021. Bad Birthday

3.8K 217 58
                                    

ACTUALIZACIÓN 23.09.2018


Solo les digo... NO me odien ):    & lean hasta el final.

...



El día que más había intentado retrasar, había llegado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El día que más había intentado retrasar, había llegado. Era absurdo tapar el sol con un dedo, y eso Cristie lo sabía perfectamente.

La resplandeciente masa de calor se comenzaba asomar por el Noroeste, iluminando poco a poco la ciudad. Las pocas nubes que quedaban de la noche anterior se alejaban rápidamente, tal como la sonrisa que se había formado en sus carnosos labios al recordar lo feliz que era su familia antes de la partida de Samuel.

—Paciencia —murmuró la rubia cerrando los ojos mientras se alejaba de la ventana por la cual miraba los modernos edificios, acostumbrados a observar diariamente.

Paciencia era la palabra que se estuvo repitiendo constantemente durante toda la noche al tratar de conciliar el sueño. Hoy sería el último día que debía soportar para volver junto a su madre. Anhelaba tanto poder abrazarla cálidamente y desahogarse en sus brazos, pero también sabía el vacío que se llevaría con ella.

Salió prontamente de sus pensamientos, al oír como la puerta a su espalda se abría cautelosamente. Una cabellera rubia hacía presencia ante sus ojos azules, y se cruzó con los inigualables de su ex parabatai.

—Feliz cumpleaños, C —dijo él con una gran sonrisa esbozada de sus labios. Entró por completo a la habitación, evidenciando una pequeña caja en su mano derecha, muy similar a la que había utilizado hace tres años atrás.

—Eso es... —inquirió Cristie, mirando fijamente la caja— ¿lo que pienso que es?

—¿Esto? —Jace señaló la caja con la que sus dedos jugaban, y sonrió ladinamente. —Tal vez —dijo coquetamente—, pero ahora será diferente.

—¿Diferente? —la rubia entrecerró los ojos, casi fulminándolo con la mirada. —Al grano, Jonathan.

Sabía que era una de las tantas bromas de su mejor amigo.

—Ábrelo y sal de dudas.

Evans dudó un par de segundos, hasta que cogió la caja que Jace extendía en su gran mano. Era de color amarillo, con una gran rosa de un tono más pálido.

—No es una bomba, ¿verdad? —preguntó antes de querer abrirla.

—¿Qué? —frunció el ceño. —¿Crees que si tuviera la posibilidad de poner una micro-bomba en esa caja no habría asesinado a todos los demonios de nuestro mundo? —cruzó miradas con su mejor amiga, que estaba más confundida que al principio. —Solo... ábrelo, ¿sí?

—De acuerdo.

Cristie tomó una gran bocanada de aire, para no demostrar sorpresa. Había jurado decir y ordenar —obligar prácticamente— que no quería recibir regalos en su cumpleaños, puesto que eso sería como si celebrara un día inolvidable para ella.

» Parabatai ➰ | Alec Lightwood |; Shadowhunters [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora