Capítulo 11. Agrios celos, Muros de Sal y Estrellas de Azúcar

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—AAAAAAAAHHHHHHHHHHH —fue el grito que se escuchó hasta lo más recóndito del bosque.

Ya había amanecido en la región de Kalos y nuestros héroes despertaban tranquilamente, claro hasta que Dawn se encontró con la escena de Ash y Serena durmiendo abrazados... Korrina y Bonnie habían despertado antes y luego levantaron a Clemont para que observara la escena y ninguno quería despertarlos... Esos 2 se notaban que se querían... Pero siempre hay un mal tercio en las buenas historias de amor, y el de esta terminó despertando y lanzando un desgarrador grito que terminó por levantar a la pareja.

— ¿Dawn, porque gritas? —pregunto un Ash aún adormilado, que no notaba la situación en la que estaba.

— ¡¿Qué no ves la situación en la que estás?!

—Que ruidosa —dijo una Serena medio dormida acomodándose mejor en Ash —Cállate y déjame dormir un poquito más... —el al fin se había dado cuenta de la situación, pero se quedó ensimismado en Serena durmiendo junto a él, por lo que no dijo nada...

— ¡LEVÁNTENSE! —grito furiosa Dawn, ya sabía que ellos eran cercanos pero no que tanto... Y eso la molestaba de sobre manera.

Luego de levantarse, los chicos recogieron las tiendas y se disponían a desayunar, pero cuando se estaban sentando Dawn sentó junto a Ash, ósea, el lugar de Serena...

— ¿Eh? Perdona Dawn, ese es mi sitio —dijo ocultando su molestia.

—Ah, espero no te moleste, pero me gustaría sentarme aquí, no te importa verdad ¿Ash?

—Eh... —En lo que a Ash respecta, él quería estar junto a Serena, ya era su rutina, pero era Dawn quien se lo pedía, por un día no estaba mal ¿Verdad? —Yo creo que no... —viendo a Serena como si le pidiera permiso, la chica resignada asintió y se sentó entre Bonnie y Korrina.

Luego de la comida los chicos volvieron a caminar, Ash iba entre Dawn y Serena, y de no ser por Bonnie, Clemont y Korrina que sacaban temas de conversación el viaje habría estado en un silencio incómodo. Serena y Dawn evitaban en lo posible hablar con la otra y cuando lo hacían era de manera rápida y cortante, eso hacía que la conversación se estancara a cada rato, parecía que el viaje seria así por mucho tiempo, pero gracias a Arceus, terminaron llegando a un prado que tenía un lago...

—Qué lindo —dijo Bonnie con brillos en los ojos.

— ¿Les parece si tomamos un descanso aquí? —pregunto Ash, el veía a Dawn y Serena muy molestas y pensó en aligerar un poco el ambiente.

—Claro —respondieron Clemont y Korrina empezando a correr detrás de Bonnie que había corrido apenas Ash propuso la idea.

—Bien... —dijeron Serena y Dawn.

—Vamos a nadar un poco...—dijo Ash empezando a caminar, pero al darse la vuelta no vio como las chicas se lanzaron una mirada desafiante entre sí.

—Sera...—empezó Dawn.

—Divertido...—dijo Serena y las 2 empezaron a caminar.

Bonnie y los chicos ya estaban en el agua, solo faltaban las mayores.

—Se tardan demasiado —dijo Bonnie viendo hacia donde ella se había cambiado.

—Espero no les haya pasado nada —hablo Clemont.

—HEY —escucharon gritar para ver llegar a Korrina vistiendo un bikini, solo que la parte inferior era acompañada de un pantalón de mezclilla y su cabello ahora estaba atado en una trenza, sobra decir que Clemont se ruborizó por completo y dio gracias por estar dentro del agua —Ya vienen las otras 2, es que estaban un poco ocupadas con algunas cosas.

Algo Verdaderamente DulceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora