Cerré la llamada pensando en que tal vez aquello de dejarla ir a la dichosa fiesta no había sido una buena idea después de todo.

---Aquí estas osito...te estaba buscando.

Renata apareció frente a mi y me envolvió en sus brazos.

---Si...buscaba un poco de privacidad, debía hacer una llamada importante.

Me sentí acalorado al verla de pronto empezar a desvestirse.

Sonrió con picardia.

---¿Qué tal si jugamos un poco?

Ronroneo cerca de mi oído.

Le devolví la sonrisa para con rapidez
arrimarla contra la pared.

---Sabes que me es imposible negarme a eso...

Narra Sofía

Según el gps de mi móvil y en base a la dirección que me envió Mario, nos encontrábamos en la entrada de la casa de Kozac.

Bajamos del auto y como era de suponerse, la casa de aquél sujeto era inmensa y de lujo.

---Nando yo te llamo para que pases a recogerme ¿Vale?

Le cuestione al chófer antes de bajarme, realmente no deseaba que se quedará esperándome.

---Esta bien señorita.

Luego de intercambiar números con Nando, Kloe y yo empezamos a caminar hacía el interior de la mansión de Kozac, a medida que avanzábamos la música se iba escuchando más fuerte.

---Wow...esto...esto es enorme.

Exclamé viendo todo alrededor.

Una gran cantidad de chicos y chicas estaban dispersos en toda el área. Muchos de ellos bebiendo, bailando,  entre otras cosas.

---Esto es como sodoma y gomorra.

Expresó Kloe pasando cerca de una pareja que practicamente se comía viva.

Tomé mi móvil para enviarle un mensaje a Mario anunciandole que ya me encontraba en la fiesta.

Decidimos quedarnos en una mesa cerca de la piscina, hacia un poco de frío pero afortunadamente Kloe me había prestado una chaqueta suya, que a pesar de no gustarme me abrigaba bastante bien.

Iba a encender un cigarrillo cuando alguien de repente me lo arrebató de las manos.

---Hey!!

Me quejé volteando a ver a la persona que se atravio a arrebatarme mi preciado cigarro.

---¿Acaso no os han advertido que fumar es malo para la salud?

Era Mario acompañado de Carmen.

---¡Hola chicos!

Saludé con ambos.

---Hola cariño.

Saludó Carmen conmigo y Kloe.

---¿Os apetece un trago?

Me ofreció Mario.

---Pensé que nunca lo dirías.

Tomé ese vaso y lo bebí hasta el fondo, era Vodka.

---¡Esto es increíble!

Expresó Carmen emocionada.

---¿Qué tal si movemos el bote un poco?

Me quité la chaqueta y me levanté de la mesa.

---Siiii...

La hija de mi sirvientaNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