#60

3.7K 197 6
                                    

Después de muchas risas de Ally y Lauren llegaron a la casa de Lauren. Ally había venido a la casa de Lauren para ayudarle a escoger la vestimenta. Ally le ayudo bastante, hasta que se decidió por un vestido negro.

-¿Y que dices?

-Bien, si vas a un funeral.

-¿Es muy elegante no crees?

-Sí...por que no te pones esto-Ofreció Ally exhibiendo un pantalón de mezclilla, una camisa negra junto con una chaqueta.

-Totalmente de acuerdo.

-Genial!

Cuando Lauren por fin estaba lista, salieron de la casa de esta.

-Ally te llevo a tú casa-Eso sonó más a una afirmación que en realidad una pregunta pero Ally lo rechazaría, ya que no le gustaba causar molestias en ningún momento, a pesar de ser tan buena gente con literalmente todo el mundo.

-No, no es necesario, mejor apresurate para no llegar tarde con tú amors.

-No Ally iras conmigo y punto, se que no eres muy de esto pero te lo mereces siempre me ayudas con todo sin esperar algo a cambio. Además hoy hiciste mucho por mi hasta acceder salir más temprano, hoy no aceptaré un no como respuesta.

-Vale vamos.

Las dos sonrieron. Después de todo Lauren era su mejor amiga y tenía razón a pesar de ser tan opuestas eran mejores amigas.

-Vamos a tomar un taxi, al igual tu casa queda cerca del colegio de Camz.

Tomaron el taxi, la mayoría del viaje fue en silencio, pero este no era incómodo en realidad ningún silencio entre ellas era incómodo, incluso cuando se conocieron esto era normal. Las hacía sentir más comodas ya que lograban comunicarse con miradas y esto era algo bastante útil. Cuando llegaron a la escuela de Camila Lauren se bajo y dejó todo pagado más el corto recorrido a la casa de Ally.

-Adiós, Ally gracias por todo.

-Hasta luego, buena suerte en la boda-Le guiño un ojo.

Lauren rodó los ojos y Ally frunció el ceño con aquel evento por parte de la ojiverde a lo que juntas rieron Lauren cerró la puerta del coche no sin antes darle un abrazo a su amiga.

Miró la hora en su móvil, quedaban aproximadamente dos minutos para que acabasen las clases en aquel establecimiento imponente. Lauren volvía a estar muy nerviosa faltaban unos minutos para conocer a los padres de Camila, se intentó tranquilizar mentalmente pero no tenía el mismo efecto que el suave trato de su amiga Ally.

Hasta que la vio, saliendo a toda prisa hacia ella, iba tan rápidamente que chocó con Lauren. Gesto que se le hizo muy tierno por parte de la que causó su torpeza en el día.

-Hola...lo siento mucho...yo.

-Camz no te preocupes ¿Vale?

-Vale...Oh! Lo siento-Dijo mientras depositaba un tierno beso en los labios de la ojiverde.

-¿Vas a seguirte disculpado por todo, bebé?

Camila de inmediato se sonrojo-Lo...oops.

-No importa, vamos-Dijo Lauren tomando la mano de Camila para iniciar el trayecto hacia la casa de esta. Al parecer además de Ally, Camila también podía tranquilizarla. Al pensarlo sonrió inconscientemente.

-¿Qué tal tu día Camz?

¿Camz? Lauren se mostraba cada vez más cariñosa y a Camila realmente le gustaba la forma en que lo hacía de alguna manera de sentía genial salido de los labios de Lauren.

-Bien, hoy me levanté con mucho ánimo y muy feliz, más de lo normal según mis amigas.

-¿En serio?¿Por qué?

-Vamos Lern tu sabes...-Dijo mientras un leve sonrojo aparecía en su rostro.

-¿Qué más tengo que hacer para que sea así todas las mañanas?

-En realidad, sólo con tu presencia me basta.

-De acuerdo entonces te recogeré todas las mañanas.

-¿En serio? Eso sería fabuloso-Dijo con los ojos iluminados; acompañados de una amplia y sincera sonrisa-Pero eso ¿No sería una molestia?

-Desde luego que no Camz por ti, claramente no lo es.

-Igual no tiene que ser todo los días.

-Intentaré que sean todos y cada uno de ellos.

Camila le sonrió por los detalles que Lauren siempre tenía con ella. Mientras Camila pensaba esto por alrededor de unos pocos segundos Lauren la tomó de la cadera y la alzó como a una novia recién casada; cosa que le hizo recordar los comentarios de Ally.

-Hey, no soy un bebé.

-Sí, eres mi bebé.

Lauren aún no había terminado la frace y Camila ya estaba con otro "Leve" sonrojo. Y no lo dejaría de hacer le gustaba la forma en que se veía Camila, tan cute.

Ya faltaban pocos metros para llegar a la casa de Camila. Pero el nerviosismo había desaparecido, no totalmente pero la gran parte de este si.

Al estar justo al frente de la casa Lauren bajo a Camila delicadamente con si pudiese quebrarse, respiro un poco; tomó la mano de su novia y finalmente golpeó.

WhatsApps | CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora