---Hola..y adios---Le dije sin voltearla a ver---Si madre iré a casa de Lucía, volveré más tarde.

---Cuidate, por favor.

Besé su frente para después salir deprisa pero me detuve al escuchar la risa de aquella mujer y la voz de Dorian.

Sonreí con la malicia, ya verás Doriancito.

************************************

Lucía había llegado y le había pedido un favor.

---No te preocupes que yo los entretengo, tu ve a hacer aquello.

Rápidamente tomé varios clavos y los ubique perfectamente en cada una de las llantas del auto de Dorian, de modo que en cuánto él pusiera en marcha al vehículo estas se poncharan, mientras tanto ahora Lucía entretenía a los guardias de seguridad.

Luego de lograr mi cometido caminé con paso firme acercándome a Lucía, alrededor de ella se encontraban los enormes guardaespaldas de Deluxo tratando de brindarle los primeros auxilios.

---¿Qué pasa aquí?
Pregunté a todos fingiendo no saber nada.

---Se ha desmayado estábamos por..

---Ya me siento mejor.
Lucía empezaba a ponerse de pie bajo la mirada confusa de los guardias.

---Chao..
Nos despedimos de los guardias y nos fuimos corriendo.

---Ufff..ahora si nos vamos.

---Arranca!!!
Le grité a la castaña.

************************************

Habían pasado varias horas después de haber llegado al bar Michael y empezaba a sentirme un poco mareada.

---Será mejor que ya nos vayamos, mañana hay que ir a clases.

Lucía vostezo pareciendo que iba a comerme.

---Sí tienes razón..con suerte podré madrugar mañana.

Ambas nos pusimos las chaquetas y nos despedimos de Michael.

Michael era un buen amigo, era dueño de este bar y era nuestro principal proveedor de alcohol además de otras cositas más, que aveces solíamos pedirle que nos consiguiera.

Durante el camino hacia mi casa cantamos todo un álbum de Katy Perry, era mi ídola.

---Hemos llegado...

---Nos vemos perris.

Me despedí de mi amiga y observé la hora antes de entrar a la casa, eran las 2 am.

Silenciosamente hice mi entrada por la parte trasera de la cocina, pero al pasar por la sala principal me sobresalte al ver una sombra, alguien estaba sentado en uno de los muebles.

---¿Quién está ahí?
Pregunté temerosa.

De inmediato una pequeña lámpara fue encendida por aquella persona, dejando entrever su identidad.

---Dorian!!!!me has dado un susto de muerte.
Llevé una de mis manos a mi pecho.

El estar casi en penumbras lo hacía ver aterrador , hasta diría que una vena de su cuello brotaba.

---¿Por qué lo has hecho?
Parecía molesto.

---No se de que me hablas, debo ir a...hacer la tarea hasta maña..

---Se que fuiste tu..quién ponchó las llantas de mi auto.

Tragué saliva con pesadez.

---!!!Vamos!!!tienes varios autos en el garaje, además me estas culpando de algo que no hice.

Exclamé cruzandome de brazos.

---Las cámaras te grabaron, Sofía.

Eso no lo vi venir.

---Me pillaste..
Levanté mis brazos fingiendo rendirme y sonreí.

---Sabes, yo como amigo soy bueno pero como enemigo soy mejor..

¿Me estaba amenazando?

---No te conviene ser mi enemigo.

Lo fulmine con la mirada.

---Eso ya lo veremos.
Pasó por alado mío y me dejó ahí.

¿De cuando acá eramos enemigos?

¿Debía temerle?

Saludos

Besos

Comenten y voten

xoxoxo

La hija de mi sirvientaWhere stories live. Discover now