45. Tiempo familiar

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La miré fijo a los ojos y sentí una pequeña presión en mi pecho.

— Creo que sí — le dije.

— ¿Crees? — dijo confundida.

— Mamá, la verdad es que nunca me pasó algo así. Yo...

— Eres un don Juan – me acusó con indignación.

— Sí, puede ser...

— ¿Con cuantos has estado? — me preguntó.

—Mamá, ¿no crees que...?

— Contéstame, Jonghyun — sentenció con firmeza.

Sonreí ante su enojo. Siempre quise que mi madre me regañara.

— No lo sé – contesté.

— ¿Cómo que no lo sabes?

— No, no lo sé. Nunca me puse a contar.

— Oh, eres un desconsiderado, mujeriego. No puedo creerlo...

— Mami, ya no me regañes. Sabes que solo tú me interesas — le dije poniendo mi mejor cara de niño bueno. Ella me miró bien y sus ojos se humedecieron. Sonrió y volvió a abrazarme.

— Aún consigues comprarme — dijo sin soltarme. Se alejó y me miró – Pero creo que eso ahora no es así... porque he visto cómo lo miras.

—Él no solo es hermoso por fuera, también lo es por dentro — le conté.

— Sí, se nota y mucho.

— Te extrañé tanto – le dije.

— Y yo a ti, bebé — me dijo y se puso de pie entregándome su mano — Vamos afuera.

Tomé su mano y caminamos hasta la parte trasera de la casa. Salimos y detuvimos nuestros pasos al ver cómo Kibum y Minhee reían y jugaban con las muñecas.
Sentí un cosquilleo en mi estómago. Él era tan bello, y tan dulce. Ambos se giraron a vernos. Minhee se puso de pie y corrió hasta nosotros.

— Tu mejor amigo es muy lindo, hermanito – me dijo sonriente.

— ¿Qué es eso de 'hermanito', enana? Aquí la hermanita eres tú — le dije.

— No, yo soy toda una mujer. Sino pregúntale a mamá, ya me maquillo — dijo y colocó sus dos pequeñas manos sobre su cintura parándose coquetamente.

— ¿Y acaso tú permites que se maquille? – le dije a mi madre.

— Oh, no me digas que vas a ponerte igual de insoportable que Junsu con ese tema. Ella es una niña y a todas las niñas les gusta maquillarse y jugar a ser grandes – me dijo mi madre.

Kibum se acercó a nosotros. Lo miré y tuve muchas ganas de besarlo, pero no podía hacerlo delante de mi hermana y mi madre.

— Estábamos divirtiéndonos un poco — nos dijo él mientras le sonreía a Minhee.

Mi madre se acercó a él y lo abrazó. Un tanto confundido, Kibum le devolvió el gesto.

— Muchas gracias, Kibum... Jonghyun me contó que tú conseguiste el número. De verdad no sé cómo voy a hacer para agradecerte esto — le dijo y se alejó.

— Primero que nada, Feliz cumpleaños, señora Kim – dijo.

— Ya no me digas señora. Dime Hanna, lindo. Nada de formalidades conmigo, al fin y al cabo eres el chico que me devolvió a mi hijo.

Arriesgada Adicción • JongKey  [ADAPTACIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora