Capítulo 37

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Me bajé del coche y lo primero que hice fue coger a Jackson del asiento trasero y caminar hacia la casa con mi hijo entre mis brazos. Al llegar a la puerta giré el picaporte pero la puerta estaba cerrada, lo que significaba que Joe no estaba aquí. Aun así decidí quedarme a pasar la noche ya que no quería volver al apartamento con Nessie y Jacob. Después de dejar a Jackson en el parque de juguetes que teníamos instalado en el salón, cogí las bolsas y las metí en casa. Cuando comencé a sacar la ropa que había traído y la comida que había preparado, mi móvil sonó en el salón y salí corriendo hacia el sonido. Deseando que fuese Joe quien llamaba, cuando vi que era Alice me desanimé y estuve a punto de no cogerle el teléfono, pero decidí responder solo para dejar claro que estaba bien.

-¿Sí?-pregunté sin ánimo.

-¿Kate? ¿Estás bien?

Me dejé caer al sofá mientras observaba a Jackson jugar con sus juguetes.

-Supongo.-dije apoyando la cabeza en el sofá.- ¿No quieres saber dónde estoy?

-Ya sé dónde estás porque lo he visto.-dijo ella como si fuera obvio.-He visto todo.

-Ah.

No quería hablar con ella del tema, más que nada porque sabía que se pondría de parte de Nessie. En el fondo, eran familia.

-Quiero comprobar que estás bien, si necesitas que vaya para allá para que podamos hablarlo...

-En realidad, Alice... No me apetece hablar con nadie. Lo único que quiero es ver a Joe. Comprobar que está bien. Si tienes alguna información sobre donde está o algo...

-Joe está bien.-dijo Alice.-Volverá a ti pronto, no te preocupes. Pero, ¿tú no quieres hablarme de nada en concreto?

-Yo... no...

No había pensado en ello, pero lo que había pasado en la cocina del apartamento no había sido normal. ¿Un humano que sea capaz de tener ese... don... de esa forma tan descarada? Antes había practicado con Edward sobre dones que había visto y con los vampiros que había tenido contacto, pero nunca me había pasado lo de perder el control y que hiciese algo sin querer. ¿Era normal?

-Si no me dices nada, en vez de decírselo a Edward mañana por la mañana, se lo diré ahora mismo.-dijo Alice, seria.- ¿Sabes que casi me he tenido que ir a otro estado para poder hablar contigo por teléfono para que Edward no me lea el pensamiento? Así que comienza a hablar porque ya sabes cómo es el pesado de mi hermano con estos temas, no te dejará descansar hasta que consiga averiguar que pasa por esa cabeza tan extraña y tan fascinante que tienes...

-Vale, vale.-dije cortándola.-Lo he pillado, Alice.

Casi podía oírla sonreír al otro lado del teléfono.

-Mira, solo sé que Nessie me ha cabreado y me estaba agobiando, y cuando he gritado... todo ha salido volando hacia todos los lados. Ha habido un momento que me he asustado, pero luego he recordado lo que han hecho Nessie y, sobre todo, Jacob, y he centrado mi atención en pirarme de allí.

Esperé a que Alice me contestase, pero solo había silencio al otro lado del teléfono.

-¿Alice?

Silencio. Hasta que alguien le cogió el teléfono a Alice.

-Kate, soy Jasper. Está teniendo una visión.

Eso me respondió, así que esperé a que Jasper me pasase de nuevo a Alice, pero lo que me contestó me dejó sorprendida.

-Ahora nos vemos.

Y colgó. Yo miré la pantalla del teléfono y comprobé que sí, me había colgado.

Nueva entre los CullenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora