11.

4.7K 331 13
                                    

¿Debe seguir doliéndome todo esto?

La verdad es que no Shawn, no debe seguir doliéndome, pero lo hace.

No mereces que siga pensando en ti, mucho menos en ella.

Pero mis pensamientos, en ocasiones, llegan a ser egoístas.

Pareces feliz junto a ella, y te aconsejare que recuerdes un detalle...
También estoy dentro del juego.



Juego un poco con la comida que está frente a mi,  no tengo ni un poco de apetito.

Ha pasado una semana desde lo ocurrido y la verdad, sigo pensando en ello.

Recuerdo la mirada de Shawn cuando salió de casa y me vio abrazando a Zack.

Ese era otro tema, Zack.
El chico sonrisa, como le había apodado, los últimos días ha estado tratando de elevarme los ánimos.

Y lo está logrando.

De hecho, saldremos hoy.

Miro la hora en el reloj que cuelga en la pared, faltan diez para las cuatro de la tarde, pronto estaría Zack viniendo por mi.

Reconozco que las mariposas han estado aleteando todo el día en mi estómago, y que he tomado mucha agua para calmarlas, sin embargo no me ha servido de nada.

Miro extraña a Camy, quien ha entrado a la cocina llorando.

Y soy consiente de que los segundos siguen corriendo, así que me atrevo a hablar.

— ¿Puedo saber la razón? — pregunto haciendo referencia a sus lágrimas.

Ella toma un suspiro, y cuando creo que va a parar vuelve a llorar.

Golpeó mi frente con delicadeza, e insisto con la pregunta.

— Yo... Aquí... Va a crecer — balbucea.

Aunque sus palabras no formaban una oración con sentido completo entendí.

— Estás embarazada —

Su acción fue asentir.

Solté un grito, que juro se escuchó por toda la cuadra. No sería tía por primera vez,  porque estaba Mandy, la pequeña que tenía mi vida completa en sus manos y que veía muy poco.

Hija de Nick, nuestro hermano mayor.

— Sean y yo teníamos muchos planes ___, no podremos ahora. Tengo cuatro meses de embarazo  — susurró

— Pero ve el lado positivo, serás mamá, tendrás un o una bebé de la persona que amas... —

Callé cuando mis ojos se cristalizaron. Un bebé, era algo que nunca iba a pasarme con él, con Shawn.

— Oh, lo siento ___, no quise... —

— Descuida, voy a alistarme, saldré con Zack — informé cambiando de tema.

Reía hasta más no poder, las locuras de Zack eran infinitas. Luego de caminar un buen rato tomados de la mano, decidimos ver juntos una película en el cine.

Todo iba perfecto, de maravillas, hasta que lo vi.

Estaba junto a ella.

Dolía.

— _____... —

Me era imposible apartar la vista de ellos, mientras que Zack chasqueaba sus dedos frente a mi.

— Zack, quiero... —

Mis palabras quedaron en el aire cuando sus labios hicieron contacto con los míos.

Bien pude haberme separado de él, pero no lo hice.

Después de todo no estaba haciendo nada malo, ¿o si?

Sentí su mirada sobre nosotros, y cuando hicimos contacto visual sonreí ampliamente.

SHEOnde histórias criam vida. Descubra agora