III - Miedo al vinil

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Nunca tuve tanto miedo, bueno... sí, muchas ocasiones, pero ésta era diferente, ahora no sabía a qué temer, ¿a mi vecino el extraño Orson a quien nunca vi pero que vivía en esa casa desde antes de mi nacimiento?, ¿a mi papá que lo conoce y que es su amigo?, ¿a que voy en auto a un lugar lejos de Bayber View?, ¿a qué debo temer?

Íbamos en el auto de mi papá, uno de esos autos que siempre vemos en las películas que no son animadas, ni divertidas, viajábamos a una velocidad moderada, pero lo suficientemente rápido para que no pudiera recordar el camino, esa era mi estrategia: en cuanto viera algo extraño, saldría corriendo y regresaría a casa, donde mi mamá me protegería con su vida. Mi padre me había traicionado y debía salvarme como fuera, sin miedo a las consecuencias maritales que pudieran tener ellos dos.

De un momento a otro dimos una vuelta extraña, el camino ya era más rápido, pensé que el auto empezaría a volar,  pero no, sólo se movía más velozmente sobre el asfalto. Ya no había nada, sólo árboles, vacas, rejas de metal descuidadas y montañas, era la carretera, ahora ya no tenía ninguna referencia, estaba perdido. Mi perdición había comenzado, mi padre me llevaba con mi desconocido vecino a quién sabe dónde, no podría tener más miedo.

Inmediatamente empecé a recordar mis pesadillas, muchas comenzaban con preguntas, y si mal no recuerdo este viaje comenzó con Orson preguntándome si quería acompañarlos. Eso debía ser, todo esto es una trampa, Orson seguramente le lavo el cerebro a mi papá para que me secuestrara, ahora me llevarán a una casa abandonada y después me enviarán con una familia que no habla inglés*, seré infeliz toda mi vida y moriré solo y viejo en otro país, uno horrible. Debía detenerlos, pero la puerta de mi lado tiene ese seguro de niños, mi papá es demasiado cuidadoso conmigo cuando se trata del auto, pero algo debía hacer, debía escapar.

- Ray, hijo, ¿quieres que ponga una estación?, te escucho muy callado allá atrás, me decía mi papá sin dejar de ver el camino

- No papá, estoy bien, le contesté de manera rápida y concreta

- ¿Yo puedo poner una estación?, dijo Orson con un tono alegre, aunque parecía que se burlaba de mí y mi respuesta

- ¡Pero claro Orson, pon la que quieras!, fue lo que mi papá le gritó a su "amigo"

Orson pasó por todas las estaciones hasta que encontró una que me pareció de lo más peculiar, era una música muy estridente, muy violenta en su tonalidad, no entendía nada de lo que decía, sólo gritaban, hoy sé que se llama "Metal". ¿Quieren saber algo?, sigue sin gustarme el metal, prefiero la música country.

El viaje me parecía eterno, mientras yo intentaba bajar la ventanilla poco a poco para saltar y escapar del auto, pero el ruido del viento hacía casi imposible que no se escuchara. Quizás debí pedir que subieran el volumen de esa horrible canción, eso hubiera ayudado, ¿por qué era tan lento?, ¡por eso se me pasa lo mejor de la vida!

Después de mucho mover mi pequeña mano sobre la manija de la ventanilla, tenía el tamaño apropiado, según mis cálculos, para escapar, sólo debía quitarme el cinturón de seguridad y saltar. Me desabroché y estaba en posición, cuando de repente mi papá frenó y caí de golpe en el espacio entre el asiento de Orson y el mío, me dolió mucho el golpe. Fue muy notorio, pues lo primero que escuché fue a Orson preguntándome si me encontraba bien.

Al salir del auto, gire 360° hasta que tope con varios edificios y uno un poco más pequeño, el cual tenía un gran letrero en neón que decía "Old Joseph B.", en ese momento pensé que iríamos a un lugar mucho peor, pero entonces sentí la mano de mi padre en mi hombro, tomó aire y dijo: "Hijo, bienvenido a mi pasatiempo favorito, espero pueda convertirse en el tuyo"

No entendía nada, entonces pregunté pensando en que todo pudo haber sido un error mío: "¿Qué lugar es este papá?", a lo que el se arrodilló, me miro a los ojos y me contestó: 

- Esto es un boliche, te traje para que conozcas el deporte favorito de tu papá, sonrió durante todo el discurso

- ¿Y Orson?, pregunté con una voz muy baja

- Ah, Orson es amigo mío, él me ha acompañado a jugar boliche durante estos meses

- ¿Es tu amigo papá?

- ¡Claro, él ha sido nuestro vecino desde hace años!

- ¿Y juegan boliche?

- Sí, por eso te traje, para que pudiéramos jugar todos juntos, seguía sonriendo

- Genial, dije con una ligera sonrisa

Respiré profundamente y me dije a mi mismo: "Le debo una disculpa a Orson"


*: Normalmente caigo en este dilema, yo escribo en español a un personaje que vive en un "Estados Unidos", por lo que él habla inglés, pero, ¿es correcto poner "inglés" cuando la historia se escribe en español?, ¿qué piensan ustedes?

Orson, soy OrsonWhere stories live. Discover now