¿Puedes Volver A Enamorarte? (Ver. 2021)

6 [Editando]

- ¿Setoguchi san?

Empezaron a caer lágrimas, de ese tipo de lágrimas que por más que no quieras mostrar, terminan cayendo y muestran lo débil que eres sin ninguna compasión.

- Siempre diciendo cosas que me terminan haciendo llorar, si no fuera por tu excesiva amabilidad, sinceridad, tu forma de sonreír, todo lo que me gusta de ti, yo podría olvidarlo y volver a mi vida normal pero ahora que lo he conocido, no creo poder vivir sin usted.

Sus ojos seguían soltando lágrimas y
dudando si debía de de abrazarla o no me fuí acercando, hasta que quede justo delante de ella sin nada que nos impidiera estar juntos. La abracé y ella ocultó su rostro en mi pecho.

Estuvimos así unos cuantos minutos, hasta que él levantó mi barbilla y me hizo verlo directo a los ojos, por un momento pensé que me iba a besar, de el impacto deje de llorar y sólo quedaron rastros de lo que alguna vez fue llanto, él limpió mis ojos y me susurro al oído, "estoy seguro de que ya no podría vivir sin ti". Eso hizo que me sonrojase, y volví a esconder mi rostro en su pecho, pero esta vez pase mis brazos por su espalda.

Nos fuimos juntos a casa, nuestras manos rozaban la una con la otra

- Por cierto, ¿Quién es el chico que está pegado a ti como un chicle?- dijo con un tono que aunque parecía que quería ser casual, como si no le importará, sonaba irritado.

-¿Kotarou?

-¡Ah ya veo! Con que ese es su nombre - dijo con el mismo tono - Pero dime ustedes ¿Qué son?

- Bueno pues... nosotros tenemos una relación muy estrecha

¡¿Relacion?! De que está hablando, entonces nosotros que somos en este mome...

- Somos amigos desde la infancia hemos estado juntos desde hace mucho tiempo y es casi un hermano para mi - dijo ella sacandome de mis pensamientos.

Ella me contó anécdotas de el Kinder y la primaria, también me hizo recordar el día en que nos conocimos, al igual que sus pantis de panditas me reí sólo para disimular la vergüenza. Ella me pegó y persiguió por unas calles.

La deje en su casa y me fui a la mía en el camino me puse a imaginar a una Hina pequeña.

Pero cuando llegué a casa mi mente volvió a divagar, nosotros en este momento ¿Qué somos? ¿Ella sabrá lo que yo quería decirle? No, no lo creo en ningún momento mencione la palabra novia, ¡pero que tonto soy! Mañana se lo diré, claro que si, no sabia que tan difícil iba a ser en ese momento.

Hina regreso con una sonrisa que nunca le había visto en el rostro parecía ¿Enamorada? No, claro que no pero en que estoy pensando a ella le habrá pasado algo muy bueno en la escuela y por eso esta así, claro no hay de que al.... terarse, ella soltó un suspiro era ese tipo de suspiros que no se podían confundir por ninguna razón era el suspiro que lanza cualquier enamorado.

Me acerque a ella la mire con cuidado,
tardo un poco en darse cuenta que estaba ahí

- Ah! ¿Hermano pero que estas haciendo? ¿Qué no sabes que mirara a alguien fijamente a la cara es de mala educación?

- ¿Hina?

- ¿Hermano te pasa algo?

- Mejor dime ¿A ti te paso algo?