NOTA: EN ESTOS MOMENTOS ESTOY EDITANDO LA HISTORIA DE DANGER (De nuevo, ya que la historia aún tiene muchos errores que se van a corregir).
ESTOY CORRIGIENDO FALTAS DE ORTOGRAFÍA Y EN ALGUNOS CAPÍTULOS HAGO ALGUNOS CAMBIOS QUE YO CONSIDERO QUE LE QUEDAN MEJOR A ESTA HISTORIA (Sobre todo en este capítulo, es por eso que les pongo está nota), ASÍ QUE SI VEN QUE UNAS COSAS NO COINCIDEN CON OTRAS QUE ESTÁN EN CAPÍTULOS SIGUIENTES, ES PORQUE AÚN ESTOY EDITANDO.
Pd: Ignoren los " corregidos y editado" de hasta abajo, eso fue de la primera vez y aún hay cosas que corregir
Han pasado dos meses desde que vi por última vez a Daniel, en estos momentos estoy esperando en la sala de mi casa vestida con un vestido azul hasta la rodilla y unos zapatos negros, poco maquillaje y cabello suelto, espero a que mi ahora novio llegue.
Quedamos de ir a cenar a las 9:00pm porque a esa hora sale de entrenar, apenas son las 7.30pm, pero estaba tan aburrida en casa que me alisté antes de lo esperado
Después de verlo que vi me di cuenta que Daniel era solo problemas, por lo cual empecé una relación con el chico que quise desde un principio, Luke.
Mi madre para variar está a las afueras de la cuidad, con su novio, nuestra relación a mejorado solo un poco.
El rechinon de llantas de un auto sonó a fuera de mi casa, para después tocar mi puerta, supuse que era Luke y que había salido antes, pero me equivoqué.
- ¿Y tú qué crees que haces aquí? - Daniel levanto las manos en acción de disculpas, trato de abrazarme, pero inmediatamente lo empuje
- Apúrate, mí novio está por llegar- rodé los ojos
- Al final el rubio Imbecil se quedó contigo eh- le di un manotazo en su brazo
- El imbécil eres tú- el tardó en recuperar el aire
- Bien, admito que me lo merecía- Te mereces mucho más que eso
- Rápido-
- Me dejas pasar- me crucé de brazos y fruncí el ceño
- No- el sonrío de lado, típico de el
- Lo tomaré como un sí- y en ese momento me tomó por la cadera y me cargo, cerró la puerta de una patada y le colocó seguro, me bajó en el sillón, caí de un sentón lo que hizo que me doliera el trasero
- Sal de mi casa, AHORA- Otra vez lo mismo, está es una de las muchas razones por las que ya no quiero estar con el
- Necesito hablar contigo- me acerqué más a él
- Pues yo no- el rodó los ojos
- Escucha, trate de hablar contigo, te mande cientos de textos y no me contestaste, es más creo que me bloqueaste- sonreí
- No lo creas, porque de hecho te bloque- su semblante cambio
- Pero, ¿por qué? -
- Me enfada que mi celular este vibrando todo el tiempo- mire mis uñas recién pintadas de un color tinto
- Lamento que hayas visto eso- me hice tonta
- ¿De qué hablas? - el suspiro
- Me viste tener sexo con esa pelirroja, lo sé- sentí una punzada en mi corazón al recordar aquella escena
- Ya lo superé, por favor eres Daniel Hawking, espero todo de ti- camine hasta la cocina donde tome un vaso con limonada rosa – Que esperabas, que llorará hasta quedar dormida, pues no es así- Bebí de mi vaso- El verte de esa manera me hizo darme cuenta de todo lo que había perdido por ti, mi dignidad, mi estabilidad y mi orgullo. ¿Tú crees que iba a querer estar contigo después de ver como eras en realidad? - negué con la cabeza- Pues no es así, eso me hizo darme cuenta que solamente te quiero lejos de mí- Mis palabras fueron duras
