Iris (Thomas Brodie - Sangster)

Capítulo 19 : Hablame de ti

- El mío también

Jenn se quedó mirando la linterna que estaba en mi escritorio.

- Creí que entenderías algunas velas...

- De hecho las linternas son más seguras - me encogí de hombros - y es una ventaja que las baterías de algunas aún duren

- Claro... - Jenn me miró raro - apagaré algunas linternas, iré a dormir, tu deberías hacer lo mismo Y por favor ponte la pijama, no quiero que te duermas con tu ropa puesta

- Está bien - sonreí.

- Hasta mañana - besó mi frente y salió de mi habitación.

Me levanté de mi cama y cerré mi puerta.

- Ya puedes salir - avisé en voz.

Thomas salió del baño se sentó en mi cama, yo por otro lado tomé mi ropa de dormir y me encerré en el baño, me cambié lo más rápido que pude, cepillé mis dientes y al salir encontré a Thomas mirando una vieja fotografía mía en mi cómoda.

- No suelo vestirme así - hablé mientras ponía mi ropa en el cesto de ropa sucia.

- Yo no he dicho nada - sonrió.

- En mi último año de secundaria hicimos un musical, a muchas de mis compañeras de salón les gustó la idea de representar "Burlesque" - tomé la foto y la guardé en uno de los cajones de la comoda - Jenn tomó la foto por que sabía que nunca más volvería a verme vestida así.

- Como te dije, yo no he dicho nada - río.

- Oh, pero en el fondo si querías saberlo.

- Eso es cierto - acomodó un cabello detrás de mi oreja.

Me acosté en mi cama y Thomas me siguió, cerré los ojos y dejé que el sueño viniera a mi.

Mi ropa estaba completamente mojada, al igual que mi cabello y a penas podía ver algo a causa de la... ¿lluvia? Okay... Estaba lloviendo pero no estaba ni en la calle del departamento, ni en camino a la universidad, ni en ninguna parte de Inglaterra, pero por alguna razón sentía que conocía este lugar. De pronto una luces aparecieron y escuché un motor encendiendo, no muy lejos de mi había un garaje, un auto estaba tratando de salir de ahí, pero luego paró, un hombre de cabello marrón chocolate bajo de el, volvió a entrar al garaje y salió con una caja en los brazos, ahí lo reconocí... Tenía un nudo en la garganta ¿Como podía ser posible?

- ¿Papá? - llamé, pero a penas y yo podía escucharme - Papá - alcé más la voz.

El hecho que yo lo llamara no lo detuvo, siguió sacando cosas del garaje y metiendolas en el auto, de pronto empecé a escuchar golpes sordos sobre el vidrio, cuando di la vuelta pude ver que del otro lado de la ventana de una casa habían dos niñas en pijama gritando y golpeando la ventana sin parar. Tragué grueso... No era posible que esto estuviera pasando... No otra vez... Tenía el pasado sobre mi de nuevo.

El hombre... Mi papá subió al auto sin ningún remordimiento en su rostro y comenzó a retroceder

- No! - comencé a caminar en su dirección - No puedes hacernos esto otra vez, vuelve! - grité - Papá vuelve por favor .