Cap.5 Adiós orfanato

1.3K 104 88
                                    

SHERWIN

Días después de lo ocurrido en el orfanato, nos llegó un sobre negro en el que se nos confirmaba la adopción de Sebastián así que solo teníamos que ir a recoger al pequeño y firmar unos cuántos papeles.

- ¡Estoy tan feliz! - dijo Jonathan por décima vez esta mañana.

- Si Jonathan, yo también estoy feliz pero ya cálmate - dije riendo levemente mientras limpiaba algunas de las fotos que tomé hace varias semanas.

- ¡Oh, por cierto! Llamaron de la agencia de modelos en la que sueles trabajar, quieren que fotografíes a una de sus mejores modelos mañana - dijo Jonathan poniéndose a mi lado.

- ¿Cuál exactamente?

- Una tal... Meya... Miya - dijo Jonathan confuso.

- ¿Maya? - dije con un pequeño brillo en mis ojos al pensar en mi amiga.

- ¡Exacto, esa misma! - dijo Jonathan riendo.

Genial, aunque amo estar con mi amiga Maya, quería pasar más tiempo con Sebastián para que se acostumbre a estar con nosotros, pero trabajo es trabajo.

(...)

- Firmen aquí, aquí, y aquí - dijo la señora Sol Piedad pasándonos tres papeles para que los firmemos.

<< Recuerda leer la letra pequeña Sherwin >>

Esto no es una película conciencia.

<< ¡Siempre hay que leerla! >>

- Bien, pueden retirarse - dijo la señora a secas.

Como siempre...

- ¿Y no le darán la despedida a Sebastián? - dijo Jonathan poniéndose de pie haciendo que yo también lo hiciera.

- Ese fenómeno no le hará falta a nadie, así que no hace falta una despedida - dijo Sol Piedad como si nada.

La verdad es que esta mujer me hierve la sangre...

<< Vamos Sherwin... no te controles, dile lo que sientes >>

No... ¿y si digo algo malo?

<< No importa, además Sebastián es legalmente tu hijo, así que no hay nada que perder >>

- No se cómo demonios una persona como usted se hace llamar religiosa - dije con un tono bastante molesto haciendo que Jonathan y la vieja esa me miraran sorprendidos.

- Se nota que ustedes serán unos padres terribles. ¿Cómo te atreves a hablarle así a una dama, a una señora mayor? - dijo la señora ofendida.

- A ver señora, usted de dama no tiene NADA - dijo Jonathan haciendo énfasis en la última palabra - Y usted como señora mayor debería haber aprendido en sus mil quinientos años de edad sobre el respeto.

- ¡Agh! Yo respeto mucho a las personas, menos a fenómenos como ustedes y ese niño rarito - dijo Sol Piedad con asco.

Apreté mis puños con fuerza y abrí mi boca dispuesto a decirle un par de cosas pero la mirada de Jonathan hizo que me calmara.

- Mire señora, con todo respeto - dijo Jonathan en un suspiro - No discutiremos con usted, porque si lo hacemos quedaríamos a su nivel, y créame, es muy bajo. Si nos disculpa, nos retiramos - dijo Jonathan tomando mi mano para que salgamos de su despacho.

Llegamos a la recepción en donde se encontraba otra monja, pero esta era más joven que todas las demás, esta al vernos nos sonrió y se acercó hasta donde estaba Sebastián sentado con un pequeño equipaje de mano.

ADOPTADO Where stories live. Discover now