"Hasta donde podemos llegar para entablar una amistad, un amor o una enemistad? El mundo esta envuelto en un caos difícil de visualizar. Las palabras no completan las sutilezas necesarias para describir esta realidad. Recordar, aceptar y luchar.
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--Advertencia: El siguiente relato incluye partes de eventos reales ocurridos en los primeros dias de Marzo de 2011 en medio de un lamentable incidente en Japon. Se requiere la discrecion del Lector. --
Seccion 1: Actualidad.
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Una joven de cabello lila se dedicaba a golpetear con sus dedos y mirar por una gran ventana el paisaje maltrecho de un exterior oscuro y rojizo. Esa joven tenia una mirada contrariada y algo afligida pero tambien se encontraba muy malhumorada y por ello suspiraba de tanto en tanto. Al parecer solo pensaba en una cosa en su mente, sobre de que iba todo ese asunto en el que estaba envuelta ahora y porque no pudo llegar a preveer las circunstancias que la estaban rodeando. En el fondo se sentia una incompetente y se arrepentia de no haber tenido mas consciencia sobre como se suscitarian los eventos.
En aquella misma habitacion se encontraban sentados cuatro personas mas alrededor de una cama de hospital donde un chico de cabello castaño medio se encontraba dormido sin emitir ninguna reaccion, conectado a varias maquinas que se dedicaban a monitorear sus constantes y controlar que su vida no peligrara. Uno de esos chicos, el rubio, se acomodaba las gafas mientras que, cruzado de piernas en su lugar, chequeaba de tanto en tanto unos papeles y en un portatil escribia sin parar. Otro estaba durmiendo y babeando en un sillon y llevaba una enorme cantidad de rastas, y gruñia y decia cosas cada tanto. En un rincon y sentada se encontraba una chica de cabello largo y castaño violaceo, algo consternada y desequilibrada, totalmente desarreglada y despeinada con gafas enormes y miraba cada tanto de reojo a aquel chico rubio y se hundia asi misma en su mar de pensamientos. Y finalmente, con la cabeza recostada a un lado del brazo derecho de aquel chico, sosteniendole la mano y acariciandola cada tanto. Todos vestian un uniforme formal, oscuro con corbata, excepto el chico en la cama, el cual traia una bata de paciente.
- ... La vision de una cama vacia... Ya han pasado dos meses... No me digas que... Como siempre... Es un idiota... - Dijo la hermosa chica de cabello lila mientras inspeccionaba de reojo al chico que permanecia en la cama recostado.
- Kirigiri... No te lo tomes a mal... Pero creo que la idiota eres tu... Y lo sabes bien... - El joven rubio le miro de reojo. - Solo estas molesta porque le estuviste ignorando... Pensando que es un inutil... O quizas tus memorias esten regresando y ahora puedas ver con mejor claridad el panorama donde estas parada... - La chica de cabello castaño y ojos azules y grandes le observo de forma punzante.
- Togami! Eso es cruel! Kyoko no tiene la culpa... - El chico la interrumpio.
- La tiene... Igual que todos nosotros menos tu que has estado con el desde el principio... Eras la unica que sabia sus planes y lo que le estaba pasando... Los demas somos unos idiotas... Nos guste o no... Pero eso no quita que el mas idiota y suicida de todos sea Naegi... Pero el quiso decirnos que tramaba, asi que no podemos echarle la culpa simplemente por tomar una decision... Creo que tiene mi respeto por haberlo intentado al menos... - Dijo de una forma franca, sincera y cruel.
