Enamorada, ¿del rebelde?

Capítulo 6

- Mama- digo yo sorprendida- ¿Qu...que pasa?- pregunte nerviosa.

- ¡Nada de que pasa, explicame ahora mismo que paso ayer!- continua gritando hecha una furia.

- Bueno, en realidad no me acuerdo- le digo más que nerviosa.

- ¿Entonces bebiste?- pregunta algo decepcionada- Mierda Astrid, te dije que no lo hicieras- eso es lo que tiene una madre sobreprotectora, en fin.

- Lo se mamá, pero no quería...- ella me interrumpe.

- Menos mal que me quedan de esas pastillas- me dice acercándose a mi, me coge del brazo y me arrastra a la cocina, Heather va detrás nuestro, mi madre me explicó como iba y me la tomé.

- Bueno, Heather ¿vamos a...?- mi madre me interrumpe.

- No, Heather, puedes irte a tu casa, por favor, estas castigada Astrid- le pide mi madre y ella asiente, la bronca que me espera es pequeña...

-¡En que mierda pensabas!- me grita mi madre.

- Mamá, yo...- me interrumpe.

- No Astrid, estoy decepcionada- me dice y yo bajé la mirada.

- Ya se mamá, no quería- dije y mis ojos se empezaron a cristalizar.

- Ven aquí Astrid- dice mi madre abrazándome.

- Lo siento mamá le dije.

- Tranquila- me dice acariciándome el pelo- Pero no cambia el echo de que este decepcionada, y sigues castigada- dice al separarse.

El fin de semana pasó demasiado aburrido, sin poder salir, sin móvil, sin tele, sin ordenador... Cuando por fin llego el lunes, me despertarme seguidamente me vestí y baje a desayunar, me despedí de mi madre y fui al instituto.

- Astrid, ¿donde mierdas te metiste en la fiesta?- me pregunta Elsa.

- No quiero hablar de eso- digo dirigiéndome a clases. Al llegar me senté y puse la cabeza entre mis brazos.

- Hombre, mira a quien tenemos- dice una voz femenina, genial, lo que me faltaba, Vanesa, la puta del instituto, no la soporto y encima esta medio obsesionada con Hiccup, en fin, nunca hablamos pero cuando le da por hablarme es para meterse conmigo o algo por el estilo.

- ¿Que quieres?- le pregunto mirándola con algo de odio- No estoy de humor.

- No esta de humor y a mi que más me da- dice e iba a continuar hablando pero el profe llegó. Que bien, ahora toca historia, que se note el sarcasmo, no quiero hacer clases.

Mire hacia Heather y vi que no paraba de mirar al profe, ¿que mierdas?, en fin empecé a copiar los apuntes y bla, bla, bla.

- Hiccup y Jack, ¿queréis prestar atención?- les riñe Patapez.

- Si profe- dicen los dos a la vez.

Cuando acabaron las clases y era la hora del recreo fui al patio, me apetecía estar sola, no me encontraba muy bien. Estaba comiéndome una manzana debajo de un árbol que había por el patio.

- Oye, ¿que te pasa?- escuche que preguntaban, me dí la vuelta y era Hiccup- Enserio, ¿que te pasa?- vuelve a preguntar sentándose a mi lado y sacando un bocadillo.

- Nada- digo y le doy un mordisco a la manzana.

- Tu cara dice otra cosa- me dice y le da un mordisco a su bocadillo.

- Bueno, no me encuentro bien- digo.

- Pues mejorate- dice y yo le agradezco- Astrid, lo del otro día- dice rascándose la nuca nervioso- Bueno, ¿que hacemos? ¿Hacemos como que no ha pasado nada?- me pregunta algo sonrojado y nervioso.

- Si, claro- le contesto, esta loco, como quiere que olvide eso, es verdad que no recuerdo nada, pero... mierdas, yo me entiendo.

- Lo siento- se disculpa, otra vez.

- ¿Pero por que?, tu no has hecho nada- digo.

- Bueno, no se, por mi culpa, bueno, ya sabes- dice moviendo las manos.

- Calla anda- digo negando y avergonzada.

- Vale- dice riendo y yo reí con el.

Seguimos hablando de tonterías hasta que sonó él timbre y fuimos a clases. Cuando acabaron Heather salió muy rápido, lleva unos días rara, la seguí pero al poco rato la perdí. Seguí caminando pero una chica de mi clase me paró.

- Astrid, ¿Te has enterado?- escuche que me preguntaba la chica.

- ¿Que pasa?- pregunto confundida.

- Es horrible, Heather y el profe de historia salen juntos.

¿QUE?!

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