3 | Pasteles Incómodos

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[dedicado a xqueencherlyx]


Empujo mi carrito de compras hacia adelante mientras un bostezo se escapa de mis labios. Tomando algo de papel higiénico, lo coloco en el carrito y escucho que alguien dice mi nombre.

—¿Leah?—Me volteo para ver a Justin escondiendo su rostro con su sudadera con capucha. Ambos estamos en pijama.

—Buenos días. —Otro bostezo escapa de mis labios.

—Buenos días para ti. ¿También te gusta comprar víveres a las siete y media? —Justin me pregunta y yo asiento.

—Sí, no está lleno y la única gente que veo son personas mayores. —Sonrío.

—¿Me puedo unir? —pregunta Justin y yo asiento.

—Lindo pijama. —Me río al ver sus pantalones de Superman.

—Tú también. —Se ríe cuando baja la mirada hacia mis pantalones de Super Mario Bros. Cuando pasamos por el pasillo del helado, Justin se detiene para tomar un poco de helado y un pastel.

—No, no, no, para —le digo, y él me mira de manera extraña. Me inclino hacia mi carrito y bajo la voz para decirle—: Aquí congelan esos pasteles para que duren más tiempo. Los congelan bastante. Un hielo duro. Una vez que los llevas a casa, se ponen blandos y saben ugh. —Sacudo la cabeza con disgusto—. Créeme, no quieres comprar eso —le digo y él asiente para después regresarlos.

»¿Sabes qué? Tengo una idea. ¿Por qué no nos encontramos después del almuerzo y te llevo a la mejor pastelería de la ciudad? —le cuento la idea.

—Bueno, ¿por qué no nos reunimos para el almuerzo y luego vamos a la pastelería? —Justin da una mejor idea, y una sonrisa crece en su rostro cuando asiento.

—De acuerdo, vayamos al pasillo de la pizza y te mostraré la mejor pizza congelada —le digo mientras empujo el carrito—. Pero para estas pizzas congeladas necesitas comprar el queso y el peperoni para que sepa mejor —añado, y Justin se queda en silencio—. ¿Qué? Somos un pueblo pequeño, no recibimos las mejores cosas del mundo —le digo, y él se ríe.

...

Camino en la acera con Justin a mi lado. El almuerzo estuvo bastante agradable, comimos emparedados. Sujeto mi vestido con cuidado para que el viento no lo levante. Echo un vistazo a mi favorita y la única librería de la ciudad y Justin se detiene.

—¿Podemos hacer una rápida parada antes de ir a la pastelería? —le pregunto a Justin, y él se gira para ver la librería.

—¿Storybrooke? —pregunta con una pequeña sonrisa.

—Sip, el dueño es un gran admirador de Once Upon a Time. —Sacudo la cabeza con una sonrisa—. ¿Vienes? —le pregunto cuando comienzo a cruzar la calle, y él me sigue. Entro a la tienda y comienzo a navegar entre los libros, con Justin siguiéndome.

—Así que, ¿tienes algún artista o banda favorita o algo por el estilo? —pregunta de manera repentina cuando yo recojo un libro y leo la descripción de atrás.

—En realidad no. Los libros son lo mío. A veces solo escucho lo que es popular en la radio. Pero prefiero los libros ante la música. —Me encojo de hombros y él asiente—. ¿Qué hay de ti? ¿Libros o música? —le pregunto.

—Música. No lo sé... se siente como una especie de terapia —explica Justin.

—No creo que la canción Selfie cuente como terapia. —Arrugo la nariz y él se ríe.

Behind My Blood → j.b → spanish versionWhere stories live. Discover now