Capitulo 18. Es ridiculo

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Because my love for is ridiculous
I never knew (who knew?)
That it can be like this
My love for you is ridiculous
My love is R-I-D-I-C-U-L-O-U-S
(R-I-D-I-C-U-L-O-U-S)

It's (ridiculous)
Just (ridiculous)
And I would give my kingdom for just one kiss...

Mal ya estaba harta, eso de jugar a los novios con Ben ya le tenía de muy mal humor; veía con recelo como Evie disfrutaba de todas esas atenciones y mimos que Jay le daba mientras ella forzaba una sonrisa cada que Ben tenía un detalle empalagoso hacia ella.

Realmente no comprendía como Evie podía soportar todas esas atenciones, quizás era porque a diferencia de ella, Evie si era toda una princesa y su madre le había inculcado el siempre recibir bien el afecto de los hombres si podía obtener algo a cambio mientras que a ella le inculcaron el ser temible y mejor que los demás.

Por suerte para ella y el resto de su plan, Ben resulto muy paciente; demasiado en realidad. El joven soportaba su mal genio, a sus rabietas solo daba leves sonrisas e incluso estaba bien de no recibir besos o abrazos por parte de la pelimorada. Eso es amor decía Evie en cada oportunidad que se presentaba de molestar al hada.

La hija de Maléfica detestaba prácticamente todo pero Ben aún así no se rendía; la chica recordaba cuando el heredero al trono le lleno de orquídeas al pasar en su bicicleta aún y cuando todos miraban, o esa otra ocasión en la que el joven pidió a la profesora de arte que elaborara un cuadro que mostrara su amor y está en el tonto taller que tanto amaba lo mostro sin pena mientras Mal maldecía en nombre de su propia madre.

Y así había más detalles que desesperaban a Mal, pero cerraba la boca porque en palabras del Hada Madrina "Después de una gran tormenta de desgracias viene un final feliz" y odiaba admitirlo pero esa regordeta mujer tenía toda la boca llena de razón la mayoría de las veces por lo que tenía la esperanza de que después de sufrir tanto el afecto de Ben pudiera conseguir un felices para siempre para ella y sus hermanos, pero nunca para su madre.

No había gran cosa que decir sobre su madre, solo que era la emperatriz del mal y el ser con más poder si se hablaba de magia oscura; Maléfica era temida por todos... Sobre todo por su única hija.

A los ojos de Maléfica, Mal solo era una pequeña piedra que le hacía tropezar. Cuando era bebé y lloriqueaba la mujer consideraba lanzar al pequeño bulto de lo más alto de la ex-tienda de brujería en la que vivía. Después creció y todo empeoro, gracias a la mala genética humana pedía sin cesar por comida y absoluta atención que Maléfica ciertamente no le daría pues se encontraba inútilmente buscando un medio que le sacase de la prisión en la que le pusieron. Mal creció prácticamente sola, pues todos le temían por ser hija de quien era y por qué en realidad no había amor o compasión en esa Isla, los habitantes solían decir que no tendrían compasión si el rey Adam en un principio no la tuvo hacia ellos.

Mal aprendió varias cosas mientras más crecía, la mayoría eran métodos de supervivencia.

La primera y más importante para ella era "Maléfica siempre tiene la razón" llevarle la contra no era buen plan, y un claro ejemplo era la quemadura en su talón.

La segunda era "Las amistades no existen" lo aprendió a la mala lamentablemente; cuando cierta niña de rizos azules no le invito a su fiesta de cumpleaños... Su madre con enfado desterró a la pequeña junto a su respectiva madre.

La tercera era "No confíes en nadie" por lo regular cuando las personas se comportaban amables o algo por el estilo era porque querían algo, era la marca de un villano.

La cuarta era "Siempre cuida tu espalda y nadie más" Demostrar interés o preocuparse por alguien más solo le haría inservible para su madre, le crearía un punto débil... y no se lo permitiría; creyó estar a salvo de ello mientras estaba encerrada en la Isla... esos villanos le hacían más fácil el no encariñarse.

The PrinceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora