Entrada N° 4.

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Tengo miedo, mucho miedo de publicar esta parte, siento que no puse suficiente ;-; ya sé que todo va demasiado rápido... lo siento, ojalá sea decente al menos... otra vez, no prometo una 5 parte, si un "lo intentaré"...

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Los días, las semanas y los meses pasaron, y mi confianza con Bonnie iba creciendo cada vez más. Chica se alegraba por mí y mi nuevo amigo, hasta me había regalado una estrellita de "Tercer amigo logrado" hecha con papel y coloreada con marcadores.

Sí, claro, todo muy bonito conseguir amigos y tal, pero, con el paso del tiempo Bonnie se volvía cada vez más... pegadizo. Y con eso me refiero que me abrazaba y me daba otras demostraciones de afecto cada vez que podía, aun así estuviésemos en público o con alguien. Ese alguien significa el pollo que tengo de mejor amiga, la cual, como no, no soportó su curiosidad y me preguntó varias veces sobre el estado de nuestra relación, poniéndome bastante incómodo.

El único que no estaba enterado de nada era Freddy ya que jamás logró vernos o algo... ni siquiera logró ver a Bonnie. Cada vez que intentaba invitarlo estando con el señor Fazbear él rechazaba con algo de violencia incluso sin decirle que estaba con él, como si supiera. Jamás entendí el motivo hasta hoy.

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-- ¿Qu-qué tema? P-pero por supuesto... que iría... -- El conejito me había invitado a su casa para hablar un tema en específico, lo dijo tan serio que empecé a hablar entrecortado y mi respiración se agitó como si nada. ¿Y si era sobre mí? ¿Y si sólo quería invitarme a McDonalds? ¿Y SÍ ME IBA A MATAR REALMENTE? Todas y esas preguntas cruzaron por mi estúpida y ansiosa mente al momento de decirme lo de la charla.

-- Lo siento, no puedo decirte hasta el momento. Te espero en 30 minutos cariño~ --

-- C-claro... adiós. – olvidé mencionar que también agarró la costumbre de decirme "cariño", "corazón" y demás apodos tiernos, de esa forma ¿cómo es que nadie pensaría que somos pareja? Hasta yo me confundiría.

Esos 30 minutos se me hicieron eternos y casi salté de felicidad al ver que el tiempo había avanzado lo suficiente como para prepararme e ir a su casa, que quedaba relativamente cerca de la mía. Al llegar me saludó con un beso en la mejilla y me dejó entrar.

Me calmé un poco al ver que me el tiempo pasaba y me trataba bien, me daba la tranquilidad de que no era sobre mí sobre lo que deseaba hablar o al menos que no la había cagado tanto. Comimos algo, vimos unas películas, y, luego de varias horas, la sonrisa que llevaba en su rostro se desvaneció en lo que me llevaba a su habitación y nos sentábamos en su cama, al fin íbamos a hablar del tema que me comentó. Mi corazón se aceleró, por más de que estaba casi seguro que no era sobre mi igual me puse muy nervioso, como cualquier ser común he de suponer.

-- Ey, Foxy... -- suspiró. – Ya ha pasado bastante tiempo en el que nos conocimos y creo que al fin puedo confesarte esto... -- se calló por un momento, para dejar drama en el aire supongo. -- ¿Recuerdas cuando me comentaste sobre tu trabajo en Freddy's? Realmente te aprecio, pero no aprecio a Freddy's... o a Freddy. –

-- ¡¿Lo conoces?! – Me sorprendí, creí que ellos jamás se habían conocido. Ahora, con sus próximas palabras, todo el rechazo tendría sentido.

-- Por supuesto que lo conozco... pero no por algo bueno. Resulta que tu amigo no... es la mejor persona del mundo. – sentí como su voz se empezaba a quebrar, era la primera vez que lo veía así y empecé a desesperarme, pero preferí que continuara. Sentía tanta presión el aire que no sé cómo no me aplastó. – Nos conocimos precisamente en Freddy's, mientras paseaba por ahí y hablaba con los clientes por diversión. Una cosa llevó a la otra y terminamos siendo amigos, para luego ser pareja... y ahí empezó la pesadilla. – unas lágrimas empezaron a salir de su rostro. – siempre me subestimaba... me decía cosas... que no valía nada y sólo estaba conmigo por pena... luego empezó el maltrato físico... me golpeaba si no hacía todo lo que él quería, si lo contradecía, si salía con otra persona... me volví su esclavo, hasta que... -- y ahí se quebró totalmente.

No podía, simplemente no podía creer lo que me decía. ¿Freddy, una mala persona? ¿Un abusador? ¿Cómo es posible? Y aún no me termina de decir todo. No sabía qué hacer, lo primero que se me ocurrió fue abrazarlo, acariciarlo y darle un pañuelo, todo con tal de calmarlo. Luego de un rato llorando en mi pecho y gastándose mis pañuelos se calmó y pudo seguir. -- Sé que probablemente no me creerás pero... intentó violarme. – y me volvió a abrazar tratando de no llorar. – Lo bueno es que me resistí lo suficiente como para frenarlo y escapé pero ¡su intención fue malvada! – por alguna razón mi sueño repetitivo volvió a mi mente, pero lo evadí. Intenté decir algo, pero no me salían las palabras. Simplemente no puedo imaginar a Freddy como un abusador y menor como un violador, pero alguien que esté mintiendo no se quebraría tan fácil.

– Lo bueno es que fue hace años y estoy recuperado, aunque aún me duele pensr en eso... pero, tú no eres así, ¿verdad? – se sentó de nuevo y me miró fijamente a los ojos, como si quisiera algo.

-- ¡P-por supuesto que no! Ahora entiendo todo tu rechazo... no... no puedo creer lo que me acabas de decir, pero no dudaré de ti... --

-- Genial~... -- al decir eso, se empezó a acercar lentamente a mí, y no caí en sus intenciones hasta que... me besó. Si antes me sonrojaba por sus elogios, ahora estaba caliente como un horno, intenté corresponder pero para cuando salí de mi shock ya había terminado. Mañana no tendría que trabajar pero, cuando miré el reloj, era de madrugada y cuando es de madrugada nadie está seguro, por lo que preferí, aunque incómodo, quedarme a dormir en su casa.

The way I ended here. | Fonnie |Where stories live. Discover now