[The Walking Dead] "Mi Robín Hood" (Daryl Dixon Y Tu)

°Capítulo 53°

Narra Mateo:

Suspire mientras comienzo a patear la puerta delante de mi, aún no he podido derribarla pero cuanto desearía. Hace media hora recibí la noticia por parte de mi padre, ese mal nacido, que nos llevará lo más lejos posible. Lo cual, no es deseado por parte de mi hermana y mío. Yo tengo mi familia en esa prisión y ella también, sólo que él no entiende eso.

___ esta en el suelo a unos metros de mi, desmayada, ya que recibió un duro golpe por parte del hombre que dice ser nuestro padre. Realmente no entiendo que gana con hacernos todo esto, nosotros ya no somos las personas que fuimos en algún momento. Ahora somos las personas que jamás creímos o tal vez si, pero no queríamos verlo.

Me da mucho enojo todo esto, yo no le deseo un mal a mi hermana, pero desde que estoy junto ella me a dado tanta mala suerte que me sorprende. Aunque no deseo perderla, no nuevente.

-¡Ah! -Grite con enojo mientras siento caer mis lágrimas, estoy tan cansado que sólo deseo una siesta y despertar de todo mal que estoy pasando. Aunque se supone que soy realmente fuerte...Pero Es una apariencia. -¿Porque...? -Susurré para mi mismo.

Estoy enojado, eso es obvio. Pero no puedo estar llorando por todo cuando mi hermana es la que me necesita. Ella necesita salir de aquí y volver con su hijo y su estúpido novio.

Hice unos pequeños pasos hacía atrás para luego patear con fuerza la puerta, dejando que esta se quiebre y dejándonos en total libertad.

Me encanta saber que mi padre esta fuera de esta casa, cazando.

¿Lo malo? Tengo mis manos atadas.

-___. -La llame mientras me pongo de rodillas frente a ella, intentando que esta, se despierte. Pero es totalmente inútil. Suspire. -Por favor, hermana...Necesito que depiertes.

Pero es inútil, ella no me escucha...Mordí mi labio para no gritar y me levante, para salir de lo que parece el sótano. Comencé a caminar por el pequeño pasillo hasta llegar al living, aquí creo que podré encontrar algo que pueda ser de ayuda.

Mire hacia todos lados, mirando sólo sillones, un televisor que no funciona y una mesita ratonera frente a este. Al voltearme puedo identificar lo que es, la cocina. Corro hasta esta y comienzo a revisar cada cajón que esta a mi disponibilidad.

-¡Si! -Grite al ver un cuchillo un tanto afilado, lo tomó como puedo, ya que mis manos están atadas en mi espalda. Cuando por fin logró tomarlo, comienzo a intentar cortar la cuerda...

Es cuando siento un gruñido, el hijo de perra a dejado la puerta trasera abierta. Que esta justo en la cocina, que coincidencia...

Entonces se me da la idea de pasar mis manos por debajo de mis pies, así dejando mis manos ya delante para poder tomar el cuchillo. El caminante termina por verme, esta tan cerca que da miedo. Comienzo a votar la cuerda, pero el cuchillo no es lo suficientemente afilado. El caminante esta a sólo pasos cuando por fin, corto aquella dichosa cuerda. Entonces tomó los hombro a del caminante intentando alejarlo, logró empujarlo un tanto lejos de mi.

Pateo su rostro haciendo que termine en el suelo, se que el cuchillo que tengo en mano no ayudará. Ya que cuando se lo clavo no es suficientemente grande para rematarlo. Me hago hacia atrás, intentando encontrar alguna cosa que sea de ayuda, pero no hay nada más que, sartenes, una cocina, un calentador y un maldito aparador que no termine por revisar.

Miro al caminante que acaba de levantarse, suspiro y comienzo a correr fuera de la cocina. Entonces recuerdo la puerta que se partió, sonrió al ver un trozo grande de madera. Lo tome con total rapidez, ya que siento los gruñidos del caminante cada vez más cerca. Al voltearme puedo ver al caminante, termino por enterrarle aquel trozo de madera en la cabeza haciendo que este hijo de puta termine más muerto de lo que ya estaba.

Mis pies terminan por debilitarse y caigo al suelo totalmente derrotado. Sostengo mi cabello mientras comienzo a sollozar, solo quiero que todo acabe. Ya no soy un niño, ya no soy alguien a quien puedan hacer lo que hoy le están haciendo.

Miró hacia mi derecha donde tengo la entrada al sótano y me levanto con lentitud, al bajar las escaleras veo a mi hermanita peor que yo, ella es a la que más disfruta golpear ese maldito, mal nacido. Nos hemos movido de lugar tantas veces en tan solo un ¿Mes? que a debilitado a ___. Decidí tomarla, pero para cuando deseo hacerlo escucho la voz del mal nacido. 

Entonces miro a mi hermana y la puerta que da a mi libertad. 

Si yo me quedo aquí, jamás nos encontrarán, si yo me voy...Podría regresar a la prisión y pedir ayuda. Pero tendría que ser para lo más rápido posible o él podría matarla, o peor, llevársela.

-Lo siento hermanita. -Susurró cerca de su oído y entonces lo hago, me levanto y comienzo a correr hasta la salida, que esta pasando el pasillo.  Siento los gritos del desgraciado pero yo termine saltando por la ventana, escapando de él pero dejando mi único tesoro sola, una vez más.

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¡Hola! Lamento haber tardado tanto :'v pero estuve media ocupada últimamente, además que hay varios episodios de esta historia que no me gustan y desearía re modificar, en fin. Espero que disfruten el capitulo de hoy <3

¡Nos leemos!

-Himari.