One Shots De Fútbol II

Julian Draxler

"Las palabras afectan nuestra realidad, y cuando usamos palabras positivas para entrenar nuestros pensamientos y sentimientos, nuestras conductas serán positivas"

Esas eran las palabras que siempre mi madre me decía, ella insistía en que yo desarrollara un pensamiento distinto al que hoy en día existía y hasta hoy no entendí por completo la frase.

-Hey tu, mañana debes entregar un resumen sobre las estadísticas del club - me aviso Carolina, mi compañera de trabajo.

-Pero si aun no entregue el resumen de la semana pasada - 

-Entonces me temo que tendrás que ir buscando otro trabajo - Dijo duramente y se fue.

Me quede aterrorizada por unos momentos.

¿Y ahora que haría si no tenia trabajo? 

Que fracaso soy, pero es mi culpa.

Oh, cuando mama se entere... Y de repente escuche sus palabras en mi mente.

"Se positiva"

Me arme de valor y me dirigí hasta la oficina del director de la empresa, hablaría con él para pedirle una oportunidad.

-Pasa Alo, sien tate por favor -

-Gracias, yo venia a hablar con usted - comencé totalmente nerviosa.

-¿Que sucede? - pregunto preocupado mi jefe.

-Hoy Caro me comunico que debo entregar los papeles con el resumen del club, pero aun no he terminado los de la semana pasada... ¿Seria mucho pedir que me diera plazo hasta el lunes para entregárselo? - rogué con las ultimas esperanzas.

-Alondra, como sabrás tu trabajo es muy importante para nosotros y contamos con esos resúmenes para la semana que entra, ya que vendrá un empresario muy importante de un club extranjero, si estas completamente segura que terminaras con esos papeles yo te doy ese plazo, pero por favor se sincera si no llegas -

-Muchas gracias, y por supuesto que tendrá esos resumes el lunes a la mañana -

Por primera vez en mucho tiempo volví a sentir la presión para entregar un informe que fuera impecable, desde que me había graduado de la universidad no sentía esa sensación. Si bien fue algo fácil encontrar trabajo, la situación era de lo mas lamentable. Solo agradecía a mi esfuerzo que dieron buenas calificaciones, eso fue lo que me permitió encontrar trabajo en uno de los clubes de fútbol mas importantes de México.

Mi tarea no era entrevistar a los jugadores de acuerdo a mi especialización, mas bien me ocupaba de realizar un balance estadístico sobre las incorporaciones recientes, números que dejaban los partidos, que incluían posesión de pelota, pases correctos y de mas cosas que se terminaban haciendo por demás pesado.

Pase todo el fin de semana encerrada en mi casa, intentando que los números no salieran de su lugar. Dormí tan poco que cuando llego el lunes a la mañana me costo horrores levantarme, aun así con mi actitud positiva de que había logrado un buen informe llegue con una sonrisa a la empresa. No me percate que todos se movían de aquí para allá como si el mundo se viniera abajo, hasta que Carolina choco conmigo derramando café sobre mi blusa.

-Muévete, un empresario del Paris Saint-Germain esta por llegara - Soltó un grito y corrió para el lado contrario.

Sin nada mas que hacer, deje los papeles en la oficina de mi jefe y corrí hacia la tienda mas cercana para compararme una nueva blusa.

-Aquí esta nuestra genio - dijo uno de mis compañeros a penas entre y seguido de eso escuche aplausos de todos. 

-No entiendo nada -