Cap. 4

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Narra ___.

___, escúchame.

¿Tú otra vez? ¿No te bastó con arruinar mis amistades?

Flashback.

Mientras todos se despedían, una niña de ojos color miel, estaba viendo fijamente a sus mejores amigos despedirse. Ella se acercó para desearles buena suerte. Sin embargo, la horrible presencia en su interior, soltó unas desagradables palabras:

-Espero que ninguno de ustedes vuelva. Odiaría tener que ver sus caras nuevamente.

-Nosotros esperamos jamás volver a verte-le respondieron sus ex amigos. , para luego marcharse.

Fin flashback.

Recuerda que todavía eres mi siguiente reencarnación. Sólo te aconsejaré algo. Despídete de tu hermano. Despídete de todos. Después de que logre controlarte por completo podré  destruir a los caballeros dorados desde adentro...

Tu lo has dicho. Cuando logres controlarme. Te advierto que no me rendiré sin pelear.

Eso lo veremos.

Dijo para luego quedarme en la total oscuridad.

Fin narración.

Narra Airoria.

Estoy desesperado. Mi hermana no ha despertado todavía. Sigue inconsciente. Después de que tratara  de elevar su cosmo hasta el punto de casi morir, Mu logro sacarla de ese trance en el que la tenía Artemisa. Ella se desmayó, la trajimos a un hospital, y aún sigue dormida... Estoy en la sala de espera con Milo, Mu y Shaka.

-Tranquilo, Airoria, ella estará bien-dice Shaka apretándome un hombro en señal de apoyo.

-Eso espero, Shaka-digo bajando la cabeza. 

Una enfermera sale a preguntar.

-¿Familiares de la señorita ___?

-Es mi hermana-digo mientras me levanto.

-Ella ha despertado y se encuentra en un buen estado. El médico dice que le dará el alta mañana. ¿Gusta visitarla?

-Si, gracias-ella me señala una habitación al final del pasillo. Me acerco y, cuando estoy por abrir la puerta, escucho una conversación algo extraña...

-¿Qué más quieres?-esa voz es la de mi hermana. La reconocería donde fuera-Seré tu reencarnación. ¿Qué más quieres de mí?-exige saber.

-Es simple, quiero que descubras las debilidades de los caballeros dorados-esa es Artemisa.

-Con gusto-¿Qué? ¿Está aceptando un trato con Artemisa? No sería capaz. ¿O sí?-Vuelve en unos mil años y te ayudo. Jamás te ayudaría para dañar a la gente. Eso lo harás tu solita. Yo no seré tu maldito títere. ¿Me viste hilos acaso? Nunca seré tu marioneta. Jamás podrás controlarme. Hasta que consuma toda mi vida. Pelearé contra ti. No me vencerás tan fácilmente. ¿Qué me has creído? Compartimos mi mente. Se lo que piensas. Se lo que planeas-hay silencio por un rato hasta que mi hermana vuelve a hablar-¿Sorprendida? Esta batalla la ganaré yo y tú la perderás. Nunca vas a vencerme. Nunca...

Jamás había oído hablar así a mi hermana, salvo por una vez...

Flasback.

Estábamos paseando por la aldea. El día antes de su desaparición. Pasábamos por los diferentes puestos, ella quería comprar una flores para la tumba de nuestro hermano.  Yo no quería acompañarla porque él traicionó al santuario. Trató de matar a la Diosa Athena. ¡¿Quien es capaz de hacer eso?! Es algo imperdonable. Ella al notar mi disgusto me preguntó:

Los caballeros del zodiaco (y tú) PAUSADAWhere stories live. Discover now