Caputulo 13.

639 48 0
                                    

P.O.V Mario.

Por qué mierda la dejaste irse sola Mario!

Stephanie caminaba de un lado a otro en la habitación sin parar de gritarme. Estaba sentado en el sofá de el departamento de Mauricio con la cabeza explotándome, me sacaron casi cargando de el bar.  Juro qué perdí el conocimiento y no podía recordar nada de el día de hoy.  Mi cabello escurría aún ya que Mauricio me había dado un chapuzón de agua fría para volver a la tierra.  Al parecer ___tn se había ido, teníamos más de dos horas buscándola y no respondía al teléfono.

Me sentía una basura, tanto física como sentimentalmente. No sabía por qué demonios ___tn se había ido. Mi cabeza repetía la misma pregunta una y otra vez. ¿qué rayos le hice o le dije?  O qué podría haber ocurrido para que ella se fuera así como así. Y sin mi.

El teléfono de Stephanie sonó, y juro qué voltee mi cabeza como un completo loco. Me paré de mi lugar hasta un lado de Stephanie, Mauricio hizo lo mismo. Teníamos esa pequeña esperanza de que fuera ___tn. Contesto, y su rostro se tornó pálido después de unos segundos.

-Stephanie... qué ocurre?.- su expresión no decía absolutamente nada pero sus ojos se habían llenado de agua y eso fue suficiente para que mi corazón se acelerara como un loco de miedo.

Ella no respondió.  Artículo un "Gracias" bajito en el teléfono y luego lo colgó.

-U...un auto la arrolló. ____tm está en el hospital... encontraron mi número en su teléfono...-su voz temblaba, y sus ojos derramaban lagrimas, al terminar la oración rompió en llanto de una forma que me hizo estremecer. Mauricio la abrazo.

Mi cabeza dio vueltas, y mis piernas flaquearon. Maldita sea.

-¿En qué hospital está?.-pregunte. Mi voz temblaba.

Stephanie me miró pero no respondio.

-En qué hospital está Stephanie!?.-eleve mi tono de voz y Mauricio se acercó a mi.

-Tranquilízate, Mario.

-Routherfod, hospital Routherfod...-Stephanie hablo.

Tan pronto escuche el nombre tome las llaves de mi auto y corrí hasta afuera sintiendo mis ojos arder por las lágrimas, me subí al auto sin importarme que Mauricio y Stephanie estuvieran gritándome qué parara.

Conduje como un completo loco. Rebasando autos y pasándome semáforos mientras el cielo goteaba.

Deseaba poder teletransportarme a su lado justo en ese momento.

muchas veces, no basta con desear algo.

Why him?-Mario Bautista.Where stories live. Discover now