Danger

Pequeña Hawking

- Vaya manera de recibirme, yo también estoy bien, Katherine – Se levantó de su asiento-Gracias por preguntar-

- Lamento mi reacción, solo no esperaba verte- Ella me sonrió

Tessa iba tan impecable como siempre, lleva un vestido suelto color amarillo junto con unas bonitas sandalias blancas, su cabello está sujetado en una coleta alta y lleva un ligero maquillaje que la hace ver natural y hermosa

- Últimamente no esperas verme, los Hawking te hemos tomado por sorpresa- Trato de sonreír

- Y vaya que si- Doy un largo suspiro- ¿En qué puedo ayudarte? - Teresa se puso más cerca de mi

- Me encantaría que esta platica fuera más amena, pero si te soy sincera no tengo tiempo- Me toma con delicadeza de la mano y comienza a caminar junto conmigo a la salida

- ¿Qué haces? ¿A dónde vamos? - Ella para en seco

- No sé qué le has hecho a mi hermano, solo sé que hoy tenemos una cena importantísima con mis padres y socios y Daniel está como un maldito robot desde que llego de estar contigo ayer- Me suelto de su agarre

- ¿Y yo que tengo que ver en eso? -

- TODO, KATHERINE- Alzó la voz- No sé qué hiciste, pero lo vas a solucionar- Jamás la había visto tan molesta, ya no hay una dulce Tessa

- Yo no puedo hacer nada, no es mi culpa- Explotó

- SI ES TU CULPA, DANIEL ESTABA MUY BIEN HASTA QUE TE VIO A TI Y TUS BONITAS PIERNAS, DESDE AYER ESTÁ COMO UN ZOMBIE, NO SÉ QUE LE HICISTE O DIJISTE, PERO TE PROHIBO QUE LO VUELVAS A LASTIMAR Y AHORA VAS A SOLUCIONAR TODA ESTA MIERDA- Eso sí que no

- ¿TÚ CREES QUE A MI NO ME AFECTA? ESTUVE CASI UN MALDITO AÑO HACIENDO MI VIDA DE NUEVO, PARA QUE DESPUÉS LLEGUE TU HERMANITO Y SE PORTE COMO UN CABALLERO Y DESPUÉS QUÉ, SE LARGUE Y ME DEJE LLENA DE DUDAS, EL FUE EL QUE HIZO TODO, YO NO –

Ambas estábamos gritándonos, jamás me había portado así con Tessa, siempre fuimos como mejores amigas y ahora parece que nos odiáramos a muerte

- Solo hay una manera de solucionarlo- Sacó su celular y tecleo varias cosas

- No lo voy a llamar-

- Por supuesto que no lo vas a llamar – pulsó un último botón – Tu vendrás conmigo a la cena-

- Debes estar loca, como vas a apagar el fuego con más fuego- Voltee los ojos- Entiende Tessa, Daniel no me quiere ver, apenas y me habló ayer-

- Él está confundido, claro que quiere verte solo que es tan idiota que no puede demostrarlo-

- ¿Y yo tengo que demostrarlo? Eso no es justo- Me apuntó

- Sabes que no es justo- Me mira con furia- Que por su maldito orgullo y miedo no puedan solucionar esto y se ahoguen en un puto vaso de agua, eso no es justo-

- No es verdad-

- Ay por favor, harta me tienen con su maldita novela dramática- Volvió a tomar mi brazo- Ahora deja de hacerte del rogar y ven conmigo que mi chofer nos está esperando-

Antes de decir algo más me comenzó a jalar hacia la limosina, estoy cansada de la incertidumbre, después de la cena hablaré con Daniel, quiero saber que ha sido de él y si aún siente algo por mí.

Subimos al auto, me di cuenta que dentro había dos hermosos vestidos de gala, junto con un par de cajas de zapatos.

- El rosa es el mío y el lila el tuyo, ya es hora que vayas dejando el negro a un lado, ya pasó de moda-

- ¿Disculpa? - Ella rodó los ojos

- Vamos Kate, desde que te conozco siempre que sales a alguna fiesta vas de negro, ¿a dónde vas? ¿A un funeral?, es hora de que cambies tu manera de vestir y busques más colores, no lo tomes personal, es solo un consejo-

- ¿Acaso eres una experta en moda? - Ella se pone gloss en los labios

- Podré estudiar medicina, pero soy lo más cercano que tienes a una experta en modas- Guardó su gloss en su bolso- Iremos a un salón de belleza cerca de aquí, te maquillarán, te vestirán y después de mucho tiempo te acomodaran esa ceja que parece cola de ardilla- En vez de ofenderme me hizo reír con unas cuantas carcajadas

- Yo veo bien mis cejas, creo que estás en un error, son perfectas-

- Y yo creo que necesitas gafas-