Holly. #JusticeAwards2017 #WOWAwards2k17 #ConstellationAwards

Capítulo 5.

─Que bueno es volverte a ver ─. Una sonrisa gigante se refleja en mi rostro. Necesito respuestas después de mi encuentro con la doctora, planear algo con ella y ver nuestras opciones. Tiene que ser algo conciso, lógico y algo que no arriesgue nuestras vidas. ¿Se podría decir que confío en ella? Podría ser, aunque sea un poco. Prefiero ciegamente confiar en ella a que todo lo que nos rodea.

─¡Jeremiah! Es tan bueno volver a verte, pensé que nunca más te vería porque dijiste que nos veríamos aquí y te demoraste, entonces pensé que no querías verme. ¡Pero aquí estás! ─. ¿Por qué me habla tan rápido? La siento diferente a que ayer. En mi habitación estaba con una actitud dominante, misteriosa... ¿pero ahora? ─. Como no venías me senté a leer un rato para matar el tiempo, ya sabes, y dejar de pensar en porque no estabas junto a mi. Nadie quería hablarme, intenté hablar con el viejo de allá, el de cabello gris, pero me dijo que lo estaba volviendo loco y me aleje de él. Lo gracioso es que el ya está loco, ¡es esquizofrénico! Las ironías de la vida. No te recomiendo acercarte a él... Bueno, como te decí-

─¡Holly! Cálmate por un minuto, ¿sí? Date un minuto para respirar. Estás muy exaltada, ¿has tomado algo? ─. Sé que me debería preocupar por estos cambios de actitud repentinos de un día para otro, pero recién la conocí ayer... ¿O hace dos días? Ni siquiera tengo un recuerdo claro del tiempo aquí.

─Sígueme, no puedo hablar de eso aquí, hay muchas personas a nuestro alrededor y todas nos escuchan. Y no podemos permitirnos eso si vamos a hablar acerca de lo que querías hacerme... ¿verdad? ─. Me guiña el ojo y siento los ojos de todo el mundo en nosotros ─. Dirígete a tu habitación, yo saldré primero y nos encontraremos ahí ─. Y sin esperar mi respuesta, ella sale rápidamente por la puerta para luego subir las escaleras. Maldita mierda, ¿qué tan difícil es descifrar a una persona? No entiendo que intenta lograr. ¿Qué quiero hacerle? Estoy tan confundido en este momento.

Una vez que la he perdido de vista, comienzo a salir de la habitación cuando un anciano en silla de ruedas me jala del brazo. ¡Después de esto, no creo que vayas a necesitar ir a almorzar!. Le devuelvo una mirada confusa y sigo con mi camino. Los enfermeros me observan caminar, sin ningún gesto que destaque, mientras el resto de pacientes me sonríen. ¿Qué les pasa a todos en este sitio? Subo las escaleras y camino por los pasillos hasta llegar a mi habitación. Ahí está ella, sentada en mi cama, mirando detenidamente la pared.

─¿Holly? ─. Espero una respuesta de su parte, sin conseguir ninguna. ¿A dónde se fue toda su energía? ─. ¿Me estás escuchando? No puedes estar toda exaltada, hacer comentarios confusos y luego traerme a mi habitación para no darme una respuesta.

─Es muy bonito Jeremiah, el color del cielo cuando el sol desciende es inigualable, los pájaros que migran de este a oeste, el mar está tranquilo, se ve perfecto como para ir a nadar. Deberíamos ir ahí Jeremiah, vámonos a la playa, salgamos de aquí. — En su rostro se refleja una mirada perdida, llena de sueños que al parecer, nunca llegaron a cumplirse. ¿Quién la culpa? Está aquí encerrada, igual que yo.

─Holly... te das cuenta que solamente estás observando una pared blanca, ¿verdad? No hay nada al frente tuyo. ─ No logro comprenderla. No sé si está bajo el efecto de algún alucinógeno o si solamente está bajo algún ataque de locura —. ¿Has tomado algo? ¿Necesitas agua, lo que sea?

— Estoy bien, solo me perdí en mis pensamientos. Ese fue el día más feliz de mi vida, el que te describí, extraño ser así de libre. Ir a la playa, observar el atardecer, observar el mar... eso me pone tranquila, de buen humor. — ¿Para qué me quería traer a mi habitación? ¿Para contarme un recuerdo suyo? Me acerco a ella y me siento a su lado. Ella se recuesta encima mío, mientras me da la mano. — Eres la única persona que me escucha cuando hablo, ¿sabes? Todos dicen que están hartos de escucharme, de verme, están hartos de mí porque dicen que los vuelvo locos.

Ya entiendo por qué lo dicen.

— ¿Para qué querías venir a hablar a mi cuarto? ¿Qué es lo que me tienes que decir que nadie más puede escuchar?

— Para serte honesta, nada. Como te vi de lejos hablando con la doctora, pensé que habías sacado algo de información valiosa... Solo quería hablarte, estar a solas contigo. — Debo estar volviéndome loco de verdad, ¿está mandándome una indirecta de querer algo conmigo? Decido no contestar a eso, no puedo arriesgarme a tener sentimientos por ella. Es hermosísima, pero no puedo darme el lujo de pensar en estas cosas en la situación que me encuentro.

—Conseguí lo que se podría llamar "información valiosa", aunque sea para mí. Tu llevas más tiempo aquí dentro, por ende, ya debes saber todo esto. — Ha dejado de observar la pared, ahora me mira detenidamente a mí. Tengo un serio problema con su mirada, es imposible no perderse en ella. — El edificio tiene tres pisos como sabrás y supongo que ya sabes la estructura del edificio. Lo que me preocupa es el jardín, la doctora dice que podré salir cuando esté más estable, ¿pero quién sabe cuándo será eso en base a su criterio? — Holly se ríe, nuevamente no es algo que me sorprenda.

— A mí nunca se me ha permitido salir al jardín, dicen que me pierdo mucho en mis pensamientos teniendo contacto con lo que se encuentra afuera... algo así, nunca entiendo bien lo que me dicen los doctores. Pero probablemente tú logres salir, te ves estable, ¿sabes? He estado tanto tiempo encerrada en este lugar que la gente ya me está contagiando su locura... Pero en fin, volvamos a pensar en una manera de escapar. A mí me tienen bien revisada, porque piensan lo peor de mi... — Vuelve a reír, a veces pienso que es una risa nerviosa y que oculta algo detrás de ella. Pero nuevamente, siento que es pura paranoia ─. Por eso necesitaba hacer ese comentario abajo. Prefiero que los que me rodean piensen que vamos a tener sexo a que estamos planeando algo. De igual manera, podemos hacer los dos.

Una sonrisa sarcástica se forma en sus labios.

—Entonces, en ese caso.. ¿que me recomiendas? ─. Decido ignorar sus últimos comentarios. ¿Cómo respondo a eso de una manera que no suene como si quisiera eso?

—Lo único que se me ocurre, es como ya te dije, te veas estable para que te dejen ir al jardín, así investigas y encuentras una manera de salir y te ayudo a planear algo. Por mientras, como ya te dije antes, todo a su tiempo.

—¿Hay algo que pueda hacer por mientras? Mientras más espero, más tiempo me quedo aquí y más loco me vuelvo, ¡necesito salir de aquí ya! No estoy siendo paranoico ni nada, pero este lugar me da una mala vibra, una peor de lo que me daría una clínica.

—¿Será porque todos aquí están locos? —. Me quedo callado. Probablemente sea eso, pero prefiero no admitirlo. Ella nota mi silencio —. Bueno, no todos... estamos nosotros dos, ¿verdad? Sé que estás pensando que estoy loca, pero es el lugar, créeme, tiene ese efecto en ti y lo notarás con el tiempo... En fin, no me puedo quedar más tiempo. Si alguien nota que no estoy, se preocuparán y pensarán lo... peor. ¡Te veré después! — Ni siquiera me da tiempo de decirle algo, porque ya se ha parado y ha abierto la puerta, mientras camina dando pequeños brincos, como si fuera una niña pequeña. Tararea una canción de cuna mientras se desvanece en el pasillo.

Todo de lo que me habla me hace pensar más de lo que debería. ¿Por qué la tienen a ella en especial revisión? No sé si sea que no está permitido que un hombre y una mujer están en la misma habitación o algo externo, pero su historial en esta clínica no es la más clara. ¿Por qué sigo confiando en ella?

Tantas dudas y tan pocas respuestas. Todo a su tiempo como dice Holly, pero eso no quita el hecho que quiero entender esta situación. La imagen de Holly contando su historia sobre la playa me hace sentirme melancólico. Ella se acuerda de la playa como el sitio donde más libre se siente. A diferencia de ella, el simple hecho de pensar en la playa, las olas del mar, la arena.... me enferma. Desde ese día, yo no puedo relacionar la playa con tranquilidad ni nada parecido. Ese sitio, verdaderamente, es un maldito infierno.