Un nuevo amigo

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(Gumball)

Dos semanas después ya teníamos fecha de la boda: sería el 17 de julio, y cada día que pasaba mis nervios iban en aumento, hoy es 13 de junio, falta menos de un mes, Anastasia y Crystal no han dejado de hablar del tema, pues serán mis damas de honor, sus vestidos los escogí rosa pastel, sí, lo sé, me estoy tomando muy en serio esto. Incluso invité al Sr. Perry, mi maestro de Psicología Experimental. Marshall invitó a Marceline, Spencer y a unos chicos llamados Bruce y Clark, yo llamé a Mentita, después de tanto por fin pude hablar con mi nana.
En estos momentos estoy sentado en mi pupitre, al lado de un chico llamado Andreé Shepard, al cual nunca le he hablado en la vida, sus ojos azules son nerviosos, cómo llenos de angustia, siempre me ha dado curiosidad por hablarle, al parecer no tiene amigos, lo cuál me hace sentir muy mal, la Srita. Swanson está explicando las teorías de Freud, Andreé está anotando cosas muy rápido, su cabello rubio cubre su mirada y su tez pálida. Suena el timbre.
—No olviden hacer su tarea, los veo la siguiente semana —dice la profesora. Me levanto del asiento y me acerco a Andreé.
—Hola —le digo en tono amistoso.
—Oh... Ho-ho-hola... —susurra. Sus ojos azules se llenan de miedo.
—Me llamo Gumball —le tiendo una mano amablemente.
—Lo...lo sé, A-Andreé —me susurra.
—Mucho gusto, ¿qué clase te toca?
—T-tengo hora libre, ¿y a ti?
—Igual, ¿te gustaría ir a la cafetería por algo? —sonrío con amabilidad.
—C-claro —noto como sus ojos se llenan de alegría de repente.
—¿Podemos pasar por mi casillero antes? —le digo. Él asiente feliz.
Empezamos a caminar entre el mar de alumnos que van a sus casilleros o respectivas clases, pasamos por dónde están mis amigas, Ana y Crystal me ven sorprendidas, levanto la mano y las saludo, voy a mi casillero y lo abro, él se sorprende al ver todas las fotos que tengo al lado de Marshall y mis primas, pero una foto le llama más la atención: Marshall me está besando en frente de la fuente donde me pidió ser su esposo, las luces y los chorros salieron justo en ese momento dando una mejor imagen.
—¿Q-quién es él? —susurra.
—Mi prometido —sonrío con ternura.
—Vaya...parece que no les da miedo demostrar sus sentimientos —susurra y yo sonrío al mismo tiempo.
—No, él me enseñó a ser fuerte, tenemos una gran historia —tomo mis libros y cierro el casillero.
—¿De verdad? Quiero saberla —susurró con ternura.
—Pues, vamos a la cafetería y con gusto te puedo contar.
—Seguro, sí —asiente y empezamos nuestro camino a la cafetería. Andreé compra una hamburguesa.
—¿Quieres algo? —me pregunta.
—¿Qué? No, gracias —digo sonriendo.
—Gumball, eres mi primer amigo, de verdad quiero invitarte algo para comer o al menos para tomar —dice. Sus ojos llenos de ilusión y alegría me hacen sentir felicidad, sus mejillas regordetas lo hacen lucir más pequeño y una imagen de un mini Marshall pidiéndome un dulce me pasa por la mente. Pero cuatro palabras cruzan mi mente: eres mi primer amigo; un nudo en el estómago se me forma, por lo que le sonrío dulcemente y le digo:
—Está bien, Andy, te acepto una soda italiana de frambuesa—le digo sonriendo.
—¿A-Andy? —sus mejillas se ponen rojas.
—Sí, es tu apodo, cómo mi amigo te diré así —le digo con ternura.
—V-Voy por la comida —dice y se aleja, yo voy a una mesa que está en la terraza. Se puede ver toda la escuela, y entonces veo a un rubio que llama mi atención: Finn; entonces, una silueta se sienta en frente de mí, Andreé ha llegado con la comida.
—¿Dos hamburguesas? ¿Comes mucho? —le digo sorprendido.
—De hecho, una es para ti.
—Espera, ¿qué? —digo abriendo los ojos.
—La otra hamburguesa es para ti.
—Pero, yo no te pedí hamburguesa.
—No te preocupes, va por cuenta de la casa —me guiña un ojo.
—Gracias —le digo sonriendo.
—¿Cómo se llama tu prometido?
—Marshall —le digo con una sonrisa.
—¿Me contarás su historia? —sus ojos azules se llenan de ilusión, cómo si de un niño pequeño se tratase.
Sonrío y empiezo a contarle la historia, con cada palabra que decía él se emocionaba​ cada vez más. Al finalizar él me miró sonriendo.
—¿Qué Andreé? —le digo en tono nervioso.
—Solo me parece una historia linda y tierna.
—Pues gracias, realmente pasamos por mucho.
—Y aún así siguieron juntos, su amor de verdad es muy fuerte.
—Lo sé, nunca había sentido esto por alguien, y estoy seguro de que no lo sentiré por nadie más.
—Vaya, quisiera enamorarme algún día.
—¿Qué? ¿No hay alguna chica que te interese? —le digo en tono maternal.
—Pues...no me gustan las chicas.
Siento como se me atora la hamburguesa, pero disimulo que todo está bien.
—Vaya, pues en ese caso, ¿no hay algún chico que te guste?
—Sí, lo hay, p-pe-pero...
—Pero... —susurro.
—Pero no estoy seguro de lo que él piensa de mí.
—¿Lo conozco?
—No lo sé, es nuevo en la escuela. Es rubio, tiene ojos azules, siempre lleva una gorra blanca con orejas de conejo, me gusta mucho.
Y en ese momento mi mente hace "click".
—¿Te gusta Finn?
—¿L-Lo conoces?
—Por supuesto, él y yo somos amigos.
—¿E-En serio?
—Si tú gustas, puedo ayudarte con él.
—¿Q-Qué? N-No, de ninguna manera.
—¿Por qué? Es un buen chico.
—Sí, pero él no me conoce.
—Mira, si no le hablas, nunca sabrás lo que opina de ti.
—¿Tú crees?
—Por supuesto, ya sabes lo que dicen, el que no arriesga...
—No gana... —dice en un susurro.

Notas:
Bueno, este nuevo personaje me resulta demasiado tierno haha lo amo, al fin Finn tendrá una oportunidad en el amors.
Otra cosa, ya casi llega el fin, pero tranquilos, ya estoy planeando más historias, ya sea de esta pareja o de otras ficticias, ya veré qué tengo en mi cuaderno de ideas. ❤

Freedom Is Not Real [Yaoi/Gay] [Gumshall]Onde as histórias ganham vida. Descobre agora