Capítulo 31

1K 55 2
                                    


-Así que tu eres el famoso Tomás-le dice.

En ese preciso instante corro adonde está mi padre para evitar que haga un escándalo en la puerta. Cuando esta celoso puede ser bastante insoportable.

-Hola-lo saludo desde la entrada mirándolo como una boba. Trae puesto una remera negra que marca perfectamente su gran estado físico. Unos pantalones negros y unas vans. Escucho un carraspeo e inmediatamente recuerdo a papá.

-¿No lo vas a hacer pasar hija?-escucho a mamá de la cocina.

-Sí, claro. Pasa Tomi-tomo su mano y lo guió hasta la sala. Mi padre cierra la puerta y nos observa. Sé que está haciendo su mayor esfuerzo para intimidarlo pero en el fondo quiere reír. Lo conozco demasiado y ese hombre no tiene ni un pelo de maldad. Mamá sale de la cocina y nos sonríe. Es momento de presentarlos-Él es Tomás-les digo a mis padres que están al frente nuestro. Todavía no he soltado su mano y no me había dado cuenta.

-Un gusto-les dice.

-Al fin te conocemos-habla mamá y le da un corto abrazo-Magui nos ha hablado de ti-ese comentario hace que me sonroje. Ella se da cuenta que mi padre no ha omitido sonido y le da un pequeño codazo en sus costillas.

-Auch-se queja y se gana una mala mirada por parte ella. Quiero reír pero no es momento-Dime Tomás, ¿cuáles son tus intenciones con mi hijita?

¿En serio papá? Es el primer chico que traigo a casa y me hace pasar vergüenza. Supongo que es su deber como padre pero en estos momentos deseo que la tierra me trague.

-Papá-digo con tono de advertencia. No quiero que lo haga sentir incomodo.

-Andrés, mejor ven y ayúdame con la cena-dice mamá y él la sigue a la cocina resoplando. Ya sabemos quien lleva los pantalones en mi familia.

-Lo siento, ya verás que lo hace para molestarme-hablo una vez que estamos solos.

-Es todo un padre sobre protector-ambos reímos- Si llega a ser una niña, ten pon seguro que voy a ser peor.

-Si yo te lo permito, claro-digo mirándolo a los ojos.

-Ya lo veremos. Ahora que lo pienso no me has saludado.

-Si te salude-respondo a la defensiva. Se lo que quiere lograr con esto, y créanme que yo también.

-No como corresponde-se acerca un poco más.

-No sé a qué te refieres-me encojo de hombros y veo como se termina de acerca. Siento su respiración en mi cara.

-Te lo muestro entonces-termina de hablar y toma mi rostro. Me mira unos segundos y me besa. Es un beso lento y sin ninguna otra intención. En tan poco tiempo me he vuelto adicta a sus besos. Adicta a él-Ahora sí-habla cuando nos separamos.

-Eres un tonto-digo y veo que pone cara de ofendido.

-Ambos sabemos que no piensas eso de mi-me guiña un ojo. Escucho ruido y noto que es mi hermano bajando.

-Lucas, ¿te acuerdas de Tomas?-le pregunto cuando llego hasta donde estábamos nosotros.

-Si, tu novio-responde.

-¿Cómo estas amigo?-le pregunta Tomi.

-Bien, ¿sabes jugar a los videojuegos?-mi novio asiente-¿Quieres que juguemos hasta que este la cena?

-Claro, seria excelente. Pero te advierto que soy demasiado bueno-le responde y ambos se sientan en el sofá que está frente a la tele.

-Yo soy mejor-le contesta mi hermanito y luego le saca la lengua. Yo río y ambos me miran mal. Tranquilos machotes. Yo me encojo de hombros y me voy hacia la cocina para ver si mi madre necesita ayuda.

Siempre el mismo amorWhere stories live. Discover now