Mayor que yo [✔️]

Capitulo 10: perdóname.

Luego de un camino incómodo y de miradas intensas llenas de deseo llegamos a mi pacífica casa.

—Gracias por traerme— digo tomando la manilla del carro para abrirlo, pero su mano enorme y cálida me toma la mia evitando que abra la puerta.

—Antes de que te vayas— dice bajando su cabeza —quiero que me perdones.

Yo asiento tratando de escapar y digo —no importa.

—En serio, solo olvidemos eso que pasó y quedemos solo como amigos.

—Ok, ya. Después de todo te vas a casar y también fue mi culpa.

—Ojalá no fuera así— dice posicionando sus ojos azules perfectos en los míos verdes —mirada perfecta, ojalá no fuera así.

¿Cómo pretende este imbécil que me olvide de todo si me mira así y me habla así?

—¿A qué te refieres con eso?

—No me gustaría decírtelo, no lo tengo permitido.

—Entonces no me dejes con la intriga imbécil— digo agresiva y con curiosidad extrema.

—No debería decírtelo, pero te lo diré, porque de todo el tiempo que tengo de trabajo tú eres la única que me proporciona confianza—me volteo esperando sus palabras y lo miro alzando mis cejas para que lo suelte de una vez —bueno vale, ese matrimonio es un contrato de empresas, así se beneficiarán las dos empresas, la de su padre y la mía.

—Joder, ¿o sea que te están obligando a casarte con alguien por la empresa?

—Si, nunca me casaría con la chillona de Claire, pero ella feliz de la vida.

—Ya veo— digo bajando la cara — así que esto lo explica todo...

—¿Explicar qué?

—Nada nada. Ahora, si no quieres casarte ¿por qué le haces caso a las estupideces de la empresa?

—Porque— se aclara la garganta —por mi padre, él murió hace poco dejándome a cargo y haciéndome firmar el contrato de casamiento.

Joder...

Esto si es incomodo.

—Ehhh... Lo siento yo... No sa...

—No, no te preocupes, ahora de lo que te tienes que preocupar es de no joderme la vida.

—¿¡Joderte la vida!? ¿¡Ahora qué hice!?

—¡Ser jodidamente hermosa!— me grita muy cerca de mi.

Esto me acaba de paralizar el corazón pero al instante mi corazón empieza a entrar en acción acelerándose.

Me muerdo el labio y decido salir.

—Gracias por traerme— suspiro y salgo del carro cerrando delicadamente la puerta atrás de mi.

Le sonrío y me volteo alejándome.

Antes de abrir la puerta escucho —puedes comenzar por no sonreírme así— y con eso escucho su carro arrancar.

Mierda... Eso fue intenso.

¿Un hombre de veintisiete años fijándose en mi?

Esto...Dios mío tengo que llamar a Lisa.

A ver ¿qué hora es?, las... 2 am.

Mejor la llamo mañana, ahora.... Espero que mamá esté en casa. No me gusta que trabaje hasta tan tarde.

Al entrar veo como mamá está dormida en el sofá pacíficamente con su pijama largo.

¿Acaso me estaba esperando? Espero que no.

Camino lentamente hasta mi cuarto con mi corazón acelerado.

Sin mentir, mi corazón continúa acelerado.

Me cambio tranquilamente y me acuesto a descansar.

Esta noche fue... Pffff... Agitada.