Día 71 [Lunes]

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Apenas KyungSoo traspasó la entrada de la escuela pudo sentir sobre sí todas las miradas de las personas que estaban por los alrededores.
Supuso que todos habían ido a la fiesta de BaekHyun y habían sido testigo de su borrachera.

Caminó intentando ignorar el sentimiento frío sobre su espalda que dejaban los ojos ajenos y mentalmente se prometió que no volvería a beber aunque LuHan por fin admitiera que tenía cara de niña.

KyungSoo no había amanecido la mañana del Domingo con resaca, ni siquiera le dolía la cabeza. Lo que le molestaba era tener un vacío en su mente.

Según su madre había llegado relativamente temprano y en buenas condiciones... acompañado de un chico.
Sin duda se habría asustado de no ser porque tenía su teléfono, la billetera y la ropa donde debía estar.

Entonces, ¿quién lo llevó a casa?
Cuando se lo preguntó a sus amigos ninguno fue capaz de responderle, al parecer cada uno tuvo suficiente alcohol en su cuerpo como para no estar pendiente de él.

No estaba entre sus opciones preguntarle a algún desconocido así que tuvo que aguantar las miradas sobre él con la curiosidad de sus acciones la mayoría del día.

La sorpesa sobrepasó la duda cuando JongIn lo alcanzó en un pasillo y le preguntó si se había divertido en la fiesta.

- Ah. Tú... no recuerdas nada, ¿cierto? - susurró con un semblante serio al verlo dudar y sin respuesta. KyungSoo asintió y cuando se decidió a preguntarle sus inquietudes JongIn apretó sus manos y se largó.

KyungSoo lo siguió con la mirada todo lo que pudo pero al verlo llegar a TaeMin y abrazarlo tuvo que dar media vuelta y avanzar a su siguiente clase.

Aunque apartar la mirada no ayudó en nada pues recuerdos de la fiesta lo dejaron a nada de explotar de ira.

Ver a su chico con otro bajo las influencias de la cerveza era más fácil que recordarlo sobrio. Impotencia y frustración lo recorrieron al saber que había sido tan cobarde como para no hacer nada y se maldijo por permitir incluso ahora que JongIn se fuera con otro en lugar de estar con él. 

Se había prometido a sí mismo que haría lo posible por siquiera entablar una amistad con el moreno, y con eso presente en su mente esperó que la campana volviera a sonar.

Recorrió los pasillos largo rato hasta que fue capaz de encontrarse a JongIn y ¡sorpresa!, ahí va el oxigenado de TaeMin a su lado, hablando de cosas que quizás ni siquiera le interesaban.

A quién engañaba si JongIn iba con una sonrisa de oreja a oreja mientras escuchaba a su amigo. KyungSoo dudó.
Se supone que él quería la felicidad para su moreno porque lo amaba y en ése momento parecía estar feliz riendo junto a TaeMin...

Aún así no se detuvo y siguió caminando hasta que solo unos metros los separaban.

Entonces, ambos parecieron notar su presencia y se detuvieron. Pareció cámara lenta cuando el rubio tomó a JongIn del brazo y lo jaló con fuerza hacia atrás, haciéndolo caminar a paso rápido por donde habían venido.

Pareció cámara lenta, sí, pero solo pasó en un segundo. Y fue el mismo tiempo que KyungSoo demoró en entender la situación y declararle la guerra a Lee TaeMin por su moreno.

100 días para estar con él [EN EDICIÓN]Where stories live. Discover now