Parte 21 "La pieza faltante"

635 43 78
                                    

Un destello azul brilló con intensidad repentinamente entre los pasillos del MTT Resort.

Seguido de éste, dos figuras humanas aparecieron en el acto, quienes sin dudar ni un segundo echaron a correr a toda velocidad. El que iba adelante, era un albino de ojos azules, quien volteaba a todas direcciones buscando algo con la mirada.

—Demonios... ¿En dónde carajos pueden estar? —preguntó molesto.

Por su parte, la segunda figura humana era una chica morena de pelo castaño quien le seguía el paso muy de cerca a su compañero. A pesar de tener una gran angustia, la chica mantenía su determinación y analizaba con detenimiento las distintas posibilidades que tenían en aquellos instantes.

—Creo que debieron ir a sus habitaciones... Pero no podemos perder más tiempo, Sans —decía ésta mientras que doblaban nuevamente una esquina de los pasillos—. Seguramente ellos ya están camino al castillo, ¡Debemos adelantarnos sin los demás!

Tras escuchar aquello, Sans detuvo su paso y se volteó para ver a su compañera, quien también dejó de correr.

—¿Y enfrentarnos solamente nosotros dos contra ellos? Sé que eres fuerte, Frisk... Pero aún así necesitamos ayuda —reconoció el albino mirándola a los ojos.

Aunque pensativa, la humana terminó por asentir y aceptar la idea de su compañero. Por mucho que quisiera ir directamente al castillo para salvar a su padre, tenía que buscar ayuda primero. Después de todo, se enfrentarían a el científico más grande e inteligente de la historia del subsuelo, a la la antigua princesa de los monstruos cuyo poder y determinación eran inmensamente grandes, y a una flor sin sentimientos capaz de hacer cualquier cosa para lograr su objetivo, sin importarle el daño causado.

Qué lindo equipo formaban esos tres.

—Agh, ¿Para qué nos complicamos tanto? Tengo mi teléfono justo aquí —se quejó Sans al mismo tiempo que sacaba el aparato de uno de los bolsillos de su chaqueta—. Llamaré a Alphys de inmediato.

—Qué oportuno... ¿No podías darte cuenta de eso antes de salir corriendo?

—Oye, no creas que tampoco me molesta... Detesto gastar energía de más —dijo el chico de ojos azules mientras marcaba el número de la científica. Por suerte, ésta contestó casi al instante—. ¿Hola? ¿Alphys? ¿En dónde estás ahora? ¿Papyrus y Undyne te acompañan?

Del otro lado del teléfono, la monstruo amarilla se encontraba nerviosa al no saber cómo responder tantas preguntas con rapidez.

Eh... S-Si Sans, estamos camino a ver a Mettaton... —contestó como pudo la reptil—. Nos encontramos a punto de tomar el ascensor hasta los antiguos laboratorios del co...

—Perfecto —la interrumpió Sans tomando de la mano a Frisk y activando sus dos ojos azules.

En menos de un segundo, ya se encontraban junto con sus otros tres compañeros.

—Re... Y... Ya estás aquí —terminó Alphys para luego dar un suspiro y cortar la llamada de su teléfono.

—¡WOWIE! MI HERMANO CUBIERTO DE CARNE Y LA HUMANA ESTÁN AQUÍ. CREO QUE TU SUPOSICIÓN FUE ACERTADA, UNDYNE —comentó Papyrus alegremente—. FUE BUENA IDEA DEJARLO IR TRAS ELLA.

Por su parte, Undyne rio de forma triunfal.

—Jejeje, te dije que lo que necesitaban esos dos era tiempo a solas. ¡Sé perfectamente cuando una pareja tiene problemas! —exclamó orgullosa la anfibia mientras se cruzaba de brazos esperando más elogios.

No es "Sólo otra historia de amor". SansxFriskWhere stories live. Discover now