El club de los inadaptados.

7. Sonrojando a Gabriel Dawson

Gabriel

Generalmente me despierto por mi mismo pero ese día, desperté cerca de las ocho de la mañana a causa de los gritos que provenían de la primera planta. Fruncí el ceño y me restregué los ojos mientras me levantaba de la cama. Abrí la puerta y casi al mismo tiempo, la puerta de enfrente que correspondía a la habitación de Cassandra se abrió.

—¿Qué está pasando? —pregunté.

—No sé, pero no suena nada bien —respondió saliendo de su habitación y bajando las escaleras.

Seguí a la chica pelinegra hasta la primera planta de nos encontramos con Maddie peleando con una chica.

—¡Eres una calienta pitos! —gritó la chica.

No sé si alguien más lo habrá notado pero Maddie tenía una marca roja en su mejilla con la forma de la palma de una mano.

—Susan, yo…

—¡Aléjate de mi novio!

—Pero fue…

—Zorra —es lo último que dijo la chica antes de irse.

Maddie suspiró y se dejó caer en el sofá. Luego, levantó la mirada y noté que tenía los ojos llorosos.

—Lo siento, no quería despertarlos —se disculpó levantándose del sofá.

—¿Qué pasó? —preguntó Mac.

Fruncí el ceño y me volteé. Cassie y yo no éramos los únicos despiertos si no que toda la casa se había levantado.

—River —respondió— el novio de Susan.

—¿Te metiste con el novio de la hija del director? —preguntó Miles sorprendido.

—Lindo, me metí con el director —respondió Maddie con una sonrisa sin ánimos— La cosa es que este chico comenzó a flirtear conmigo en el club y me dijo que estaba teniendo problemas con Susan. Vinimos a casa, cogimos y luego se fue.

—No estaban teniendo problemas ¿verdad? —preguntó Cassie.

Maddie negó —Es un idiota. Intenté explicárselo a Susan, pero no me escuchó. Está totalmente convencida de que River es un pan de Dios.

—Susan Mitchell se come los mocos —dije captando la atención de todos— No viene al caso pero quería que lo supieras.

Maddie sonrió —Gracias, Gabs.

—No me llames Gabs.

—¿Gabrielito?

—Gabe está bien, Madeline.

Ella sonrió y se acercó a las escaleras. Todos se fueron a sus respectivas habitaciones pero antes de irme a acostar, fui a la cocina y saqué una compresa con hielos. Fui hasta el cuarto de Maddie, abrí la puerta y se lo lancé a la cama.

—Para tu mejilla, buenas noches.

[…]

Al día siguiente a penas y pude concentrarme en mi examen. No podía dejar de pensar en Maddie y en su problema. Quizás si, era una adicta al sexo pero eso no significaba que fuera una zorra sin sentimientos como la veían tanto los chicos como las chicas de la universidad.

Y como yo la vi alguna vez.

Cuando terminé mi examen, noté que aún quedaban cuarenta minutos para que la clase terminara. Saqué mi celular y decidí enviarle un mensaje a Lis.

Gabriel: ¿Quieres ir por un té?

Y me dejó en visto la desgraciada. Gruñí y guardé mi celular. Me levanté y dejé el examen en el escritorio antes de salir. Mientras caminaba por el campus, me topé con Cassie en la maquina expendedora.

—¿Estás comiendo grasas? —pregunté sorprendido. Cassie se giró asustada y se relajó al ver que se trataba de mi.

—Por primera vez en dos años —respondió apretando un botón. Se agachó para sacar la golosina y no pude evitar ver sus piernas y que estaba usando el uniforme de animadoras. Sacudí mi cabeza y desvié la vista.

¿ACABABA DE SONROJARME?

Hice todo lo posible por bajar el color de mis mejillas cuando Cassie se enderezó con un snicker en sus manos.

—No como esto desde que tenía diez años —dijo sonriendo— ¿No deberías estar en clases?

—Terminé mi examen —respondí— ¿Quieres caminar?

Cassandra asintió mientras guardaba la golosina en su mochila. Caminamos por todo el campus y nos detuvimos en las gradas del campo de fútbol americano.

—Tienes lindas piernas —solté sin pensar a penas nos sentamos ya que la falda de Cassie se subió un poco.

Ella sonrió, pensé que se pondría nerviosa pero por el contrario.

—Tócalas —dijo colocando mi mano en su muslo derecho— Comencé a usar una crema hidratante que es sensacional.

—No veo la diferencia —dije.

Cassie rio —Si hubieras tocado mis piernas antes lo notarías. Gabriel Dawson ¿acabas de sonrojarte?

Toqué mis mejillas —No.

—No pensé que algo podría sonrojarte —dijo. Cassie sacó mi mano de su pierna y la colocó en la grada.

