One Shots De Fútbol II

Kevin Trapp

Se dice que el primer amor nunca se olvida y esa frase comenzo a tener sentido cuando decidi seguir sin él.

Nos conocimos cuando teniamos 3 años y desde ese momento nuestras vidas se volvieron paralelas. Haciamos cualquier cosa juntos, jugabamos, pintabamos, las tareas se volvian divertidas cuando estabamos uno con el otro. A nuestro pequeño circulo se le unio un nuevo chico, Julian quien se convirtio en nuestro mejor amigo. Ya a la edad de 7 años comenzamos a distanciarnos por culpa de es esa tipica fase donde los niños dicen "las niñas son feas" "nunca me va a gustar una niña" y ese tipo de cosas. 

Luego de esa fase, llego la pubertad, la hermosa etapa donde cada niño pasa a convertirse en un adolescente para luego ser su adulto. Al prinicipio nuestra amistad se volvio mas cercana, incluso existía demasiada confianza como para contarnos absolutamente todo, bueno, en mi caso le conte todo, ya que claro, lo consideraba mi mejor amigo. Pero con el tiempo me di cuenta que él a mi no me veia de esa forma. Quizas, no se, si lo hubieramos hablado bien sabría con exactitud que sentía él por mí, pero hasta el momento lo único que sabía y se, es ese sentimiento de amistad que solía tener para conmigo. 

Nunca por mi mente paso algún otro sentimiento por Kevin que no sea de amistad, claro hasta que cumplí los 14 años y empecé a mirarlo de otra forma, ambos habíamos cambiado físicamente, él comenzo a tener un cuerpo mas varonil y yo todo lo contrario, a causa de mi ansiedad engorde gravitoriamente, dejándome fuera cualquier ligue. Ningún chico se me acercaba, excepto él, quién comenzo a tener más popularidad a causa de jugar al fútbol. Hablabamos por las redes sociales mucho, me consolaba saber que él estaba del otro lado para animarme en cada momento malo, pero cuando necesitaba un abrazo o algún contacto físico no lo podía obtener, porque claro, ¿que dirían los demas?

Ese fue el problema, mejor dicho su problema, a Kevin le interesaba de gran manera lo que pensara los demás. 

Llegue a estar complemente enamorada de él, pero este amor fue diferente a los otros, asi lo viví. Cuando se dio cuenta de que yo lo miraba de otra forma empezó a comportarse de una manera mas agrandada, mas orgullosa. Claro, todas las chicas del instituto estaban muertas por él, que yo fuera una más no me hacia especial, sentía su rechazo a cada paso que daba, mi inseguridad salía a flote, junto con los celos, cuando lo veía coquetear con una nueva chica y me preguntaba que me gustaba de él. Lo conocia perfectamente como para saber que amaba cantar pero tambien jugar al fútbol, o su sabor de helado preferido o cuantas cosas más. Sentía que tenía que ser yo la chica de quién debía enamorarse, claro estaba que él no pensaba lo mismo y como lo dijo una vez "nunca saldría contigo Clarie", no tiene una idea de cuanto dolió escuchar eso, fueron incontables las lágrimas que derrame por Kevin.

Pero un día entendí que jamás estaríamos juntos y decidí seguir adelante, con su presencia atormentandome cada día. No fue fácil olvidar al chico que tanto quería, verlo todos los malditos días con una sonrisa esplendida mientras yo moría por dentro fue tarea difícil. Tome distancia para intentar calmar el dolor. Hasta que un día dejo de doler y fue ahí cuando puede mirar a otros chicos sin pensar en Kevin.

En nuestro último año, antes de ingresar a la universidad volvimos a tener un contacto mas cercano, donde existieron abrazos mas fuertes y sonrisas verdaderas. Fue un año excelente, hasta que yo decidí postular por una beca en el extranjero, la cual fui aceptada y 6 meses despues estaba volando para estudiar en Francia. 

No volví a saber nada de él, sólo hasta que se hizo un jugador profesional y su cara apareció por media Francia. Su familia me saludaba efusivamente cuando me veía por la calle cada verano que volvía a Alemania. Pero nada de él, no lo cruce nunca, a pesar de que vivieramos en la misma ciudad.

Mi vida seguia su curso, de vez en cuando me acordaba de Kevin cuando parecía en televisión, ya que si bien había sufrido mucho amandolo en "silencio, tambien él me enseñó  demasiadas cosas, que cueste creerlo era difícil de superar. Cada chico que paso en mi vida no se parecía un poco a él, y sé, que aunque estuviera mal muy dentro mío deseaba volver a verlo y que por esta vez al fin pudieramos vivir una digna historia de amor.