LOST

¿Te Conozco?

Ubicación desconocida, 2 de Diciembre, 2015

Han pasado tres días desde el incidente en la cafetería, no hay mucho que decir al respecto y nadie se siente realmente cómodo como para hablar de ello, la única cosa en la que podemos pensar es en sobrevivir y estar unidos.

He notado que la tensión entre nosotros ha crecido desde hace tiempo, pues ya nadie habla más que para decidir en que lugares revisar, puede que solo sea la escasez de alimentos que cada vez comienza a dañarnos más, pues no hemos encontrado prácticamente nada comestible a excepción de golosinas y unas latas de soda aboyada por el suelo, comienzo a pensar que estamos perdiendo la esperanza con cada lugar que revisamos, las caras de decepción no faltan y es totalmente comprensible.

Michael camina a mi lado, no puedo negar que de todos es el que más me preocupa, ellos y yo somos prácticamente adultos, él, por el contrario es más delgado y pequeño, más frágil, y es obvio que esto le afecta mucho más ya que no tiene la misma fortaleza física. Luce cansado y su rostro se ve muy apagado, no soy un experto pero creo que piensa en su padre, él sabe que con cada paso que damos se aleja de él.

—Oye, estaba pensando en que quizá más adelante podríamos encontrar una biblioteca o mejor aun, una tienda de videojuegos ¿Qué te parece? — intenté. 

— Claro, me gustan los videojuegos — Respondió levantando un poco la vista.

— No lo creo— interrumpió Nick — Todos esos lugares en su mayoría están saqueados y nuestra prioridad es encontrar comida o algún refugio.

Habíamos vendado su brazo, y con ayuda de un trozo de camisa le habíamos creado una especie de cabestrillo que ahora usaba para apoyar el brazo dañado. 

— ¿y cuánto falta para eso? — preguntó Michael.

— Pronto, espero. 

Peter iba adelante, sostenía el arma en su mano y  a su lado estaba Evans tratando de guiarnos por la ciudad. Ninguno tenía idea de que calle seguir, cada cuando llevábamos varias calles en la misma dirección nos encontrábamos con que la siguiente estaba tapada o había muchos cadáveres por el suelo, sin contar los que se encontraban caminando. 

La ciudad parecía desolada, no nos habíamos topado con nadie hasta entonces, vimos unos vehículos pero nadie supo encendernos, haber perdido el camión había sido una absoluta estupidez y el plan no era enfrentarnos a esas cosas. Traté de convencerlos de ir hacía Minnesota, pero nuevamente dijeron que no. El frío allá era brutal y encontrar comida habría sido mucho más complicado.

Más adelante nos detuvimos fuera de un supermercado, todas las puertas estaban cerradas y un fuerte telón de metal sellaba la entrada, en la parte de afuera recogimos unas bolsas de frituras de entre los escombros de una maquina dispensadora. 

Evans se acercó a examinar por un momento aquel telón que cubría la puerta.

— ¿Creen que podamos entrar? — Pregunté — seguro habrá más comida dentro. 

— Puede ser... quizá podríamos romperlo— respondió Evans.

— Igual el sistema de seguridad debe estar desactivado, hace semanas que no hay energía. 

Peter levantó la vista buscando cámaras de seguridad en el techo.  

— ¿Me pregunto que clase de metal es? — dio unos golpecitos en el soporte. 

De pronto Evans dio un brinco y todos nos llevamos un gran susto cuando un golpe azotó el metal y el sonido retumbó hacia nosotros. Los gruñidos y rasguños confirmó que estaba lleno de infectados.