—Si yo pusiera tu mano en mi pito te sonrojarías ¿no? —pregunté.

—Buen punto —respondió.

Nos quedamos un rato ahí sin hacer nada hasta que sorpresivamente, Cassie rozó su mano con la mía. Por alguna razón y casi por impulso, uní mi mano con la suya y ella entrelazó nuestros dedos.

—¿Qué estás haciendo? —pregunté.

—¿Te molesta? —preguntó.

Lo dudé por un segundo pero luego me encogí de hombros. Nunca le había tomado la mano a una chica y se sentía raro pero nada del otro mundo. Incluso era hasta acogedor.

En ese momento, mi celular vibró con un mensaje.

Alice: Estoy ocupada.

Y esta vez, yo le dejé el visto.

—¿Están saliendo o algo? —preguntó Cassie elevando ambas cejas— Los vi muy juntos los primeros días.

—No, somos amigos —respondí— aunque ha estado actuando raro últimamente…

—Porque le gustas, tonto —dijo Cassie soltando mi mano. Extrañé su mano por unos segundos— Actuar así es su única manera de expresar su molestia porque ya no le pones atención.

—¿Por qué no solo lo dice?

—No todos somos tan directos como tú —respondió recostándose un poco y mirando hacia adelante— Especialmente las adolescentes. A esta edad, todo se basa en indirectas.

—Qué estúpido —murmuré. Imité la acción de Cassandra y entonces ninguno de los dos se miraba a los ojos, si no que ambos estábamos mirando hacia el frente— Cassie…

—¿Dime?

—¿Te molestaría tomar mi mano de nuevo?

Ella, aún sin mirarme, volvió a entrelazar su mano con la mía. Se sentía bien, raramente agradable y por alguna razón, no quería soltarla, no quería que se fuera. Cassie se había transformado en alguien importante para mi en el último tiempo y no dejaría que se fuera tan fácil.

Después de un rato pensando cosas aleatorias sobre Cassie, me surgió una duda.

—¿Eres virgen? —pregunté.

Cassandra se giró hacia mi y me miró con una expresión totalmente seria. Por primera vez en mi vida, me arrepentí de mis palabras.

—No contestes si no quieres.

—¿Por qué preguntas?

—Curiosidad, generalmente las chicas anoréxicas tiene un problema con el sexo —comenté.

—¿Cómo sabes de anorexia? —preguntó ladeando la cabeza. Por un momento me recordó al perro de mi abuela.

—Conocí a muchas chicas anoréxicas —respondí— Pero tú eres diferente. Las chicas que conocí estaban desesperadas por lucir mejor que el resto. Tú quieres lucir mejor que tú misma lo que es raro pero fascinante. Aunque sigue sin estar bien, no te confíes.

Cassandra sonrió —Si, soy virgen.

Asentí —¿Por qué?

—Nadie quiere cogerse a un montón de huesos.

Reí por la comparación y luego me callé al ver que ella no reía pero luego explotó a carcajadas por mi reacción.

—Sabes, yo si cogería contigo —comenté mientras me levantaba de las gradas.

—¿Es una propuesta? —preguntó entre risas.

—Es un confesión —respondí— Tengo economía en quince minutos así que te veo luego. Cómete el snicker antes de que se derrita.

Comencé a bajar las gradas, una vez que estuve abajo y comencé a caminar, Cassie me detuvo tomando mi muñeca.

—¿Qué haces? —pregunté.

—¿Quieres saltarte economía? —preguntó. Cassie estaba sonriendo y por el color de sus mejillas, sé que estaba pensando algo que la avergonzaba.

—¿Para qué? —pregunté.

—Dime que si antes de que me arrepienta —respondió.

—¿Y a dónde iríamos? —volví a preguntar.

—A casa —dijo comenzando a caminar conmigo detrás.

—Pero no hay nadie.

—Exacto.

❕❕❕

DAMN, a que no esperaban actualización. Ya empecé las clases en la universidad así que decidí subir un capítulo antes de que comenzara con los estudios y todo.

AHORA, sobre el capítulo ¿qué les pareció? ¿qué opinan de Cassandra y Gabriel? ¿qué creen que planea Cassie? ¿qué opinan sobre Maddie y su problema?

El próximo capítulo narrado desde otra perspectiva será de ella asi que decidí hacer que participara más en la novela. De las chicas, es mi personaje favorito❤

¿Cuál es su ship favorito de la historia?

SI VEN FALTAS DE ORTOGRAFÍA ME AVISAN PORQUE ESCRIBÍ DESDE EL CELULAR Y A VECES SE ME PASAN ALGUNAS LETRAS.

Eso. Chris, out.