One Shots De Fútbol II

Julian Brandt

Él llegó a mi vida y lo único que ocasionó fue alegría, pero ese sentimiento se vio intensificada en cada día que pasaba. Porque de repente lo llegue a querer, no como se quieren a los amigos, no, está vez empecé a proyectar cosas juntos, vi nuestra vida a futuro, vi cuán felices seríamos si tan sólo te dieras cuenta de cuan dispuesta estoy por ti, pero también pensé en mi, en que no siempre puedo poner y hacer todo yo, también debe haber desde el otro lado alguien que debe ayudar a remarla.

Y ahí no estaba la persona que yo quería.

Fue duro darme cuenta de cuan poco me valoraba, cuan poco me quería realmente y fue difícil entender que, aunque él estuviera ahí para mi, sólo lo haría por ser nada más que un amigo. Porque era así, él no me veía con otros ojos, él me veía con los mismos ojos que utilizaban a una chica para jugar con ella y no para amarla como se merece cada una.

Y agradecí haberme cruzado en su camino, me ayudo a ver las cosas desde otro punto de vista, me hizo ver que no toda la ficción que solía leer era verdad, que existían personas con mucho dolor dentro suyo que no les importaban los sentimientos de los demás a tal punto de ellos ser egoístas y buscar sólo 'su felicidad'. Y aunque yo viera algo distinto en él, otra chispa, otro pensamiento, al estar rodeado de la misma gente sin corazón no habría cambio.
No me arrepentí de quererlo, era lo que en ese momento sentía y debía disfrutar de esa emoción, porque sino ¿en que momento o situación viviría algo asi?

20 de octubre de 2016.

***Actualidad - 9 de mayo de 2022***

Termine de leer la carta que escribí cuando tenia 20 años, si bien habían pasado 6 años después no la había vuelto a encontrar, hasta hoy.

Simplemente me encontraba asombrada de lo que llegue a sentir por Julian, ni siquiera recuerdo bien como fueron las cosas. Sólo que jugó conmigo por un tiempo hasta que se cansó de mí.

Después de ese día nunca más lo volví a ver, no me busco ni yo a él, había roto gran parte de mi corazón que hasta llegue a odiarlo. Pero en Inglaterra olvide todo, en realidad parcialmente todos mis recuerdos, puesto que sufrí un accidente y perdí la memoria.

Si me cruzará nuevamente con él en esta vida, me gustaría verlo hecho un hombre, hecho una persona de bien y con sentimientos buenos, y no siendo el mismo chico estúpido que jugaba con los sentimientos de las personas.

Termine mi café y me dispuse a caminar un rato por las calles hasta que me cansé y volví a mi departamento, Rubí me recibió con demasiado amor y le respondí el cariño pero al ver todo el desastre que había ocasionado frunci el ceño e indique lo que habia hecho negando con la cabeza.

-¡Rubi, no puede ser que siempre hagas lo mismo! - la rete y comencé a recoger todas las cosas que mi perra tiro.

La voz de Chris Martin resono por toda la habitación indicandome que una llamada estaba entrando.

-Hallo - respondí sin ver de quien se trataba.

-Sami - escuche la voz de mi madre y al instante sonrei, pero algo en su voz me preocupo.

-¿Qué sucede?- respondí asustada, se suponía que en Alemania, al igual que aquí, ya era de madrugada y mamá es una de las pocas personas que se duerme antes de las 23 pm.

-Tu padre... -alargo - Él tuvo un ... yo sólo ... lo siento tanto Sam, los doctores hicieron todo para salvarlo pero no se pudo, él no resistió - dijo llorando.