CAMILA.

23-entrega.

-para ella si- dicho esto nos saco de allí- era mejor que duermas un poco y más tarde comas algo.

Me dejo allí en el baño y también unas toallas, me desvestí y me metí debajo del agua, después de un baño de agua caliente Salí me cambie con un pijama y unas medias de lana, dejándome caer en la cama me deje llevar por la inconciencia del sueño.

-si sabes que te matara si descubres que te has metido en la cama con ella- murmullos lejanos era lo que apenas podía escucha.

-ya viste esta fría a pesar de tener todas esas cobijas encima, un poco de calor corporal es lo que necesita- después de eso algo a mi lado se movió y mi cuerpo recurrió al calor  que desprendía- mira ella recurre a mi calor- después de eso la oscuridad me volvió a llevar con ella.

Parpadee varias veces antes de poder abrir mis ojos por completo mi cuerpo se encontraba en un delicioso calor, me acerque un poco más, llevándome un gran susto al sentir un cuerpo a mi espalda, gire mi cabeza sobre mi hombro cuando el rostro de alix apareció en mi campo de visión, tenía los ojos cerrados y su respiración es suave, con el máximo cuidado de no despertarlo me levante de la cama, sintiendo frio nuevamente, entre en el baño haciendo mis necesidades, no lo quería despertar se veía tan tierno, pero nadie lo mando a meterse en cama ajena, con un vaso de agua fría me acerque hasta su lado.

-¡despierta!- grite mientras vaciaba el agua en su cabeza, este se sentó asustado en la cama mirando para todos los lados.

-pero qué demonios...- no escuche más pues estaba corriendo para salir del cuarto, tenía tanta hambre.

Alix

Salí corriendo detrás de Camila, tras que me acuesto a su lado para darle calor me levanta tirando un vaso de agua fría a mi cara, cuando estoy en la cima de la escalera, bajo rápidamente para ver a Camila tendida en el suelo con una mano en su cabeza

-joder, Camila, como te fuiste a caer- la cojo de las caderas para ayudarla a levantarse- ¿te duele algo?

-sí, mi cabeza- con su confirmación la levanto del suelo y la cargo hasta uno de los sofás.

-no te muevas, voy por hielo- rápidamente entre en la cocina donde Alan está comiendo. Bajo su atenta mirada consigo lo que nesecito.

-¿para que necesites el hielo?- dice curioso siguiendo mis movimientos con el hielo.

- Camila rodo por las escaleras y le está doliendo la cabeza- su trasero literalmente voló de donde estaba sentado para salir en la búsqueda de Camila, siguiendo sus pasos llegue hasta ellos para pasarle el paquete de hielo a Camila.

- esto fue por tu culpa- dijo matándome con la mirada.

-me alegro que recuperes el tono reacio, pero ¿cómo es que te has caído de las escaleras?- me acomodo en un sillón individual frente a ellos dos.

-por el ejercicio de esta mañana idiota, me sobre esforcé y mis piernas me están cobrado factura- se desplomo en el sofá cerrando los ojos- y por cierto no quiero que te vuelvas a escabullir a mi lado mientras duermo, porque para ese momento lo menos que puedes recibir será un vaso de agua fría en la cara.

-Camila, la próxima semana comienzan las clases- dijo una alexia concentrada en su móvil- tenemos... ¿Por qué tienes hielo en la cabeza?- su cabeza estaba levemente torcida al lado derecho.

-me caí en los tres últimos escalones, y me duele la cabeza, ¿que sucede con la universidad?

-como decía la próxima semana empieza el semestre, por lo que sucedió en tu casa, y lo que va a suceder en la mía, sería mejor conseguir un apartamento para las dos.-

-¿Cuándo le piensas decir a tus papa?

- antes de empezar, tengo miedo de su reacción-

El teléfono de la casa comenzó antes de que Alan lo pudiera coger, yo salte sobre él.

-Alix- dije en cuando conteste.

-hijo- la voz de padre sonó al otro lado, me aleje de la sala para que ninguna de las mujeres escuchara la conversación.

-¿Qué sucede?-

- necesito que recojan una mercancía esta noche, Alfred te va a acompañar, y tengan cuidado, te mandare la información y algunos hombres para que los acompañen.

-algo más.

-sí, que las mujeres que están en la casa no se enteren- su respuesta me dejo de piedra.

-ellas ya sabes en qué mundo nos movemos.

-no me refiero a eso hijo, me refiero a que no vuelvan directamente a casa, puede ser una emboscada, las quiero a ellas tan lejos del peligro como sea posibles, y la seguridad de la propiedad se va aumentar.

-explícame eso.

- en contexto, nuestra casa se va a volver más segura que la casa blanca, las dos hijas únicas de dos grandes e importantes familias están allí, y no quiero tener problemas con sus familias porque algo les ha sucedido.- su voz era profunda al otro lado del teléfono.

- ese es el problema, con la familia Sáenz tenemos más historia de la que quiero aceptar, y además tenemos un enemigo en común.

- ¿que has descubierto?

- anya murió por que Camila no asistió a las peleas, Jonatán había prometido a Camila a alguna familia y como Camila esa noche no se pudo presentar él les dio a anya por Camila, ella piensa que anya era hermana de él, además de que Camila era novia de él, y el desgraciado la vendió, como ella no asistió dio a nuestra anya.- no escuche su voz por algunos minutos y cuando por fin hablo no me gustó nada.

-entonces tengamos mayor cuidado, ferreri está dando signos de vida y no son bueno.

-¿que sucedido?

-el ataque de la casa de Camila era dirigido a nosotros y es de parte de ferreri así que está proclamando guerra.

-tenemos que reunirnos con la familia Sáenz y la familia Sánchez, la hija de los Sánchez está esperando un hijo de Antón

-¿sus padres lo saben?- sé que está pasando una mano por su cabello.

-no, ella no le has dicho

-igual, mañana nos vamos a reunir con ellos, hablamos más tarde- sin que le pudiera decir algo más corto la llamada.

-Alfred tenemos una entrega esta noche- dije en cuanto contesto mi llamada

- ¿en qué lugar?

-cuando tenga la información te la envió no te quiero ocupado esta noche- sin más colgué la llamada y volví a la sala.

-¿Dónde está Camila?- me alarme al no verla con alexia y Alan.

- subió a dormir.- dijo Alan

-su cuerpo esta agitado y bajo de defensas, ella va a pasar durmiendo mucho, será mejor que no la molestemos- esta fue alexia mirando sus uñas.