•Capitulo 100•

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Me desperté muy temprano en la mañana, ya que teníamos que estar a las 7:00 a. m. en la universidad.
Preparaba las cosas que necesitaría, llevaba mi ropa, lo que uso para peinarme, lo que uso para ducharme, unos cuantos pares de zapatos y mi teléfono.
Me di una ducha rápida y me esforcé por verme bien.
Tengo que admitir que me sentía demasiado nervioso, no tenía muy en claro si quería o no estar con Carlie en la cabaña. Ya que ser su compañero hacia evidente el echo de que tenía que hablarle y convivir con ella.

•Tells Carlie•
Sonrei internamente cuando oí el nombre de Jaden seguido del mío, y me alegré por eso, pero me parece que el no lo hizo pues su cara lo dijo.
Seguía sin entender porque no me hablaba.
Me arrepentía por haberle dicho eso que lo hizo enojar tanto y provocar yo misma que me dejara de hablar.
Solo deseaba que cuando estuviéramos en la cabaña olvidara todo lo que pasó y volviéramos a ser amigos como antes, hasta decirle lo mucho que lo quería y lo mucho que me gustaba.
Me despedí de mi hermano, quien se quedaría solo ya que Clay y yo iríamos al campamento una semana.
Salí de casa junto con Clay, quien se había cortado el cabello y se había afeitado, aunque sólo le salieran 2 pelos en la barba cada 5 años.

-Carlie: ¿porqué te afeitaste y cortaste el cabello? ¿Quieres atraerle a Katerine más?
-Clay: ¿Porqué te maquillaste, te alisaste el cabello, te pusiste una blusa nueva, jeans que te hacen ver más delgada, te arreglaste las uñas, y te pusiste aretes? ¿Para que vuelvas a gustarle a Jaden, o, para que al fin te confiese que si, que le gustas muchísimo?

Rodé los ojos.

-Carlie: Eres tan fisgón.
-Clay: Tu lo hiciste primero.
-Carlie: Niega que lo hiciste por Katerine.
-Clay: Niega que lo haces por Jaden.
-Carlie: Bueno, entonces no neguemos nada.
-Clay: Me parece perfecto.

Llegamos a la universidad y subimos a un autobús que los llevaría hasta el campamento "Shine Ville"
No vi a Jaden ni a Katerine en ese autobús, lo que significaba que ya habían subido al otro.
Rato después el autobús arrancó y al llegar al campamento nos dividieron en dos grupos, los del autobús 1 en un equipo y los del autobús 2 en otro.
Nos dieron una pequeña llave, que decía un número y esa era la cabaña que nos había tocado aleatoriamente.
Cada que nos daban un número lo anotaban en una pequeña lista, para luego darle la misma llave a tu compañero de cabaña.
Me tocó en la cabaña 34 y a Clay en la 67, osea que habíamos quedado lejos.
Nos entregaron un mapa, un gps y un radio para emergencias.
Empecé a caminar sola no sin antes despedirme de Clay.
Los primeros 3 días los pasaríamos en la cabaña para "socializar y crear una confianza" con el compañero elegido aleatoriamente, en mi caso, Jaden.
El jueves saldríamos a un pequeño día de campo organizado por la universidad y el viernes sería la fogata, en donde cada uno presentaría una canción cantada por ambos y al final de la fogata habría una pequeña fiesta con un mini baile.
Camine más de 1 kilómetro con la mochila en mi espalda cuando finalmente encontré la cabaña.

Entre con el corazón latiendo rápido y fuerte, pensando que iba a encontrar a Jaden ya dentro, pero al parecer aún no llegaba

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Entre con el corazón latiendo rápido y fuerte, pensando que iba a encontrar a Jaden ya dentro, pero al parecer aún no llegaba.
Abrí la puerta y el olor a madera, canela y un poco me menta inundó mis fosas nasales.
Entré y deje mi mochila en el sofá, que era color rojo y también muy acojedor.
Cerré los ojos, disfrutando del suave olor y empecé a explorar toda la cabaña.
La cocina tenía lo necesario, una estufa, un microondas, la alacena estaba llena al igual que el refrigerador. Sonreí pensando en todos los deliciosos postres que podía hacer.
La sala de estar, como ya dije, tenía unos sofás rojos y acojedores, una mesa  de centro con un florero transparente con margaritas recién cortadas, un estante con libros y un televisor.
También tenía un pequeño baño y en la habitación había 2 camas matrimoniales, una ventana con vista al lago, un mueble para colocar ropa y una televisión. Lo mejor de la cabaña era que tenía wifi, así podríamos estar comunicados con el resto de la universidad todo el tiempo.

Empezaba a meter mi ropa en 2 de los cajones del armario, y io la puerta abrirse.
Me di la vuelta y vi a Jaden entrar, estaba ahí, con su mochila y unas nuevas botas.
Nuevamente mi corazón se aceleró y sentí algo en el estómago.
Le ofrecí una sonrisa.

-Carlie: Hola.
-Jaden: Hola.

Dijo sin sonreír.
Entró sin decir nada más y fue directo a la habitación.
Lo seguí detrás.

-Jaden: Genial, dos camas.

Dijo con un tono seco, hasta parecía molesto.
Dejó su mochila en una de las camas y fue a la sala de estar. Encendió el televisor y se sentó en el sofá, seguía sin decir nada.

 Encendió el televisor y se sentó en el sofá, seguía sin decir nada

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BÉSAME • A. Martínez (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora