Me miro al espejo por última vez, simplemente me encanta como me veo, el vestido de satén queda perfecto en mi cuerpo, el color es precioso y parece que tiene un ligero brillo cuando se pone contra luz. Mi cabello está recogido en un molote con algunos cabellos sueltos, las sombras de mis ojos son de un dorado hermoso, mis labios rojos se ven sensuales y bonitos
- Ya es hora de irnos-
Tessa se ve tan divina como siempre, eses vestido se le ve espectacular, parece que se lo hicieron a la medida
Subimos al auto, en todo el camino Tessa me platicó sobre todo lo que había hecho en estos meses, al parecer sigue soltera, es muy buena en la carrera que ha escogido, aunque dice que está a punto de dejarla para seguir sus sueños que es la moda, pero que no le gustaría tomar una decisión apresurada de la que se pueda arrepentir, así que se dará estas vacaciones para meditarlo
- ¿Y cómo has estado tú? ¿Cómo tomaste todo lo que pasó en el hospital? - Con Tess a mi lado me siento con mucha más confianza porque ella estuvo en todo mi proceso
- Sinceramente me lo he tomado bien, después de llegar a Seattle y alejarme de Dan estuve yendo a terapia, me ha ayudado bastante en procesar todo, yo me sentía tan enojada, culpable y con una enorme tristeza, pero conforme pasó el tiempo y estuve yendo a mi sesiones me hizo sentirme mucho más tranquila, después entré a la escuela en línea y comencé de nuevo con el ejercicio, busque distractores que me mejoraban la vida, todo ha sido un muy largo proceso, aún no estoy cien por ciento sanada, pero ya llevo un gran avance- Tessa tomó mi mano
- Estoy bastante feliz por ti, en serio, no me imagino lo doloroso que debió de ser todo esto. Estoy muy orgullosa de ambos -
El auto se estacionó en un enorme edificio, un nudo se hizo en mi estómago, tomo una buena bocanada de aire y salgo del auto.
Tessa y yo pasamos al edificio sin problema, parece que aquí todo mundo ya la conoce. Subimos por el elevador al piso 21, creo que jamás había estado tanto tiempo en un elevador y eso me aterra demasiado, son muchísimos pisos, varias ideas de cómo puedo morir en un elevador llegaron a mi cabeza hasta que las puertas se abrieron
Teresa y yo salimos de ese monstruo de metal, ella me guiaba mientras yo le pisaba los talones, ella paró en seco y ahí pude ver a Daniel.
Se veía impecable con su traje negro y su corbata lila, hablaba con unos señores ya mayores, él se gira hacia nosotras y su rostro no pudo evitar mostrar la sorpresa, se disculpó con las personas con las que hablaba y se dirigió a nosotras, más bien, a mi
- Kate, ¿qué haces aquí? - También me alegra verte
- Que Tessa te lo diga- Ambos la miramos, ella sonrió como una niña pequeña
- Se ven divinos junto, ya vieron que combinan tu corbata y su vestido, luce...-
- Teresa- Dan se veía un poco molesto
- Pues has estado como un maldito zombi desde que viste a Kate, yo solo quería ayudar con tu tristeza-
- Teresa, voy a cumplir pronto 24 años, ya estoy grande, no necesito tu ayuda, sé solucionar mis problemas- Esto es incómodo
- Pues no parece, porque durante todo este tiempo te he visto llorar por Kat...-
- Katherine, que sorpresa verte por aquí-
En ese momento los padres de Daniel interrumpieron su acalorada discusión, su padre tenía una cara de total confusión mientras su madre me sonreía con mucho gusto.
