enamórame // luke hemmings

Capítulo 18.

Pasan unos minutos antes de qué lleguen nuestros platos y comencemos a comer.
Mantengo mi mano en el muslo de Luke, provocando que se mueva, incómodo ante mi tacto.
Suspiro y subo mi mano a la mesa, no sé como hacer esto. No es algo qué sepa hacer, y creo qué nunca sabré como hacerlo.

Me levanto de la mesa y me dirijo al baño del restaurante, a un ritmo rápido. Cierro la puerta, girándome para observar mi rostro en el espejo. Sabía qué esto no duraría mucho, no soy ese tipo de chica.

Por primera vez, siento algo de asco al ver mi rostro en el espejo. ¿De verdad planeaba tener sexo con Luke para tenerlo de vuelta conmigo? No estoy segura de qué habría llegado tan lejos, tocar su muslo ya fue algo grande.

Recojo algo de agua entre mis manos y la llevo a mi rostro, refrescandome y alejando los pensamientos por un segundo. No me interesa en lo absoluto qué mi maquillaje se este corriendo. Quiero sentirme cómoda en mi piel, por como soy. No creo sentirme cómoda con kilos de maquillaje en mi rostro.

El sonido de la puerta al ser abierta me devuelve a la realidad, haciendo qué levante mi rostro como reflejo.

Pestañeo un par de veces antes de darme cuenta de qué él en realidad está allí, observandome, aliviado. Me mira de una forma un tanto extraña, como si no me hubiera visto en mucho tiempo.

Sus manos se posan en mi rostro, a médida qué corta el espacio entre nosotros. Sus suaves labios se posan en los míos y yo me conecto con él, rápidamente. No sé por cuánto tiempo nos hemos besado, pero quiero recuperar el tiempo perdido. Levanta mis piernas y me sube en el lavamanos, dejando su cuerpo entre ellas. No es un beso, apasionado, con otras intenciones.

Es un beso con sentimiento.

Es un beso real.

Nos separamos y Luke me sonríe, aliviado. Se acerca nuevamente hacia mí, cierro los ojos esperando a qué me bese y al notar qué no lo hará, abro los ojos de golpe. Me observa divertido y me encojo de hombros, con una sonrisa tímida.

 —Lo siento mucho, por todo. Te quiero junto a mí, Cassie. La verdad es qué no sé si llegaremos a estar juntos por siempre, si quiera sé si aceptarás mi propuesta, pero si no lo pregunto ahora, me arrepentiré por el resto de mi vida.

Pone su mano bajo mi mentón, obligándome a mirar sus hermosos ojos azules.

 —¿Quieres ser mi novia?

Me mantengo en mi silencio para ponerle drama a la situación y Luke comienza a mostrar una expresión arrepentida y preocupada en su rostro.

 —Tú que crees, Lucas.  —golpeo su hombro levemente y sonrío— Claro que sí.

Se acerca a besarme y yo pongo mi dedo índice en sus labios, deteniendolo.

 —Con una condición.  —la sonrisa en mi rostro se desvanece y lo observo seriamente.

 —¿Cuál?

 —Nunca me dejes.

 —Nunca.  —murmura con una pequeña sonrisa, entrelazando nuestros dedos.