Detrás de una máscara (Germán Garmendia y Tu)

•Capítulo 27•

Capítulo dedicado para valeyfede151215
Te mando saludos <3

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Narrado por TN

Las luces estaban apagadas, la única luz que entraba en la habitación era la de la luna. Era de madrugada y no lograba conciliar el sueño.

Nathan:¿Estás despierta ________? -escuché su voz decir

Yo:Si, ¿Tampoco puedes dormir?

Nathan:Lo había hecho, pero tuve una pesadilla que me despertó. Nada de qué preocuparte.

Yo:Oh. -simplemente respondí

Nathan:He tenido algo en mi mente _________. Creo que tu y yo somos iguales. A los dos la vida nos ha tratado como mierda, y solo estamos intentando sobrevivir día a día evitando destruirnos. -Tomó mi brazo y empezó a pasar las yemas de los dedos por las cicatrices.- Hay algo muy hermoso que le encuentro a las cicatrices. Eso es algo que el nunca podrá entender

Yo:Nathan, por favor no hablemos de eso ahora, solo quiero dormir

Nathan:________, me gustas, de verdad me gustas mucho. Él te ignora, el no hace nada y tu lo sigues extrañando, apuesto a que ni siquiera se está preguntando donde estas ahora.

Yo:Deja de decir eso, yo si le importo. Eso me lo ha demostrado muchas veces

Nathan:¿Entonces dónde está? ¿Porque te dejó sola en primer lugar? ¿Eh? Yo nunca te dejaría ir si me das esa oportunidad

Yo:Deja de hacerme esto Nathan. Nunca fui esa chica de la cual todos estuvieran enamorados, no se que decir en una situación así

Nathan:Dime que te quedaras conmigo.

Yo:No te puedo decir eso.

Se voltea, y se va acercando más a mi, quedando frente a frente, nuestras respiraciones se mezclaban.

Nathan:_________, tal vez toda la vida has creído que no eres especial o importante para nadie, yo también he tenido ese pensamiento. Pero deja me decirte que eres especial para mi, te digo eso por si nadie nunca te lo había dicho.

No estoy segura si alguna vez me han dicho. Pero me hace sentir tan bien que me lo diga, que valgo algo para alguien, de verdad me hace sentir querida. Le di un beso en la mejilla, pero después cuando volví a mirarlo a los ojos, había un brillo, sabía que se brillo era por mi.

Esta vez, yo me incliné a besarlo, hasta que todo dentro de mi se derritió y por el resto de la noche solo estuve en vuelta en sus brazos.

(. . .)

Desperté al siguiente día. Aun seguía en la misma habitación. ¿Todo lo de anoche fue real? Yo hubiera creído que fue un simple sueño, pero fue real.

Fue real...

¡Fue real! ¡Hice todo eso! ¡Lo bese, vine a su casa, dormí con él! Nunca había estado tan decepcionada de mi misma. ¿Como fui a hacer eso? ¿Porqué me deje llevar? ¡Soy un asco! ¿Como voy a explicar esto? Lleve mis manos a mi frente, empecé a llorar. Quería que todo esto fuera un sueño, pero no es así. Nunca me había odiado tanto como ahora. Siempre había despreciado y hablado mal de las personas que engañan a sus parejas, decía que no hay ninguna excusa y que si hacen eso es porque de verdad no aman a esa persona. Pero ahora yo lo hice, ¿Eso que dice de mi?

Lo único que hago es arruinar las cosas buenas que tengo en la vida. Siempre.

Me tengo que irme de aquí en este momento. Nathan ya no estaba a lado mio ni en ningún lugar de la habitación. No deje que eso me detuviera. Me volví a poner la misma ropa que tenia anoche, rápidamente mire al reloj y era la una de la tarde. ¿Enserio me dormí tanto? Bueno, para ser justa, me quede despierta hasta la madrugada.

Salí de la habitación, no recordaba muy bien el lugar, pero tampoco era muy grande como para encontrar la salida. Caminaba a paso rápido, estaba a pocos metros de la puerta, cuando choque con el cuerpo de alguien más, que tenía en sus manos un plato con comida que dejo caer, haciendo un ruido bastante fuerte.

Verónica: ¿Tú que haces aquí?

Yo:Er...yo... –me congelé, no sabia que decir

Nathan: ¿________? –apareció de repente. Solamente tenía envuelto una toalla en su cintura, el resto de su cuerpo estaba mojado como si se estuviera saliendo de lucharse.– No sabía que ya te habías despertado

Verónica:Nathan, ¿me podrías explicar que hace ella aquí?

Nathan:Verónica, anoche la invité buen rato, pero ya después no la pude dejar ir porque empezó a llover muy fuerte. –Verónica cruzo los brazos sin creerle– Piensa lo que quieras entonces. –se voltea hacia mi y me toca el hombro– _________ puedes comer cualquier cosa que haya en la cocina. Solo voy a vestirme, ahora regreso. 

Se fue, metiéndose en su habitación. Verónica solo estuvo observándome por un par de segundos. Entré a la cocina, no me iba a poner a hacer un desayuno/comida muy elaborada, así que me conformé con un poco de cereal. Me senté en la mesa, donde sin esperarlo Verónica se sienta frente mío.

Yo:Verónica, solo quiero decir...

Verónica:Calla. ¿Que se supone que haces aquí con mi hermano? ¿Durmiéndote en su habitación? ¿Acaso no tienes novio?–baje la Mirada–¡Por Dios! ¡Jenni va a estar feliz cuando escuche esto!

Yo:¿Que? ¡No! No le digas nada por favor.

Verónica:Para ser honesta, cuando te vida por primera vez, no podía creer en las historias que me había contado Jenni, de como le habías quitado su novio y todo eso, no pensé que fueras esa clase de chica...¡Vaya sorpresa!

Yo:Mira, como ya te lo dijo tu hermano, solo me quede la noche porque la lluvia estaba muy fuerte, eso es todo.

Verónica:Mmm...pues no se si tu novio piense así. Ya lo descubriremos. –sonríe maliciosamente

Nathan:¿Algo esta pasando aquí? –preguntó a notar mi cara y el estado en la que me encontraba

Yo:Me tengo que ir ya. –me levante de mi asiento y me acerque a la puerta

Nathan: Oh, bueno al menos déjame acompañarte afuera

Yo:No hace falta, puedo salir sola.

Salí corriendo de ahí, baje y me encontré de nuevo en la calle. No se que hacer, ¿Deberia decirle directamente antes de que se enteré por medio de alguien mas? Sería la respuesta más lógica, pero no tengo el valor de mirarlo en la cara y decirle todo lo que paso la noche anterior, le destrozaría el corazón y nunca me lo perdonaría.

Corriendo llegué al edificio donde vivía. Aún no podía entrar al departamento, no sabría explicarle nada a Germán. Necesito hablar con alguien...¡Ashley! ¡Si! Ella me va a entender, ella me ayudará con esto.

Subí directamente al piso del apartamento de Ashley, toqué la puerta desesperadamente. Ella abrió, parecía aliviada al verme. No le di la oportunidad de decir nada, yo hablé primero.

Yo:¡Oh Ashley! –exploté en llano en sus brazos– ¡No creerás lo que hice! ¡Acabo de arruinar todo!