Lauren [COMPLETA]

Capítulo 1

Dos meses antes…

Annabeth aparca el auto en uno de los muchos lugares vacíos dentro del estacionamiento del instituto, la idea de poner un pie en el lugar me resulta aterradora, a diferencia de mi, Ann está tranquila, sus palabras de ayer camino a la heladería resuenan en mi cabeza una y otra vez "Nuevo año, nuevo instituto y, lo más importante, nueva vida". Yo siempre he sido más del tipo de chica que se queda en casa leyendo o viendo películas, cuyos nombres desconozco, en la televisión, gran parte de la tarde, la que permanece en la sombra de su hermana y mejor amiga. Ella, bueno, le encanta hacerse notar. Suelto un suspiro e intento dibujar una sonrisa sobre mi rostro. Okay, te veías mejor seria. Exclama mi voz interna, la que actualmente tiene mucha más participación que la real. Me remuevo en el asiento para retirar el cinturón de seguridad, ella imita mi acción y, sin perder tiempo, saca todo tipo de productos de belleza de su bolso, pongo los ojos en blanco ante la ironía, ella me dirige la mirada para hablar.

— Un momento —dice abriendo un labial rojo, muy intenso a mi parecer—. Entraremos juntas, ¿de acuerdo? —asiento tras revisar la hora en mi teléfono y ver que aún faltan veinte minutos para que las clases comiencen.

Diez minutos después de ver como ella se aplica todo tipo de pinturas y químicos en el rostro, salimos del auto, agradezco mentalmente a mi tía Caroline por insistir tanto en que salgamos media hora antes. Abro la puerta y salgo, cerrándola detrás de mí. La castaña se encarga de poner seguro al auto con un clic en las llaves del automóvil, regalo de cumpleaños de Eugene para ambas, o más bien una nueva forma de comprarnos de nuestro querido padrastro, Annabeth lo manejaba la mayor parte del tiempo, por el simple y sencillo hecho de que ponerme frente al volante me hace entrar en pánico. Y por pánico me refiero a que choqué el verano pasado contra el buzón de nuestro antiguo vecino, el señor Williams, quien no estaba tan contento, y Eugene tampoco. Y esa fue a la última fiesta a la que acompañé a Annabeth ese año. Dato curioso, solo fui a recogerla, pero obviamente, nadie me creyó.

Seguimos caminando hasta la entrada, pasos inciertos, por mi parte. Como lo predije, pisar por primera vez el edificio resulta bastante extraño, no lo sería de no tener todas las miradas encima. Y en realidad no los juzgo, ver a Annabeth en esa falda a la altura del muslo con esos tacones no muy altos pero imposibles de calzar, al menos para mí, y esa blusa blanca, es una maravilla. Aunque el nerviosismo reaparece en cuanto descubro que las miradas no solo son para ella, este lugar es una manada de lobos hambrientos, si no cuido mi espalda es probable que sea la siguiente víctima.

— Tranquilízate Lauren, todo irá bien —me asegura con una sonrisa radiante sobre su rostro.

Para ella es fácil decirlo, pienso. Annabeth solía ser la más popular de la escuela el año pasado, los chicos hacían todo por ella y las chicas, todas querían ser ella. Yo intento pasar desapercibida, pero con ella eso no es posible, niego con la cabeza y vuelvo a mirar a mí alrededor deseando que las miradas se dispersen, como siempre, mis suplicas no son escuchadas. La castaña suelta una pequeña risita al ver lo que consigue intimidarme.

— Quizá de donde ellos vengan es anormal que dos chicas tan distintas se lleven bien —me susurra al oído provocando que me una a ella.

Es verdad. Mis jeans desgastados, mi blusa a cuadros y mi gorro gris de tela que había usado para cubrir el desastre que tengo por cabello esta mañana, posiblemente resalta a un lado de los tacones de punta de Annabeth, no de la buena manera. Las miradas que en un principio me parecieron amenazadoras ahora no me importan en absoluto, los chicos ven a Ann de arriba a abajo descaradamente; a diferencia de las chicas, que solo observan con atención y desconcierto, algunas incluso hacen comentarios tras habernos mirado mal. Nos despedimos con un abrazo rápido y corremos hasta nuestros casilleros al oír el timbre que anuncia el inicio de clases, no tardo mucho en encontrar el casillero 291.