Seduciendo al Kazekage | Gaasaku

Capítulo 6: El encuentro

-Temari.-

Susurró la Haruno tragando su propia saliva. La rubia de pelos puntiagudos se acercó a ambas con pasos seguros.

-Espero que no se les haya hecho pesado el viaje, tiempo sin verlas.-

-Si, realmente vinimos por la celebración que le van a hacer al nuevo Kazekage.-

-Mi hermanito lo logró.-

Una gota anime se resbaló de la cabeza a Sakura cuando vio a la rubia menor sonriendo y sonrojada.

Estaba orgullosa de su hermano menor de haber sido elegido como el Quinto Kazekage después de su padre.

Hace años era difícil tratar con Gaara, pero gracias a Naruto había cambiado drásticamente para bien, y era ahora respetado por los aldeanos.

Tsunade sólo le devolvió la sonrisa satisfecha.

-Iré a ver al consejo de Suna. Por favor Temari, muéstrale a Sakura donde nos vamos a quedar.-

Temari abrazó de un brazo a la pelirosada. Esta abrió los ojos sorprendida por su acto.

-No se preocupe, yo le enseñaré toda la aldea.-

La Godaime simplemente afirmó con la cabeza y desapareció en un 'puf'.

-Entonces, vamos.-

Temari agarró del brazo derecho de la Haruno con fuerza para arrastrarla dentro de la entrada finalmente divisando el gran pueblo de la Arena.

Sakura recordaba muy claramente cuando había venido a Suna para salvarle la vida a Kankuro del veneno del Akatsuki, Sasori.

-Y dime... ¿Cómo te ha ido?-

Temari miraba con curiosidad a Sakura mientras caminaban dentro del pueblo.

La ojijade había caminado durante muchos minutos sin haber mencionado alguna palabra, pues mantenía la mirada perdida observando todo lo que pasaba alrededor de ella a excepción de la rubia.

-Digamos que bien.-

Respondió en tono de molestia, al recordar cierto azabache.

-Bien mal, esa cara que tienes quiere decir que algo pasó con el Uchiha.-

La rosada abrió la boca lo más que pudo para luego observarla fijamente, era como que le hubiera leído la mente.

-Ya decía yo, ese tipo nunca debió volver a Konoha... lo peor fue que lo perdonaron los del consejo.-

Ella cruzó los brazos mientras seguía caminando.

Sakura rió nerviosamente.

-Sé que eres la señora Uchiha pero, realmente yo le hubiera dado una gran patada en la cara.-

El sudor de la sinceridad de Temari era impresionante.

-Yo... ya no estoy con él.-

Los aldeanos que pasaban a sus costados miraban a las dos chicas muy curiosos, especialmente a la pelirosada por el extravagante color de cabello y la conversación que mantenían.

La de coletas mostró un gesto de tristeza.

Bastante sarcástica.

Luego esta chasqueó la lengua.

-Te lo dije, es que de verdad ese tipo me enferma...-

Antes de que Sakura le contestara, ella le interrumpió parándole el paso.

-Llegamos a la torre. Gaara debe estar ocupado pero vamos a verle.-

Y nuevamente, la Haruno fue arrastrada dentro del gran torre Kazekage.

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El viento de arena era música para su oídos.

Algo raro, pero él disfrutaba estar en la terraza y observar su aldea en paz.

Era el viento de arena que lo hacía resaltar entre las demás aldeas.

Traía el traje azul del Kazekage, junto con el característico gorro.

-Gaara.-

El pelirrojo volteó encontrándose con los ojos negros y las líneas moradas del rostro de su hermano.

-Sakura Haruno ha llegado.-

-Muy bien, ya voy a mi despacho.-

Kankuro hizo una reverencia y desapareció.

Gaara apreció a lo bajo una madre que estaba acompañando a su hijo de la mano hacia una tienda.

Miró atentamente que el niño quería un juguete y su mamá le sonreía y entraban para comprarlo.

Él cerró los ojos y decidió bajar a su despacho.

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-Temari, no seas ruidosa.-

-Ya ha tardado mucho, estúpido hermano.-

Apenas había pasado unos minutos en los que los dos hermanos de Gaara y Sakura lo esperaban en su despacho de Kazekage. Pero la rubia de coletas era una persona impaciente.

-Ya le avisé que están aquí... -

En eso, la puerta se abre dejándose ver al pelirrojo de ojos aguamarina.

-Temari, Kankuro.-

Gaara se dirigió a su escritorio y se sentó observando a ambos seriamente.

-Pueden irse, yo me encargo.-

La ojijade levantó la cabeza intercambiando miradas con el pelirrojo.

-Pero..-

-Fuera.-

Temari suspiró derrotada y caminó hacia la salida junto con Kankuro.

Cuando escuchó la puerta cerrarse, prosiguió con su voz gruesa y fría.

-Yo sé a que has venido, Sakura.-

Su corazón dio un salto, sus mejillas se tornearon rojas y bajó la mirada intimidada.

¿Acaso él...?

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Holi, ya llegué de nuevo.
Aquí está otro capítulo, lo escribí un poquillo más largo para vosotros ya que había dicho ayer que iba a subir otro capitulo pero no lo hice xD. Nuevamente gracias por las estrellas, comentarios y visitas, me hacen muy happy <3.

Nos leemos.