Capitulo 3.

842 56 0
                                    

POV ___.

Unos minutos después de qué mi trastero tocara el frío asiento el timbre sonó, la maestra amargada con el café en su mano y el cabello alborotado entro junto con los alumnos restantes. No echaba nada de menos las primeras clases de el día, siempre eran las peores. Justo cuando iba a comenzar la clase alguien tocó la puerta llamando la atención de todos en el salón.

La maestra abrió dejando ver a Mario, el sol proveniente de el patio de la escuela destellaba detrás de él haciéndolo brillar como una jodida estrella, nuestras miradas se cruzaron un microsegundo y juro que vi todo en cámara lenta. Fue tan extraño.
Desvíe mi mirada de él rápidamente y la fije en mi cuaderno. El hizo lo mismo, mirando a la maestra.

-Maestra Breackman ¿me permitiría pasar?

-Pase joven Bautista, es el inicio de curso y ya tiene usted un retardo, qué sea la última vez.

Mario entró con una sonrisa apenada y se quedó mirando a todos lados buscando un lugar en donde sentarse.

-¿Qué mira? Siéntese ya.-la maestra lo regañó y el río.

-Lo siento... es qué no sé dónde.-se defendió.

-Por haya, con Mcbrien.

Apreté los dientes con todas mis fuerzas al escuchar mi apellido. Ni siquiera mire qué hizo Mario, solo escuché como se metió entre las bancas para sentarse a mi lado. Pude sentir su mirada en mi pero lo ignore totalmente.

Su perfume invadió mis fosas nasales tan pronto estuvo cerca. Mi corazón seguía latiendo fuerte y mis manos temblando. Cuando lo único que quería era alejarlo a mil kilómetros de mí de nuevo. Solo a mi me pasaban este tipo de cosas. Bendita suerte.

...

La clase llevaba ya rato pero yo simplemente no podía prestar atención. Golpee levemente la goma de mi lápiz en la banca y luego mire de reojo a Mario.

Estaba concentrado o al menos eso parecía. Desvíe mi mirada rápido cuando sentí que iba a voltear y comencé a escribir en mi cuaderno cosas sinsentido fingiendo trabajar. Cuando faltaba un rato más corto para salir la maestra pidió voluntarios para explicar algo rápidamente y Mario no tardó en postularse.

Se paró enfrente junto a la maestra y mientras ella explicaba Mario parecía prestarle mucha atención, Sus cejas estaban ligeramente curveadas y sus labios carnosos apretados. Esa era su cara de concentración, tenía tanto tiempo sin verla. Pude notar que en sus manos seguía usando toda esa joyería que siempre traía consigo, ahora tenía un tatuaje en su brazo derecho, y un arete en forma de cruz colgaba de su oreja izquierda. Ahora parecía más fuerte, como si hubiera estado haciendo ejercicio y su cabello estaba ligeramente más largo que siempre.

 Ahora parecía más fuerte, como si hubiera estado haciendo ejercicio y su cabello estaba ligeramente más largo que siempre

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Deje de mirarlo y me golpee mentalmente por tener mi mirada fijamente en el como una estupida. Gracias a Dios que no lo noto.

Why him?-Mario Bautista.Where stories live. Discover now