—Vas a matar al profesor y de paso te llevaras esa ala de la universidad. Lo bueno es que estaré supremamente alejado de dicho lugar, lo malo; quizás alguno de mis jugadores este por allí para entonces—Dijo causando que Pame le sacara la lengua, él respondió de la misma manera. Saludo a unas cuantas personas de abrazos y besos en el camino antes de volver a avivar la conversación—. Así que tú y la mexicana son amigas ahora.

—La mexicana tiene nombre y es Ximena. Y sí, estamos en proceso de crear una muy buena amistad, ¿por qué? Aléjate de ella. No eres para nada su tipo Jackson.

—La voy a invitar a comer arepa, en realidad creo que debería ir todos. Mi hermana quiere verlos nuevamente. Además, no creo que tu estés muy molesta por ello, iría Fitzpatrick ahora con eso de que tienen algo—en el momento que Jackson dijo las palabras la chica quedo fría.

— ¿De dónde sacas eso? —Pregunto enseguida tratando de aligerar la situación.

—No me hagas reír. Soy Jackson, no tonto. Además, me gusta estudiar a los jugadores, siempre estoy alerta frente a todas las cosas y no son tan buenos ocultando las cosas. No sale de como quiera que se llame tu lugar de tortura tecnológica que no entiendo. Incluso está incumpliendo las dietas por ti. No se aquí como le dirán ustedes los gringos pero yo le llamo tener algo.

—Es mi nuevo aprendiz. Por eso no las pasamos todo el tiempo juntos—Comento la chica. Ella tampoco quería que las personas supiesen mucho, primero porque era malísima para ser demostrativa en persona en cuanto de relaciones se trataba. Segundo, no tenía nada con él y tercero, tenía está loca teoría de que el decir algo o contar algo, lo dañaba todo. Así que por esa razón procuraba tener en secreto pero ahora no tan secreto sus encuentros clandestinos con Timmy.

De lo único que si podía decir que se declaraba culpable era de hacerlo romper la dieta. Pero de eso podía también culparlo a él porque siempre llegaba preguntando "¿Qué comemos hoy?" y a ella la movía básicamente la comida.

—Bueno, no importa, solo piensa lo que te dije. Arepas en mi casa, llevas a Ximena y listo. Te diré cuando, pero por ahora no. Tengo que mantenerme a la línea para el próximo partido y deja de hacer que mi jugador coma tantas grasas dañinas para el cuerpo—dijo antes de regalarle un beso en la frente—. Tengo que ir en busca de Michael para un asunto pendiente que tenemos, nos vemos luego. No explotes el salón de química, créeme, los estudiantes te lo agradecerían.

La chica rio antes de despedirse con la mano. Comenzó a caminar hasta las escaleras. Tristemente se le había quitado el hambre en ese momento y ahora solo quería hacer explotar cosas. Todo para que su casi sobrina llevara el mejor trabajo del mundo.

La universidad se encontraba llena y los protestantes se encontraban haciendo barricada con pupitres en el bloque c como huelga para que les permitan colocar un salón de descanso exclusivamente para ellos. Porque con el que contaba la universidad siempre se encontraba lleno. Eran demasiado locos cuando querían.

El teléfono de la melliza comenzó a sonar fuerte espantando a algunas personas por el tono de llamada de elefante que le había puesto Bradley la noche anterior para cada vez que Samantha la llamara. Contesto rápidamente.

—Necesito tu ayuda. Me llamaron de la escuela diciendo que Sandy se encontraba enferma, fui corriendo por ella antes de ir a mi examen de artes plásticas, resulta que en el camino me dice que todo fue un plan para no estar en la escuela porque odiaba ir a clases de educación física, por dicha razón invento un dolor para irse a casa. Pero tengo un grandioso problema, no puedo dejarla en casa porque nadie se encuentra allí, ni siquiera Brownie pues está en la peluquería, entonces llame a Bibi pero se encuentra en reunión con Braxton, por lo tanto no quiero molestarlo porque se va a preocupar y...

FUERA DE JUEGO | LIBRO #2|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora