Mayor que yo [✔️]

Cap 27: necesito ayuda.

Necesito ayuda, necesito conseguir la manera de sacar mis manos de aquí, así intentaré escaparme e iré a la polícia.

Ya no soy virgen, pero mi intimidad está rota como si hubiera perdido la virginidad ahora.

Las sabanas con sangre... mierda.

Mi cara está completamente bañada en lágrimas y en serio ya no sé qué hacer.

Intento moverme pero mis dolores no me dejan.

Escucho como la puerta en seguida vuelve abrir y acto seguido me estremezco.

—Te traje comida...— dice calmado y con cara de culpabilidad.

Yo decido no hablar... algo muy extraño en mi...

Solo asiento. Con miedo.

Luego de colocar el plato con una deliciosa pasta en la mesa de noche se acerca a mi.

Yo me intento alejar... pero no puedo, estoy amarrada.

—Tan solo... voy a desamarrarte...

Me desamarra tranquilamente.

Cuando me suelta camina hacia afuera de la habitación, cerrando la puerta atrás de él.

Vuelvo a respirar.

Ahora lo único que tengo es miedo, por eso, tengo que salir de aquí.

Agarro los cubiertos y empiezo a comer... necesitaba comida.

¿Será que él cocinó?... no lo creo.

Luego de acabar... devuelvo cuidadosamente el plato con los cubiertos a donde estaban.

Me levando y rápidamente me detengo... pffff... que dolor.

Cuando me logro levantar por completo busco algo con que taparme, ya que mis pantaletas ya las subí.

Y si... llena de sangre y todo, ya la subí, tengo que escapar lo más rápido posible de aquí.

Cuando me doy cuenta que simplemente no tengo nada para vestirme decido abrir la puerta silenciosamente y con mucho cuidado.

Ufff... no hay nadie.

Me encuentro con una enorme casa, elegante... y continúa a ser blanca como el cuarto... limpia.

Empiezo a caminar por el pasillo para encontrarme con unas escaleras elegantes que dan para una enorme sala.

Me volteo por precaución y lo único que veo es que en el piso blanco y limpio hay sangre, a las gotas, todo por mi intimidad... y ni siquiera es el período...

En seguida empiezo a bajar por las escaleras olvidando lo del pasillo.

Aún no he visto a nadie... que extraño.

Sigo caminando entre la sala y veo la puerta.

Empiezo a acelerar el paso... digamos que no es fácil caminar con un dolor insoportable.

Cuando agarro la manilla para abrir la puerta... lo escucho... lo escucho de nuevo.

—¿Qué haces?

Al escucharlo abro la puerta rápidamente para salir corriendo.

La puerta se abre y sin acordarme que manche toda la casa de sangre y que estoy en pantaletas salgo corriendo.

Escucho como pasos pesados que van atras de mi.

Continúo corriendo dentro de lo que cabe entre un jardín enorme... donde al final veo una cerca de hierro la cual voy a tener que saltar.

Los pasos los escucho cada vez más cerca... mierda.

Y pasa lo que no debía...

Siendo sus enormes manos al rededor de mi cintura.

—¡Déjame!— grito desesperada.

Él tapa mi boca con su enorme mano. Y así me arrastra hacia la casa, de nuevo. Peleo pero no sirve de nada. Al abrirse la puerta él me lanza hacia el mueble elegante negro de la sala.

—¡Te dije que esta es tu nueva casa!....— luego de ese grito suspira desesperado —no te quiero lastimar más...

—¿Lastimar más? ¡¿lastimar mas?! ¡¿aún piensas en lastimarme más?!... no sé cómo eres capaz de hacerle alguien esto... ¿no te da vergüenza... arruinarle la vida a alguien así...?

—Tu no sabes lo que he pasado yo... así que cállate... yo te lo advertí... te dije que soy obsesivo...

—Y de eso que has pasado tú... ¿yo soy la culpable?

—No...— dice con cara de culpabilidad enorme. Que no me da lastima ninguna.

—¿Entonces por qué me haces esto?

—No interesa...

—¡Si que interesa joder! ¿no entiendes que me estás lastimando? Me estás jodiendo la puta vida.

—Ya cállate antes de que lo siga haciendo...— dice suspirando de nuevo. Y decidí hacerle caso... callarme y tan solo mirar al suelo —Ve a descansar por favor... te lo suplico— dice calmo y acercándose a mi.

—¿Como voy a descansar?— digo otra vez empapando mi cara en lágrimas.

—Para por favor...— dice acercándose e intentando levantarme.

No quiero que me toque.

—No me toques...— digo limpiándome la cara.

—Vamos por favor...— dice apretando mi mano un poco suplicando.

Me levanto y noto como él mientras caminamos para la habitación, ve todo manchado con mi sangre.

—oh mierda— dice deteniéndose y colocándome frente a él.

Se agacha en frente de mi, su cara queda muy cerca de mi intimidad dañada. Aparta mi pantie y mete su mano ahí. Intento sacarla rápidamente, lo cual él no me deja.

—Solo estoy revisando...— dice tocándome.

—Me lastimas— continúo a insistir.

Él retira su mano, la cual tiene sangre, y se la ve, y luego me mira de nuevo.

—Lo siento...— dice con la cara cada vez más culpable.

—Vete a la mierda... ¿me violas y luego me pides disculpa? Vete, a la, jodida, mierda— digo apretando mis puños y piernas.

Él aprieta su mandíbula y cierra los ojos suspirando...

—No lo puedo evitar Melany...