Chapter sixteen 🍃

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¡NO HAY NADIE! —gritó el cubano cuando sintió cómo golpeaban la puerta de la habitación.

Jason y Kirk habían estado con él hace apenas unos minutos atrás, pero luego de agradecerles por sus palabras de consuelo, les pidió que salieran de la habitación; quería estar solo.

Dave, sé que estás ahí. ¿Puedo entrar? —era Gary.

¡No! Por favor, ándate —le respondió el caribeño.

La puerta se abrió de todas formas, a pesar de que Dave le había dicho que no. Se secó las lágrimas a la velocidad de la luz. Odiaba que la gente lo viera llorar.

Dave... —dijo Gary una vez que hubo cerrado la puerta, acercándose al nombrado.

Vete, quiero estar solo, por favor —le rogó con angustia.

¿Era... era verdad lo que dijo James? —se sentó en la cama junto a él, buscando su mirada.

Dave lo miró con una pisca de ironía en la mirada. ¿Qué clase de pregunta era esa? Era obvio que era verdad.

Bien, bien, pero quería saber cómo estabas. Yo... siento que hayas tenido que pasar por ese momento incómodo.

No le respondió nada. ¿Qué le podría decir? Si el sentimiento ni siquiera era mutuo. Era absurdo. Además, las palabras estaban atascadas en la garganta.

Y yo siento... —tragó saliva, ya que tenía la garganta apretada —...siento que te hayas tenido que enterar de esa forma, aunque sospecho que ya lo sabías —rió con amargura.

Tienes razón —medio rió. —No estaba seguro, pero me lo imaginaba. Es sólo que...

Entiendo, no tienes que explicar nada Gary —le cortó algo brusco. —Es innecesario que me digas algo que ya sé. Que sólo me ves como a un amigo, y que te gusta Kirk. En serio no tienes que decirme nada.

Es que —suspiró Holt —, no lo sé Dave.

¿Qué cosa? —preguntó levantando la mirada, haciendo un enorme y valiente esfuerzo por sostenérsela.

Gary se levantó de la cama, y le extendió la mano. Dave, luego de dudar por unos instantes, se la tomó. El cumpleañero lo guío hasta la ventana de la habitación, y abriéndola, le invitó a pasarse por ella al otro lado, en donde estaba el tejado. Se sentaron uno junto al otro sin decir nada.

No sé si en realidad me gusta Kirk, ¿sabes? —habló por fin el guitarrista luego de unos interminables segundos de silencio para el baterista.

¿Qué quieres decir?

Desde que éramos niños creí que me gustaba, o al menos que me atraía. Pero el otro día cuando conversábamos en la cocina, me di cuenta de que en realidad no era así. Fue una estupidez que surgió cuando Lars me confirmó que le gustaba. Fue algo así como que apareció mi instinto competitivo, creo. Lo sé —rió. —Es estúpido.

Algo —dijo Lombardo sin discutirle nada. Ambos rieron.

Y el otro día, cuando me diste mi regalo de cumpleaños —prosiguió mostrándole el collar atado alrededor de su cuello. —Y nos besamos —el cubano agachó la vista para que su pelo le tapara el naciente rubor de sus mejillas —, sentí algo extraño que...

No tienes que fingir que te gusto para hacerme sentir mejor, Gary —dijo Dave sin atreverse a mirarle.

No estoy diciendo que me gustas, Dave —explicó serio. —Estoy diciendo que me gustó. Y, no sé, sentí algo diferente contigo. Es algo que nunca había sentido. A lo que quiero llegar con todo ésto —explicó lo mejor que pudo intentando mantener su paciencia. —Es que quiero sentirte más.

Lombardo arqueó una ceja.

Bien, eso sonó bastante extraño.

Está bien, creo que te entiendo, Gary —soltó una risa, no muy convencido de todo lo que el castaño decía. —Podemos hacer como que ésto nunca pasó, y ya. Al fin y al cabo, es mejor así.

Un silencio incómodo se formó durante unos infinitos segundos ya que Gary comprendió que era absurdo tratar de decirle algo más, por lo que Dave decidió hablar.

Creo que deberías irte... Después de todo, es tu fiesta y te la estás perdiendo por mi culpa.

Pero yo...

Gary, de verdad —le interrumpió—. Por favor, ve.

Holt iba a volver a abrir la boca, pero prefirió guardarse cualquier comentario. Era mejor así, de todas formas.

Bien —se levantó, y entró nuevamente a la habitación. Caminó hasta la puerta, y cuando estaba a punto de salir, susurró—; lo siento —y salió dejando a Dave sumido en la obscuridad, y en sus sollozos.

Luego de cerrar la puerta tras de sí, tuvo que apresurarse en bajar las escaleras ya que al parecer empezaba una ridícula pelea entre Mustaine y Axl sobre cuál tenía el cabello más lindo.

¡No me toques, rubia teñida! —exclamó el colorín.

¡Igual mi pelo es más bonito que tu mierda de cabello pajoso! —exclamaba de vuelta el otro involucrado en la discusión.

Gary se acercó al grupito que estaba espectando, justo cuando por su lado pasaban Jason y Kirk, quienes se dirigían a la habitación en que se encontraba Lombardo.

Eh, Dave me ha dicho que quiere estar solo —dijo el castaño, deteniendo a ambos. Kirk lo miró, con algo de molestia en su mirada.

Que no quiera verte a ti no significa que no quiera vernos a nosotros, Holt —dijo Hammett siguiendo con su caminar. Jason le mostró una mueca de disculpa, y siguió de cerca a Kirk, hasta que se perdieron entre la gente.

Gary suspiró, y se dirigió nuevamente hacia donde se encontraban ambos pelirrojos discutiendo, sin intenciones de hacer nada más aquella noche.

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worst chapter ever. iknow:(
re fome, pero necesario:(

les doy las gracias si es que aún me siguen leyen2, pq sé que valen callampa mis capítulos últimamente dbkñsmdg pero pronto se vendrán tiempos mejores, i swear ✨

lxs quierooO💓

cortesía de -EXODUS ♡

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cortesía de -EXODUS

fight fire with​ fire. [pausada indefinidamente]Where stories live. Discover now