9

1K 71 9
                                    

Anahí.

Miro la comida sin ganas, Poncho no deja de mirarme con total seriedad.

Se que ayer no estuvo con otra mujer a pesar de haber oído esos gemidos algo me impulsa a no creer, él me ama y yo igual, quiero que me crea y me ayude a saber si realmente ese maldito me toco.

Trago saliva al sentir como se acerca a mi. Pone una mano en mi mejilla y la acaricia; luego baja la cabeza a mi altura.

Alfonso: Es mejor que comas todo él desayuno no me andes con esa carita de inocente que no te queda.

Asiento y decido que es mejor comer y no darle la contraria, su expresión me aterroriza.

Cuando finalizo mi desayuno subo a mi habitación a cepillarme los dientes. Miro mi reflejo en él espejo y me fijó en algunos golpes que se notan morones. Las lágrimas amenazan con salir pero reprimo, debo de resolver todo esto y luego convencer a mi esposo que todo fue planeado se que fue una trampa por medio de Nicolás y espero que mi amiga no este involucrada porque juro que me las pagara.

Él día trascurre aburrido.

Suspiro cansada de estar todo él día encerrada. Poncho dio orden de que me dajaran encerrada. Son mas de las 3 de la tarde no tengo mi móvil conmigo y no quiero llamar a mi madre desde él teléfono me hará preguntas de porque no he ido a verla u otras cosas.

Tocan la puerta y le dijo que pasen

--- Señora, su señor esposo llamó, dejo dicho que conteste él teléfono en seguida la llama.

Asentí pidiendole que se retire. Al ella salir escuche un clic de la llave, nuevamente encerrada como si de una princesa me tratara.

Él teléfono suena y esta vez indignada descuelgo.

Alfonso: ¿Te haces la de rogar cierto? - inquiere con una evidente molestia en su tono de voz.

Anahí: No es eso - digo en susurro - Necesito un móvil - pido con nervios.

Alfonso: Lo siento pero por ahora no lo tendras. Bien entonces...¿como va la princesa?, me imagino que bien después de todo tu engaño aun sigue siendo consentida por su buen esposo y es tratada como una reina.

Ríe tratando de ofenderme pero me inmuto en ponerle mente a su burla, como deseo que esto sea una maldita pesadilla y no la jodida realidad.

Anahí: Necesito que des la orden para que almenos pueda salir al jardín, por favor Poncho y debes saber que estoy estudiando necesitó que entiendas que yo nunca te engañaría eso fue una maldita trampa por parte de Nicolás te lo ju...

No me deja terminar de hablar cuando se hecha una risosota, provocando que un nudo se forme en mi garganta.

Alfonso: Ya esta hecho todo Anahí, tuve suficiente evidencia y la verdad te amo por esa razón tratare de olvidarme de eso, pero ten una cosa muy presente en tu cerebro ya nada sera igual, buena nos veremos en la noche.

La llamada finaliza y yo me hecho a llorar al sentir como mi pecho se encoje por tal cosa, como es posible que él no crea en mi, dios ayudame para que esto se descifre yo jamas engañaría a mi esposo ese fue un maldito plan por parte de ese mal nacido.

Decido sacar mis apuntes y leer un poco para no pensar en todo lo malo que me esta sucediendo por ir a esa maldita fiesta montada por mi supuesta amiga, se que tal vez fue su culpa o ¿no lo es? Lo único malo fue haber aceptado ir, creo que eso no debió suceder, si pudiera regresar él tiempo lo pensaría antes de haber aceptado en ir a ese lugar en donde jamas pensé que pasaría aquello.

•Amor Enfermizo © • (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora