar si él no puede abrirse – dice Sam pensativa, me gusta su razonamiento – Hablando de Alex ¿Qué te pareció, Sam? – pregunta Maika con una sonrisa y las tres la miramos expectantes – Yo...ya lo había conocido la otra noche...es ¿tierno y lindo? No lo conozco tanto, a decir verdad- dice tímida, las tres sonreímos – Bueno, basta de hablar de chicos. Dijimos que era una noche libre de ellos, quiero divertirme...así que ¡Una ronda de tequila para todas! – dice entusiasmada Anna.

Tres rondas de tequila y Anna se encontraba bailando encima de la barra moviendo sus caderas seductoramente al ritmo de la música. Maika y Sam hablaban animadamente con un par de chicos y yo decidí hacerle compañía a Anna por un rato. Una vez que me abandonó en la barra por un chico que divisó a lo lejos, me bajo y camino hacia nuestra mesa donde se encuentra ocupada por un chico morocho mirando su celular – Hola – lo saludo sentándome en la mesa descansando mie pies. El chico levanta su mirada y no puedo distinguir si sus ojos son grises o azules – Hola – dice sobre la música con una sonrisa – Bailas bien – dice apuntando hacia la barra – Gracias, no es mi estilo – digo sonrojándome – Bueno, pues ahí no lo parecía – dice riéndose – Jason – agrega extendiendo su mano – Emma – le respondo tomando su mano - ¿Quieres ir afuera? Hay mucho ruido aquí – dice sonriendo. Decido que no tengo nada que perder y mis amigas están ocupadas por lo que asiento y lo sigo hacia afuera.

Noto ahora en la luz que sus ojos definitivamente son grises, es un chico alto y musculoso – Así que Emma ¿Qué te trae por aquí? – pregunta tomando un cigarrillo de su caja y prendiéndolo – Bueno, Jason...he venido de vacaciones, al igual que la mayoría de estas personas – digo sonriendo, rueda los ojos y se apoya en el auto estacionado – Buena respuesta...juro que te conozco de algún lado ¿vienes aquí a menudo? – da una calada y me ofrece, pero niego con la cabeza – Solía venir de pequeña con mi familia...pero hace años que no venía – asiente pensativo - ¿Puedo preguntar el por qué no has venido durante mucho tiempo? Es tan hermoso y turístico – dice sarcásticamente. La realidad es que es un destino solo para los jóvenes de mi edad que deciden escaparse un par de días de los estudios y venir a beber – Problemas familiares – digo sin querer entrar en el tema – Tú ¿vives aquí? – pregunto rápidamente – Solía vivir aquí, me mudé a la ciudad por los estudios – asiento sorprendida - ¿Y que hacías para divertirte aquí durante el año? – pregunto riendo. El pueblo es muy lindo, pero para un niño debió de ser sumamente aburrido cuando no era temporada – Ya que preguntas, solía jugar con una hermosa niña, un poco competitiva...que solía venir con su familia seguido. Recuerdo que siempre perdía contra ella cuando nadábamos en el lago Ritwood, y que su hermano nos aplastaba los castillos de arena...pero veo que esa niña ha crecido y olvidado el País de Nunca Jamás- sospechaba que era él. El mismísimo Jason Warrel, mi mejor amigo en este pueblo fantasma – Jason Warrel ¿Como podría olvidarte? - digo abrazándolo – Bueno, ya estaba entrando en pánico – dice riendo – Siento no haberte hablando antes – digo avergonzada – No lo sientas, cuando no apareciste un verano y luego el otro... supe que algo no andaba bien y me enteré lo de tu padre...era un gran hombre – me alegra que sepa ya lo sucedido y no tener que contarle – Sí que lo era...- digo sonriendo.

Por un largo rato estuvimos poniéndonos al día. Desgraciadamente asistía a la Universidad "enemiga" y formaba parte del equipo de football, nuestro mayor rival...cuando Kyle se entere...- ¿Emma? – me giro sorprendida encontrando a un Nick agitado – Lo siento...no quería interrumpir ¿podremos hablar luego? – pregunta amablemente ¿y a este que le sucede? – Nick, él es Jason Warrel. Jason, es el Nick Sawyer – se dan un apretón de manos. Le había contado un poco de Sawyer a Jason – Yo, tengo que ir por mi...chica. Nos vemos luego, enana – besa mi mejilla dejándome sola con Sawyer...no había tal chica.

-Así que...Jason Warrel, jugador del Southern Cross ¿es tu amigo? – pregunta con sus manos en los bolsillos - ¿De qué querías hablar? – pregunto cambiando de tema – Quería disculparme, Emma – dice arrepentido – Necesito que me des una oportunidad más, solo una – lo miro sorprendida – Te demostraré que sí me importas, que no eres solo una más en mi "lista", aunque todavía no se bien a que te refieres con eso...estuve horas tratando de decifrarlo con Tom, pero...- ruedo los ojos – Nick...- lo corto, ya se estaba yendo de tema – Sí, lo siento de nuevo. Prometo contarte lo que necesites saber de mí...pero necesito que entiendas que no será fácil para mí, por lo que te pido paciencia – dice acercándose – Sí la vuelvo a arruinar, no te volveré a molestar en tu vida...solo una oportunidad más – pienso en lo que me dijeron las chicas y en lo que acaba de decir Nick – Solo habrá una más, Sawyer. Y más vale que no lo arruines – digo suspirando, sus ojos se iluminan - ¿Enserio? – pregunta con una sonrisa y asiento. Me levanta del suelo con un abrazo – Prometo que no te arrepentirás – dice dejándome de nuevo en el suelo.

Nos miramos durante unos segundos que parecieron horas, con sus manos en mi cintura y mis manos sobre sus hombros...tan cerca. Miro sus ojos con ese brillo característico de Nick, dejo que acaricie mi mejilla y me alejo lentamente. Si no cuido mis sentimientos terminaré con mi corazón enterrado en el centro de la Tierra - ¿Qué me dices si...- Cassy aparece interrumpiendo a Nick - ¿Dónde estabas? Dijiste que ibas por una bebida y aquí te encuentro – me mira de abajo hacia arriba – Te puedo pasar números de cirujanos plásticos, si lo necesitas – me dice con una sonrisa – No me sorprende que tengas una lista de ellos...- digo sonriendo falsamente, mientras rueda los ojos – Bueno, luego hablamos...iré a buscar a Anna que esta un poco descontrolada- digo queriendo salir de aquí, no soportaba verlos juntos...en especial a ella – Pero...creí que – comienza a decir Nick ignorando a Cassy – Déjala, Anna seguro está llorando por los rincones. Debe de ser duro el ser usada por lástima – dice con una sonrisa – No lo sé, dime tú como se siente – digo devolviéndole su insulto – No entiendo como la defiendes...se acostó con un chico que estaba de novio y que encima es el hermano mayor de su mejor amiga – antes de que haga algo no muy femenino Nick me toma del brazo alejándome de ella – No entiendo como te puedes relacionar con esa persona – digo frustrada – No es mi novia – dice suspirando – Lo que sea, iré a ver cómo está Anna – digo soltándome – Bien – dice sonriendo – Bien – repito.

Cariño, búscate una zorraWhere stories live. Discover now