Capítulo 29

913 48 0
                                    

Estás segura de que no quieres nada?-me repite Tomás por décima vez aproximadamente. Después de que pasara por mí y nos quedáramos conversando en la heladería, él volvió a insistir en que me quedara en su casa y termino convenciéndome. Así que ahora nos encontrábamos descansando en su sala. Se había acostado en mis piernas y yo tenía mi espalda sobre el sofá.

-Estoy bien, en serio-le sonrió y me dedico a observarlo. Sé que lo pienso siempre, pero hay una parte de mí que todavía no puede creer como cambio mi vida. Tom parece notar que lo miro.

-Qué?-me pregunta.

-Nada, eres lindo cuando te preocupas-digo jugando con su pelo.

-Solo cuando me preocupo?-pone cara de perrito mojado y no puedo evitar largar una carcajada.

Esto era lo que me gustaba de él, que a pesar de tener un montón de cosas por las que preocuparnos, cuando estábamos juntos todo lo demás era secundario.

-Siempre eres lindo-veo como sonríe y me acerco a su cara para dejar un beso en su boca.

-Lo sabía, no hace falta que lo digas-me dice el muy creído-Tú también eres linda, la chica más hermosa del puto planeta-al escucharlo decir eso hace que mi estomago se contraiga.

Nos quedamos mirando como dos bobos hasta que él se levanta y se sienta a mi lado. Me toma el rostro y me besa. Me acerco más y me siento encima de él con una pierna de cada lado. De repente, abandona mis labios y empieza a dejar besos en mi cuello. Sus manos van directo a mi trasero y me pega más a él, haciendo que nuestros sexos se toquen. Ambos gemimos por el roce y sigue jugando en mi cuello cuando los dos frenamos en seco al escuchar ruidos en la entrada. Me bajo de inmediato y me siento a su lado mientras los dos nos acomodamos y tratamos de controlar nuestras respiraciones. 

Mierda, mierda y más mierda.

Al cabo de unos segundos la puerta principal se abre y entran sus padres junto a su hermanito Pedro.

-Hola-dice Tomás ya que ninguno parece percatarse de nuestra presencia. Cómo rayos hace para estar tan tranquilo después de que casi nos descubren teniendo relaciones. Su voz es tan calma. En cambio, yo aún estoy alterada y en lo único que pienso es en que llegaron en mal momento. Necesitaba tener intimidad con Tom. Lo necesito. Parezco una adicta pero desde que estoy embarazada, me parece tan necesario como comer. Pervertida.

-Oh hijo, no sabía que estaban aquí. Cómo estas Magui?-me pregunta amablemente su madre.

-Bien, y usted?-le respondo.

-Muy bien, gracias. Por qué no me avisaste que vendrías con ella? No me has dado tiempo a preparar nada-le da un pequeño golpe en el brazo a Tomás y yo me rio. Él me mira frunciendo el ceño y me callo tratando de no volver a reir.

-No es para tanto, fue de último momento-le contesta.

-Iré a preparar la cena pero si algo sale mal linda-me mira- es culpa del irresponsable de mi hijo. Cariño acompáñame-le pide a su marido el cual parece tan divertido como yo con esto. Veo como ambos desaparecen por la puerta de la cocina.

-No digas nada-dice sentándose de nuevo. Copio su acción y quiero reír pero no lo hago.

-No iba a decir nada-me encojo de hombros.

-Ella es tu novia?-ambos nos giramos y ahí me doy cuenta de que su hermano sigue en la sala.

-Si-le responde Tomás y me abraza por los hombros.

-Y yo puedo tener novia?-le pregunta a su hermano mayor y me da mucha ternura lo que dice.

-Pues claro, aunque a mamá no le gustara que sea ahora, eres su bebé-le responde.

-Pero no soy ningún bebe, no sé porque nadie lo entiende-parece frustrado y se tira para atrás. El drama es de familia parece.

-Solo eres su consentido-le dice para calmarlo-Quieres ver una película con nosotros?-Pedro asiente y toma el control remoto para encender la televisión. Me acomodo en el pecho de Tomás y no tardo en quedarme dormida.

-Amor despierta-abro lentamente los ojos y veo a mi novio a mi lado-Ya está la comida.

-Lo siento, me dormí-digo avergonzada mientras nos paramos para ir a la mesa.

-Estas cansada, es normal con el bebé-me dice dulcemente.

-Lo dirás ahora?-cambio de tema y necesito que me saque esa duda.

-No lo sé, quiero contarles pero quiero que tú estés segura.

-Diles-digo rápido y él frena a mirarme. No puedo ser tan egoísta. Quiere decirles y no puedo negárselo. Es su familia. 

-Segura?-asiento y puedo ver lo feliz que esta. Mataría a quien le saque la sonrisa, merece que le pasen cosas buenas únicamente. Me estoy volviendo tan cursi.

Cuando llegamos al comedor veo que esta su hermana Sol y me dice que cuando entro me vio dormida y no quiso despertarme. En realidad, según ella, Tomás no la dejo.

La cena pasa rápido, la familia de Tomi se encarga de avergonzarlo cada vez que puede y a él no parece molestarle. Al contrario, esta tan relajado que por un momento pienso que no va a decir nada hasta que toma mi mano por debajo de la mesa y la aprieta. Es hora. Tomo una gran bocanada de aire y me preparo para lo que va a suceder. 

-Hay algo que debo decirles. Que debemos-se corrige y puedo notar las miradas de intriga de todos. Creo que me va a dar un infarto-Magui está embarazada-YA LO DIJO Y TAN RAPIDO? Repito, cómo hace para estar tan tranquilo?

Nadie dice nada. Hay un silencio incómodo y por segunda vez en la noche, Tomás aprieta mi mano. Dirijo mi vista a mis piernas, esperando lo peor hasta que escucho un sollozo. Rápido levanto mi vista y veo a su madre llorando.

-Mi bebé va a tener un bebé-dice parándose y se dirige a abrazar a su hijo. Cuando lo suelta, me abraza a mi y veo que su cara esta llena de lágrimas-no saben lo feliz que me pone esa noticia. Voy a ser la mejor abuela, aunque soy demasiado joven-todos reímos. 

-Felicidades hijo-se acerca su padre-Y para ti también Magui, eres una buena chica para mi hijo.

-Gracias-le sonrió como respuesta. Las palabras no salen de mi boca. 

-Los felicito a ambos-nos dice Sol-y bienvenida a la familia. 

Luego de todas las felicitaciones por parte de su familia, decidimos acostarnos ya que estaba demasiado cansada. Había sido un día largo y lo único que tenía en mi cabeza era que ojalá mi padre se hubiese tomado bien la noticia. 

-Te quiero tanto linda-fue lo último que escuche antes de quedarme dormida

Siempre el mismo amorWhere stories live. Discover now